Estados Unidos aumentará hasta 15.000 millones cúbicos el suministro de gas natural licuado a Europa este año. El acuerdo, que es un paso más del bloque comunitario en el objetivo para reducir en dos tercios la dependencia energética de Rusia este año, prevé que esta cifra pueda incrementarse en los próximos años. De hecho, a largo plazo, la Unión Europea aspira a tener una demanda anual adicional de unos 50.000 millones cúbicos hasta el 2030. Se trata, apunta el documento, de trabajar con los estados miembros para tener una demanda anual "estable" de gas licuado de los Estados Unidos hasta el 2030.
En la presentación del acuerdo, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha insistido que Europa tiene que reducir la dependencia de Rusia porque el Kremlin "manipula a los vecinos" con la energía y "utiliza los beneficios para alimentar la maquinaria de guerra". En una declaración conjunta con Biden, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha subrayado que el acuerdo contribuye a garantizar el suministro energético a Europa no solo para el presente, sino también para el futuro. El pacto también incluye que ambas partes incrementen los esfuerzos para reducir las emisiones de las infraestructuras de gas natural licuado, así como que la Unión Europea trabaje en nuevas infraestructuras para recibir estas importaciones. Además, la Comisión Europea se compromete a trabajar con los estados para impulsar la demanda entre abril y el octubre.