¿Cómo será la economía y la vida post-confinamiento (que no postcovid-19)? Ésta es la pregunta del millón, la que todo el mundo se hace, pero la que nadie sabe responder. Ya inmersos en la nueva normalidad, es momento de plantearse "qué va a pasar ahora", pero siempre teniendo claro que, "aunque nadie lo sabe a ciencia cierta" porque depende de una serie de factores, "hay que mentalizarse de que de esta crisis vamos a salir achacosos y sobreendeudados". Claro y contundente, el economista José María Gay de Liébana ha dado un baño de realidad en un seminario en línea organizado por Foment del Trebal donde, junto con el secretario general adjunto y director de Economía de la patronal, Salvador Guillermo, y el director de Economía de la CEOE y director general del Instituto de Estudios Económicos, Gregorio Izquierdo, han puesto los puntos sobre las íes en las medidas económicas (no) adoptadas por el Gbierno, a quién han reclamado que dialogue con los agentes sociales para encontrar una salida a la situación económica lo menos dolorosa posible.
Desde el inicio de la pandemia de coronavirus, los agentes sociales no han dejado de reclamar al Ejecutivo estatal que se les tenga en cuenta a la hora de aplicar nuevas medidas económicas para paliar los efectos de la crisis, y este sigue siendo el reclamo a día de hoy. "Sería nefasto para la economía que la política no hiciera su trabajo". Tras recordar que "acabado el confinamiento, solo se acaban las restricciones de una parte de la actividad cotidiana", y después de volver a hablar de la importancia de alargar los ERTE hasta diciembre para que no se conviertan en ERE, Guillermo ha insistido en la idea de que "la crisis es tan importante que no solo se la podemos dejar a los políticos y es importante que se tenga en cuenta a los agentes sociales, que permitan la visualización de este escenario".
Izquierdo va un paso más allá y apuesta por establecer hipótesis para poder trabajar en los distintos escenarios que puede deparar el futuro porque, avisa, la economía "puede caer un 20% fácilmente en el segundo trimestre" y, precisamente por eso, "es importante diagnosticar la situación", así como "distinguir lo que es urgente de lo que es importante".
Pronóstico y diagnóstico de Gay de Liébana
Ahora más que nunca, España se encuentra en una "situación comprometida" porque, alerta Gay de Liébana, "estamos tocadillos por nuestro modelo productivo, por el empleo, la falta de cualificación y porque no hemos aprovechado los años de bonanza económica para hacer los deberes". Y, sin los deberes hechos, la crisis derivada de la pandemia ataca más fuerte al Estado y, todavía más, a un Estado que no ha aplicado palancas fiscales, que "hubieran permitido a un Estado como Dios manda actuar con eficacia y prontitud y dar fuelle y oxigenación a nuestras empresas".
Guillermo: "Sería nefasto para la economía que la política no hiciera su trabajo"
Si a esto se suma que "la crisis nos impacta de forma brutal" al modelo productivo español, con un gran componente del sector servicios; así como que "la economía española está un poco flacucha" y que el "crecimiento del PIB ha sido dopado", el resultado es poco esperanzador. Según Gay de Liébana, "esta va a ser una crisis de liquidez en general y a esta la sigue una crisis de insolvencia porque no se puede pagar a los acreedores y hay mucho endeudamiento".
"Donald Trump será un pedazo de bruto, pero ha dado 350.000 millones de dólares a las pequeñas y medianas empresas a cambio de que mantengan el empleo y no lo tienen que devolver, actúan a modo de subvención como ha hecho Dinamarca", expone. Además, si este gasto público se traduce en una subida de impuestos, la política presupuestaria no será sostenible porque, según Izquierdo, "no solo suben los costes cuando hacía falta bajarlos, sino porque dinamitas los incentivos".
España, con E de endeudamiento
Lamentando que "apelamos a la gran solución, la solidaridad de Europa", Gay de Liébana ha señalado que existe "cierto confusionismo en este sentido" porque "el sur no ha sabido gestionar", al mismo tiempo que ha recordado que el dinero del fondo de reconstrucción europeo -de un total de 750.000 millones de euros- "habrá que devolverlo" y que la Unión Europea "ya trabaja en distintas alternativas de impuestos y la contribución de cada Estado miembro va a ser más elevada porque además el Reino unido no está".
Gay de Liébana: "Ahora es el momento de poner el dedo en la llaga, España se escribe con E de endeudamiento y nuestro déficit es terrorífico"
"Ahora es el momento de poner el dedo en la llaga, España se escribe con E de endeudamiento y nuestro déficit es terrorífico". La sentencia es dura y tiene que ver con "el maldito baile del déficit público" que ha pasado por nuestras vidas entre 2008 y 2020 y que se ensarta hasta los 941.000 millones de euros, el 84% del PIB. "Estamos pasando de una economía de mercado a una economía intervenida", advierte el economista.
De este modo, "el primer agente económico del Estado va a ser el Estado" y lo que previsiblemente harán será "apretar a unos cuantos cuando no hay que subir los impuestos para sostener ese modelo subsidiado de economía". Así pues, de la crisis sanitaria hemos pasado a una crisis económica que ya ha desembocado en una crisis social: "Nunca hubiera podido imaginar que llegáramos a ver las colas del hambre".
Pich, Guillermo, Izquierdo y Gay de Liébana en el seminario organitzado por Foment sobre la economía post-confinamiento
La solución pasa por revertir y aprovechar la situación para repensar la economía y, de este modo, "apostar por la España que queremos, la de la reindustrialización y la de la transformación digital", cosa que pasa por "repoblar la España vaciada" porque, por ejemplo, Gay de Liébana, que se encuentra en estos momentos en el mundo rural, reclama una mejor conexión de banda ancha o tener un tren "que me permitiera llegar a Barcelona en 1 hora y no en 3.30 horas". Sumar a la economía de servicios una economía industrial fuerte.
ERTE, los capitanes del temporal
Pero, ¿cómo se puede capear el temporal de la mejor manera posible? Teniendo en cuenta que España es un país de pymes y que éstas "no cuentan con reservas para capear el temporal", vuelve a aparecer el gran protagonista de esta pandemia, los ERTE por fuerza mayor. A ocho días para que caduque el Real Decreto-ley 18/2020, de 12 de mayo, de medidas sociales en defensa del empleo, que alargaba estos expedientes hasta el 30 de junio, el Gobierno todavía no ha dictado sentencia sobre su posible ampliación, que sería presumiblemente hasta el 30 de septiembre.
Izquierdo: "La empresa privada es la palanca de la recuperación"
Alargarlos "es la gran solución para capear el temporal", afirma Gay de Liébana, mientras que Guillermo avisa de que "no se puede reformular los ERTE solo con el ojo puesto en la cuenta pública, porque responden a una coyuntura, y los obligamos a que pasen muy rápidamente a la situación previa, pero posiblemente pasen pero para liquidar la empresa"; e Izquierdo hace un llamamiento a "no retirar los pocos instrumentos que tenemos" porque esta es "la solución menos mala".
Y aquí volvemos al principio. Si, como recuerda Gay de Liébana, "todo se hace a golpe de BOE, que es ajeno a la realidad económica" y no se habla con los distintos actores y sectores, la realidad post-confinamiento nos dejará a la cola de Europa. Como dice el director de Economía de la CEOE, "la empresa privada es la palanca de la recuperación" y, si se la tiene en cuenta, podremos "preservar la producción y sentar las bases de un crecimiento económico a largo plazo de una economía moderna y transformada". Porque, según Liébana, "vamos a salir un poco achacosos, un poco fotuts como se dice en catalán, pero saldremos adelante".