Más de 7.000personas y su entorno familiar serán las beneficiarias de las ayudas que la Fundación La Caixa ha concedido a 16 proyectos sociales propuestos por entidades en Catalunya, concretamente en las provincias de Barcelona y Lleida, según informan en un comunicado. Con el impulso de 443.610euros, fomentan el desarrollo social y educativo de niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad y promueven la inclusión social de personas en riesgo o situación de pobreza y exclusión.
Estos proyectos han sido seleccionados en la convocatoria de Lucha contra la pobreza infantil y la exclusión social, que en el conjunto de España destina 2,5 millones de euros a 89 proyectos sociales con más de 27.000 personas beneficiarias. La Fundación La Caixa tiene la voluntad de actuar, de manera decidida, contra las situaciones de vulnerabilidad y de exclusión apostando por las personas, con un modelo holístico de atención comunitario dirigido a ellas.
Por esta razón, la presente convocatoria incide en dos ámbitos de actuación que incluyen acciones de atención a la primera infancia, apoyo social y educativo, atención psicoterapéutica y emocional, atención social básica, apoderamiento personal y procesos de desarrollo comunitario para la inclusión social de personas vulnerables. Los proyectos seleccionados en el ámbito del desarrollo social y educativo de niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad y de sus familias parten de la voluntad de romper el círculo de la pobreza apoderando a los niños y adolescentes y potenciando a la familia como esos de la acción socioeducativa. Se han seleccionado 44 proyectos, con 11.538 beneficiarios.
En el ámbito de la promoción de la inclusión social para personas con riesgo de pobreza y exclusión, la finalidad prioritaria de los proyectos es impulsar acciones que faciliten el desarrollo integral y los procesos de inclusión, potenciando las capacidades y favoreciendo la igualdad de oportunidades. Se han seleccionado 45 proyectos, con 16.052 beneficiarios. Además, 38 del total de los proyectos seleccionados en estos dos ámbitos cubren de manera complementaria necesidades básicas de las personas más vulnerables a las cuales van dirigidos, como por ejemplo la alimentación y la higiene, o el suministro de ropa, material escolar o productos farmacéuticos de primera necesidad.