"Sí a la economía productiva, sí al diálogo social, y sí a la democracia". Con estas tres afirmaciones -que tienen cierto tono de campaña política- ha respondido Foment del Treball a la propuesta de reducción de la jornada laboral presentada por el gobierno de España. Su respuesta, de hecho, la ha hecho pública Josep Sánchez Llibre a través de un manifiesto firmado por 18 entidades empresariales de varios sectores. La crítica hacia el Gobierno de Pedro Sánchez y hacia la ministra de Trabajo Yolanda Díaz, han sido contundentes: "vulnera el derecho constitucional", "es una imposición", "es una decisión autoritaria" y va en la dirección contraria de una parte importante del tejido empresarial, representado en el manifiesto.
El documento, que se aprobó en la última reunión de la Junta Directiva de Foment, expone una batería de 15 estamentos sobre los mecanismos democráticos, el diálogo social y los intereses de las empresas, de los trabajadores y la economía en conjunto. El objetivo es, según Sánchez Llibre, es dar a conocer a la opinión pública y a los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados los efectos perjudiciales de la reducción de la jornada laboral para el tejido empresarial. "Queremos avisar de lo que les caerá encima en el supuesto de que voten a favor", ha afirmado Sánchez Llibre, antes de anunciar que, en breve, empezarán a reunirse con las diferentes formaciones políticas.
Sánchez Llibre se ha dirigido a Yolanda Díaz para manifestar que su entidad "no está en contra de la reducción de la jornada por principio, sino que lo está porque sea una ley uniforme para todos los sectores y empresas". ¿La vía que recomienda Foment? La de la negociación colectiva. Si se hace de manera uniforme y obligatoria, "tendrá unos efectos muy perjudiciales para la economía española y la empresa", con fuertes incrementos de los costes laborales y pérdida importante de productividad, ha alertado.
En la lectura del manifiesto, han acompañado a Sánchez Llibre los diferentes representantes de las otras entidades que han firmado el documento: Gremi d'Arts Gràfiques de Catalunya, Barcelona Oberta, FECIC, Fedequim, Unió Catalana d’Hospitals, ACRA, Institut Agrícola Sant Isidre, UFEC, Transcalit, Consell de Gremis de Catalunya, Federació Catalana de Càmpings, UPM, Confecat, Gremi de Restauració y CEDAC.
Los 15 puntos del manifiesto
Estos son los 15 puntos que conforman el manifiesto.
- "El valor del Diálogo Social se tiene que preservar. Defendemos el Diálogo Social y la negociación colectiva como un éxito democrático y el vehículo principal para la relación entre los agentes sociales.
- Estamos ante una injerencia inaceptable. La propuesta de reducción de jornada del Ministerio de Trabajo es una injerencia del Gobierno en ámbitos que corresponden a los agentes sociales mediante la negociación colectiva.
- Ausencia de diálogo real. Los intentos de la patronal para aportar propuestas flexibles fueron rechazados en un proceso dominado por rigideces e imposiciones del Ministerio de Trabajo.
- Impacto negativo en las empresas. La reducción generalizada de la jornada laboral por Ley comporta costes laborales significativos, especialmente graves para pequeñas y medianas empresas.
- Necesidad de equilibrio. La negociación colectiva permite adaptar las condiciones laborales a las características y necesidades de cada sector y empresa, a diferencia de una imposición uniforme.
- Problemas estructurales. El exceso de jornada no es un problema en el mercado laboral español; en cambio, sí que lo son la baja productividad, el absentismo, el paro y la falta de perfiles profesionales adecuados.
- Desvinculación de la realidad empresarial. La medida anunciada no tiene en cuenta la realidad de las empresas, su viabilidad económica ni los retos laborales actuales.
- Flexibilidad y competitividad. Acuerdos laborales tienen que promover la flexibilidad y la competitividad, aspectos fundamentales para garantizar la sostenibilidad empresarial.
- Costes añadidos. La implementación de la reducción de jornada supondría incrementos salariales, contrataciones adicionales u horas extras, afectando negativamente a los presupuestos empresariales.
- Impacto en sectores específicos. El sector de la atención a la dependencia sería especialmente vulnerable, con consecuencias graves sobre la sostenibilidad de estas empresas.
- Experiencias internacionales. Países como Alemania han conseguido jornadas laborales reducidas gracias a la negociación colectiva, no mediante imposiciones legislativas.
- Revisión de contratos públicos. Si la medida prospera, es imprescindible ajustar los importes de contratación pública para absorber el impacto.
- Fomentar el entendimiento. Apostamos por trabajar conjuntamente con Administraciones y Agentes Sociales para consensuar propuestas realistas y equilibradas.
- Protección del papel de la negociación colectiva. La negociación colectiva ha sido históricamente el espacio óptimo para la mejora de las condiciones laborales y tiene que continuar siéndolo.
- Compromiso con el diálogo. Seguiremos defendiendo el espíritu del Diálogo y la Concertación Social como herramienta para preservar la competitividad, la sostenibilidad y el equilibrio al mercado laboral."