La multinacional catalana Grífols ha anunciado la compra de la farmacéutica Tiacheng, que tiene el 89,88% de las acciones ordinarias de Biotest y el 1,08% de las acciones preferentes, por un importe aproximado de 1.100 millones de euros, según ha informado la compañía en un comunicado. Concretamente, Grífols abonará 773 millones de euros y añadirá un préstamo de 313 millones de euros. Paralelamente, Grífols lanzará una Oferta Pública de Adquisición a todos los accionistas para adquirir en efectivo el resto de acciones ordinarias y preferentes de Biotest por 43 euros y 37 euros, respectivamente. La alemana Biotest dedica su actividad al desarrollo, producción y comercialización de medicamentos biológico en aplicaciones a la hematología, inmunología clínica y cuidados intensivos.
Después de la primera operación, el capital social de Biotest estará valorado en 1.600 millones de euros y en 2.000 millones de euros en su valor de mercado. Un golpe completada la transacción, Grífols tendrá 17,7 millones de acciones ordinarias de Biotest, equivalente al 89,88% con derecho a voto y del 44,94% del capital social y 24.581 acciones preferentes, un 0,54 % del capital total.
A partir de aquí, es cuando tirará la OPA para adquirir el resto de acciones, según ha explicado Grífols, que considera que la transacción refleja como Biotest y la multinacional catalana "cumplen con sus respectivas misiones y avanzan conjuntamente para aumentar globalmente la disponibilidad de terapias plasmáticas en beneficio de los pacientes de todo el mundo".
Biotest está especializada en soluciones de hematología e inmunología clínica y tiene la sede a Dreiech, en Alemania
Biotest está especializada en soluciones de hematología e inmunología clínica y tiene la sede a Dreiech, en Alemania. Tiene una cartera que incluye 12 productos que se comercializan en más de 90 países y mujer trabajo a 1.928 personas por todas partes el mundo. También dispone de una capacidad de fraccionamiento del plasma hasta los 1,5 millones de litros anuales, a pesar de que tiene previsto duplicarlos a través del proyecto Biotest Next Level. El año pasado facturó 484 millones de euros y obtuvo un Ebitda ajustado de 108 millones de euros.
La operación permitirá reforzar la capacidad de Grífols con la disponibilidad de medicamentos plasmáticos, su pipeline I+D y su presencia comercial. Además, añade la empresa, suponerà ampliar sus capacidades científicas e industriales y mejorar la rentabilidad y los ingresos por litro de plasma de Grífols al incorporar nuevas proteínas plasmáticas que tendrán un efecto de crecimiento en los ingresos y los márgenes. Paralelamente, Grífols incorporará 26 centro de donación de plasma a Europa y reforzará sus operaciones e ingresos a la región de Europa Oriente Medio y África. La operación está pendiente de varias aprobaciones y condiciones reguladoras y está previsto que quede cerrada al final del primer semestre del año que viene.
Uno de los CEO de Grífols, Raimon Grífols, ha considerado que la operación permitirá "marcar un nuevo hito y hacer evolucionar la industria del plasma", mientras que el otro CEO de la compañía, Víctor Grífols Deu, ha opinado que la transacción servirá para "impulsar nuestro centro de innovación europeo y colaborar con na destacada compañía alemana reconocida por su experiencia en desarrollos clínicos".