Neus Lloveras Massana (Vilanova i la Geltrú, 1963) es consejera delegada de AKO, una empresa dedicada a la refrigeración de frío industrial y soluciones para las cámaras frigoríficas. Exalcaldesa de Vilanova i la Geltrú (2011-2019) y antigua dirigente de la Associació de Municipis per la Independència (2016-2018), ahora ejerce la presidencia de la Federació Empresarial del Gran Penedès. La empresaria recibe VIA Empresa en las instalaciones de la entidad en la capital del Garraf para hablar de los principales retos económicos del territorio y, a la vez, sus carencias.
¿Hablamos del Garraf, del Penedès o como le gusta definir el entorno geográfico donde nos encontramos?
Penedès-Garraf. Se tiene que tener en cuenta que la Federació Empresarial del Gran Penedès abraza tres comarcas: Alt Penedès, Baix Penedès y Garraf. Tres territorios que tienen muchas cosas en común y una historia conjunta, pero con características diferentes.
¿Cuál es la salud económica y empresarial de los tres territorios?
Tenemos tres territorios con muchas potencialidades. El Alt Penedès es la comarca que tiene el mix económico más interesante, porque al haber un 40% de industria hace que sea una zona muy resiliente.
El Garraf también tiene ciertos atractivos y, a la vez, la problemática que la industria se ha reducido mucho. Actualmente, el peso industrial respecto del total de la actividad es de un 10% cuando antiguamente se había superado el 20%. Por otro lado, la comarca ha registrado un incremento de negocio en el turismo y sector servicios.
Principalmente, la razón por la cual el Garraf ha perdido terreno en el ámbito industrial es la falta de suelo. Todos los agentes económicos del territorio ya trabajan para crear nuevas oportunidades en este sentido.
El Garraf ha perdido terreno en el ámbito industrial por la falta de suelo
¿Y el Baix Penedès?
De las tres comarcas de nuestro entorno es la más débil, donde el paro siempre está por encima de la media catalana. Cierto que tiene más industria que el Garraf, pero es una comarca que ha recibido la llegada de un número importante de personas del Baix Llobregat y el territorio no es capaz de absorber este movimiento. Hay que repensar como dar una estabilidad económica a la comarca, porque es una de las zonas con más paro de Catalunya.
El pasado mes de noviembre, el Garraf, por ejemplo, registraba un 12% de paro. ¿Qué medidas se pueden llevar a cabo para revertir la situación?
Garraf y Baix Penedès tienen dos escenarios similares. Comarcas que tienen una problemática común como son las comunicaciones. El Garraf aparece después de uno de los peajes más caros de Catalunya y el Baix Penedès va detrás. Por lo tanto, las infraestructuras penalizan mucho estos dos territorios.
Necesitamos inversiones por carreteras y, también, mejoras en el ámbito ferroviario. Las comunicaciones vía tren, que tendrían que ser como un metro hacia Barcelona, son nefastas.
En paralelo, la Generalitat tendría que realizar más inversiones porque a menudo son comarcas olvidadas. Si miramos el histórico de inversión en el Garraf y el Baix Penedès, siempre son en la parte baja de la lista. A largo plazo son inconvenientes que afectan el desarrollo. La formación sería una vía para recuperar terreno, vinculada a las necesidades de las empresas.
La Generalitat ha anunciado la gratuidad de la C-32, entre El Vendrell y Cubelles, y la bonificación del 50% en el peaje de Vallcarca. ¿Qué opinión le merece esta medida?
Sin ánimos de despreciar estas medidas, que son positivas, aquí nos llega como un hecho propagandístico. Es un incremento, pero ninguna solución. El 50% ya existía y continúa habiendo un peaje muy caro que tendría que desaparecer. No tiene sentido la apertura del peaje de la AP-7 y aquí, en cambio, mantengamos este escenario.
En el territorio, las comunicaciones tienen otros problemas. La comunicación interna entre el Garraf, Baix Penedès y Alt Penedès con transporte público es inexistente. No es práctico que todas las comarcas tengan de todo, en el ámbito de la formación. La opción lógica es que cada una tenga una especialización y las personas se pudieran mover.
Un ejemplo, los chicos y chicas del Alt Penedès tienen más facilidades para estudiar en Barcelona que no venir a las instalaciones de la Universitat Politècnica de Catalunya en Vilanova i la Geltrú.
¿El Garraf y el resto de los territorios del Penedès se tienen que aproximar a la órbita de Barcelona y su área metropolitana o bien remarcar su singularidad?
Es un tema que ha generado mucho debate en la Federació. Se tienen que generar sinergias en el ámbito veguería Penedès. Una perspectiva que diferencia el territorio, sin olvidar nuestra proximidad con el área de Barcelona. La especialización en clave económica puede ser muy interesante. Es mi opinión personal y creo que de gran parte de nuestros asociados.
Pimec ha presentado un estudio que recoge la preocupación por la carencia de planes, por parte de las empresas, de cara a la contratación de personas mayores de 45 años. ¿Qué radiografía hace la FEGP?
Como ya he dicho anteriormente, el camino es la formación y focalizada a las necesidades de cada territorio. Las personas, de este segmento de edad, que se quedan al paro tienen que reformarse y las administraciones tienen que tener capacidad para encontrar soluciones. Un gran handicap que tiene Catalunya es la lentitud para poner en marcha formación profesional reglada. En este aspecto tendríamos que ser más ágiles.
La formación se tiene que focalizar a las necesidades de cada territorio
El Garraf tiene centros de referencia cómo la Escola de Formació Aeronàutica de Vilanova o la Escola d’Hostaleria de Sitges. ¿A corto y medio plazo, qué sectores puede explorar la comarca para ganar músculo formativo?
El Garraf tiene varias especializaciones. En los últimos años, se ha consolidado un ecosistema vinculado al sector de los puertos y la náutica. También tenemos uno de los principales centros de mantenimiento ferroviario del Mediterráneo en Vilanova i la Geltrú. Sin olvidar la apuesta por el ámbito sociosanitario.
En cuanto al Alt Penedès, el territorio tiene una especialización clara y es el mundo agroalimentario. El Baix Penedès tiene que buscar su especialidad y singularidad, porque todo está orientado al turismo.
Hace pocos días se ha dado luz verde a uno de los últimos trámites por el proyecto del Agroparc de Ametller Origen en el Alt Penedès…
Hablamos de la inversión más grande que se ha llevado a cabo en la veguería del Penedès. Un proyecto que consolidará el Alt Penedès como punto de referencia en el ámbito agroalimentario.
¿En líneas generales, a pesar de las singularidades de cada sector, qué trabajador necesita el empresario?
Capacidad de adaptación a las nuevas circunstancias, yo creo que es la característica más importante. Los conocimientos de hoy son relevantes, pero mañana seguramente necesitas otros.
¿La arquitectura del Garraf es turismo, industria y servicios?
Efectivamente, esta es la realidad. Cuando hablamos de industria no tenemos que recordar la Pirelli, sino una opción digital y tecnificada. Los informes que realizamos en la Federació, nos explican como en el Garraf tenemos gente muy preparada. El tejido de personas de la comarca encaja con una industria innovadora y tecnológica.
No podemos pretender que vengan grandes industrias, en gran parte por el precio del suelo, pero sí crear un ecosistema tecnológico con firmas más modernas y limpias. Esto último puede convivir con el turismo.
La apertura de un parque comercial en Vilanova i la Geltrú ha reavivado el debate sobre la supervivencia del comercio local…
El parque comercial consolida la capitalidad comercial de la comarca del Garraf. No tiene que restar potencial a los otros ejes como el de la Rambla del Garraf. Las firmas que se han trasladado al nuevo espacio lo han hecho porque no tienen capacidad de crecimiento donde estaban ubicadas.
Sin dejar la capitalidad del Garraf, ahora hace poco más de 10 años que se inauguró la conexión con el Penedès, a través del Eix Diagonal. ¿Qué balance hace de esta infraestructura?
Ha sido un éxito. Precisamente, la capitalidad comercial de la cual hablábamos se ha obtenido por infraestructuras como el Eix Diagonal. Desde su inauguración hasta ahora se han hecho estudios y los datos han certificado el aumento de visitantes procedentes desde el Penedès hasta Manresa.
La lucha feminista es una lucha por los derechos humanos y por la igualdad de todas las personas
Neus Lloveras ha sido alcaldesa de Vilanova, presidenta de la Associació de Municipis per la Independència y ahora combina la presidencia de una entidad empresarial con la dirección de una firma. ¿Se considera un ejemplo de liderazgo femenino?
No me puedo poner de ejemplo. Que las mujeres, poco a poco, tengamos más cargos de responsabilidad es un trabajo que empezaron muchas mujeres luchadoras hace muchos años. La lucha feminista la observo desde otro punto de vista. Es una lucha por los derechos humanos y por la igualdad de todas las personas con toda la diversidad existente.
¿Cree que los planes de las empresas para promover la igualdad son un estereotipo o bien es una realidad imparable que irá a más?
Por normativas es muy difícil romper esto, los esfuerzos se tienen que centralizar en los estereotipos. Todo empieza por la educación y la sociedad. Por la maternidad, las mujeres no tienen que tener ninguna desventaja respecto de los hombres. Si en nuestros entornos no tenemos igualdad, en la empresa ya puedes poner porcentajes o legislar que será una misión imposible.