La gran oportunidad de Catalunya. Los fondos europeos juegan un papel esencial en la recuperación económica, pero, a pesar de que presumiblemente no llegarán a manos de los estados hasta principios de año, serán el flotador que nos hará no naufragar por la crisis provocada por la covid-19. Así lo ha vuelto a hacer ver el conseller d'Empresa i Coneixement, Ramon Tremosa, durante un encuentro en linea organizado por Intermedia en que han asistido diferentes actores sociales y representantes de los sectores más damnificados. Tremosa ha aportado un punto de luz a la oscuridad de la situación asegurando que, para el territorio catalán, "es una fantástica noticia que decida Bruselas y no Madrid donde van a parar los fondos". Catalunya volverá a jugar a la carta del talento y, de momento, ya son 68 los proyectos identificados por el Departament que se podrían presentar a esta fuente de financiación.
Bruselas analizará muy bien estos "proyectos extraordinariamente positivos y fabulosos" que van en linea con los ámbitos que la Unión Europea ha considerado como prioritarios vinculados a la transición ecológica, la transición digital, la movilidad sostenible, la descarbonización, la internet de las cosas o los vehículos eléctricos, entre otros, y las empresas catalanas van por la vía correcta. Pero todavía hay que encontrar más proyectos porque del total de los fondos que irán a parar al Estado español, Catalunya puede recibir entre el 10% y el 20% y el porcentaje final dependerá precisamente de esto. Unos proyectos que, a pesar de que ahora mismo parezca imposible, "a la larga hay muchos caminos que se abren".
Si Catalunya hace los deberes con los proyectos, estos "no serán tumbados por Bruselas" y esto se podría traducir en un "incremento del PIB" (siempre y cuando, el dinero no vaya a parar a los "amigos" como decía Xavier Sala-i-Martin). De hecho, como ya dijo Tremosa hace unos días, la colaboración público-privada, la base tecnológica e industrial y la relación universidad-empresa son elementos básicos que pueden hacer posible que "cuando Catalunya opta a fondo europeos de cualquier ámbito, siempre obtenga un porcentaje muy importante, superior a su peso por población y PIB".
Tremosa: "Es una fantástica noticia que decida Bruselas y no Madrid donde van a parar los fondos"
Justamente con todos estos argumentos bajo el brazo, el conseller d'Empresa ha querido responder a la pregunta formulada por el presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona, Joan Canadell, sobre el reparto regional de los fondos y ha garantizado que, "si aplicamos la norma, los catalanes no tenemos que sufrir". Sea como sea, no todo es tan bonito como parece. En este sentido, Tremosa lamenta que "el Gobierno más progresista en la historia de España contactó con comunidades que tienen agencias de competitividad como Acció y ha contratado a cuatro grandes auditorías, que no quiero saber el dineral que cobrarán, y los proyectos tienen que pasar por allí", pero después será Bruselas quién irá haciendo revisiones cada seis meses e inyectando el dinero en los próximos años según el cumplimiento que se haga con las inversiones de los fondos.
Llamamiento a la resistencia
Pero más allá de los fondos europeos, y mientras no llegan, la situación vuelve a empeorar y el Govern ya decidió la semana pasada que cerraba bares y restaurantes durante quince días -de momento- y que volvía a aplicar ciertas restricciones. Esto ha sido criticado por muchos, sobre todo por los sectores afectados, pero Tremosa ha querido hacer un llamamiento a la resistencia porque, en unos seis meses, "si ha vacuna y tests rápidos podremos reabrir buena parte de la actividad que hoy está cerrada".
Mientras tanto, el Ejecutivo catalán tiene que continuar haciendo trabajo y hoy ya ha anunciado que reducirá al 50% los alquileres de los locales obligados a cerrar en caso de que arrendatario y propietario no se pongan de acuerdo en otras modificaciones. Aún así, y para dar cobertura legal a la medida, el Govern tendrá que aprobar en el plazo máximo de dos años un nuevo proyecto de ley para incorporar al ordenamiento jurídico la cláusula rebus, que permite establecer la regulación necesaria para que se pueda renegociar un contrato en caso de "cambios imprevistos de circunstancias".
La situación no es fácil y cuesta ver la luz al final del túnel, pero el conseller pide paciencia e "intentar llegar al mes de abril con la actividad congelada". El Govern ya puso de su parte congelando la tasa turística y con los 40 millones de euros que irán destinados a ayudar a bares y a restaurantes, pero sabe que todavía hay mucho trabajo por hacer y que no todo depende de ellos puesto que, por ejemplo, "la Generalitat no recauda ninguno de los grandes impuestos". Pero si Tremosa hace un llamamiento a la resistencia es porque esto ya ha dado resultados.
Tremosa: "Si Catalunya hace los deberes con los proyectos, no serán tumbados por Bruselas"
De este modo, ha recordado que cuando decidieron cerrar Lleida en julio, "fuimos muy criticados a pesar de que fue una decisión muy dura", pero justamente esto permitió que el turismo creciera en los meses de agosto, septiembre y principios de octubre. A estos datos mínimamente optimistas, se suma el crecimiento del sector TIC un 10% en tiempo de pandemia, así como el récord que batirá el sector agroalimentario catalán. Además, vista la situación, para el conseller no es una mala noticia que las exportaciones sólo hayan caído un 10%, teniendo en cuenta que en 2019 Catalunya hizo todo un récord en ventas al exterior.
Work in progress
Y, mientras todo esto va pasando, el Govern no puede asegurar cuál será el futuro porque vive constantemente en un "work in progress" a la espera de los datos epidemiológicos y de cómo se encamina el futuro sanitario. Desde la Conselleria d'Empresa, este trabajo constante se basa en la tramitación de los fondos europeos por, como dice Tremosa, "asegurar que el máximo posible de proyectos sean presentados"; en la canalización del "máximo número de proyectos posibles en la mesa de Madrid y Bruselas para que estén en Bruselas", en "desencallar los proyectos de las renovables" y, en definitiva, en ir trabajando el día en día, pero con una mirada con luces largas para los fondos europeos.
Si cómo dicen los datos de depósitos bancarios, "estamos en récords históricos en todo el mundo", esto quiere decir que cuando la situación sanitaria se vaya calmando y se vayan encontrando soluciones, la ciudadanía volverá a consumir y volverá a gastar porque "dinero hay". Pero, para lo cual, Tremosa a vuelto a hacer un llamamiento a "limitar la movilidad, respetar las medidas y teletreballar tanto cómo podamos" porque, sino es así, advierte, "los índice seguirán subiendo y entrarán en un escenario muy complicado".
Y, para que esto avance y evolucione como a todos nos gustaría, hay que mantener el diálogo social y abandonar el "chantaje político" porque, según el conseller, "no nos creemos la propaganda del PSOE que dice que si no hay presupuestos del Estado no habrá fondo". Y es que, asegura, el reparto de los fondos no dependerá de la aprobación de los números españoles y, además, justamente "el paraguas de Europa servirá para retomar la actividad económica".