• Economía
  • Grupo Pons: búsqueda de la excelencia en el aceite de oliva

Grupo Pons: búsqueda de la excelencia en el aceite de oliva

La firma familiar de l'Albagés estrena un molino de última generación, financiado por el ICF, que permite elaborar productos ecológicos de calidad y gama extra

El nuevo molino del Grup Pons en L'Albagés
El nuevo molino del Grup Pons en L'Albagés
L'Albagés
12 de Diciembre de 2023

Con un periodo de sequía estructural como el actual, la coincidencia es máxima para afirmar que los recursos hídricos bien gestionados simbolizan una especie de maná bíblico o una suerte de petróleo del siglo XXI. La presencia del agua es la que ha dado una nueva vida a la empresa familiar leridana Grupo Pons. Ubicada en la localidad de l'Albagés (les Garrigues), la llegada del riego ahora hace tres años les permitió dar un paso adelante en su sistema productivo, pasando del secano al regadío, plantando 75 hectáreas de olivos en el sistema de superintensivo y culminando el proceso con la construcción de un molino de aceite de última generación, que permite lograr el mejor rendimiento posible, desde el punto de vista cualitativo, de la explotación del cultivo. Fruto de esta necesidad inversora para llevar a cabo esta instalación, el Grupo Pons acudió a la financiación ofrecido por el Instituto Catalán de Finanzas (ICF).

Los orígenes del Grupo Pons se remontan a la elaboración del aceite de oliva, que ya están representados por la cuarta generación de una actividad que se inició en 1945 y que supone el 90% del negocio. El 10% restante forma parte del ámbito vitivinícola, con la marca Clos Pons, presente desde el año 2008. La acción diaria de la empresa familiar se centraba en elaborar aceite de oliva en un territorio local, como la provincia de Lleida, con el objetivo de exportarlo a granel a Italia. Estas ventas no aportaban ningún tipo de valor añadido al producto. A partir del año 1995, "hicimos un cambio de rumbo, en el cual intentamos generar una marca y conseguir un valor diferencial del producto. Esta ha sido nuestra dirección en las últimas tres décadas". Así explica la trayectoria el CEO del Grupo Pons, Eduard Pons.

De producir aceite de oliva al por mayor y exportarlo a comercializar la marca en todo el mundo. Este viraje de Grupo Pons le ha permitido consolidar un posicionamiento en la gama alta de los mercados internacionales. Con una facturación alrededor de los 70 millones de euros, un 92% de las 10.000 toneladas anuales de aceite que producen se destinan a la exportación y se venden en países como los EEUU, Brasil, Reino Unido, Pakistán, Corea del Sur o Australia. Más de 140 mercados a los cuales ha llegado el producto de quién Eduard Pons define como "empresa singular".

La empresa familiar ha pasado de producir aceite de oliva al por mayor y exportarlo a comercializar la marca a más de 140 países

Excelencia del territorio

El CEO de Grupo Pons alude a esta singularidad, explicando que la empresa familiar dispone de una estructura vertical "en que integramos el producto desde la base, teniendo a nuestro alcance fincas de olivos, molinos, puntos de venta, filiales, todo con el objetivo de llegar lo más lejos posible de la cadena alimentaria sin acudir a los intermediarios". Este propósito les hace fijar el punto de mira en los consumidores de gama alta, que valoran la calidad del aceite de oliva.

El milagro del agua, que llegó a l'Albagés hace tres años a través del riego, ha facilitado una nueva dimensión en la explotación de cultivos hasta ahora de secano como el olivo. Eduard Pons matiza que "nos ha ayudado a visualizar un nivel superior de integración, plantando olivar con el método superintensivo y consiguiendo una gran producción de aceites de calidad extra".

Eduard Pons: "El nuevo molino nos ha ayudado a lograr un nivel superior de integración, plantando olivar con el método superintensivo y consiguiendo una gran producción de aceites de calidad extra"

El final de esta fase se ha concretado con la construcción de un molino de aceite en l'Albagés, que sus impulsores califican de una joya tecnológica. Eduard Pons precisa que "con el molino, obtenemos el mejor aceite de oliva posible gracias a la biotecnología y el control del frío y el calor. En definitiva, hacemos lo que queremos con la oliva". La excelencia en la calidad va acompañada de una simplicidad en las tareas técnicas, lo que genera un aceite de oliva virgen extra ecológico y temprano con una intensidad aromática alta y de fruitado intenso.

Para llevar a cabo este proyecto, Grupo Pons se vio obligada a realizar una gran inversión económica, una parte importante de la cual la aportó el ICF. Eduard Pons destaca "la visión del ICF, que estaba alineada con la iniciativa y nos apoyó en la busca de la excelencia en el territorio".

En el marco de sus líneas estratégicas, en que el instituto ha creado el producto financiero 'ICF Crédito Inversión', el Grupo Pons se benefició de una línea de préstamos para financiar inversiones en activos fijos, materiales, inmateriales y financieros.

Maximizar la calidad

Como indicador de las potencialidades del nuevo molino, el CEO de la empresa familiar recuerda que solo se está utilizando el 15% de su capacidad. "El molino maximiza los atributos y la máxima calidad del aceite y nos favorece la apuesta por la sostenibilidad". Pons apunta a la importancia que ha tenido en la comarca de las Garrigues la transformación del terreno de secano al de regadío "para elaborar un producto competitivo y sostenible".

La actual cosecha del Grupo Pons será la primera bajo el paraguas del sistema superintensivo. De momento, se encuentran en rendimiento unas 75 hectáreas, a la espera de llegar a las 225 en los próximos dos años. Eduard Pons incorpora otro elemento para reivindicar los beneficios del aceite. En este caso, desde una perspectiva saludable, los aceites producidos en el nuevo molino se caracterizan por un contenido alto en polifenoles, sustancias con efectos antiinflamatorios.

Justamente este año, la firma familiar leridana está comprobando la viabilidad del camino que ha emprendido hacia la busca de la excelencia mediante la transformación de las fincas de olivos del secano al regadío. Estas últimas ya representan el 60% del total. Eduard Pons puntualiza que "no nos queda ninguna otra alternativa si queremos llegar a una cierta estabilidad para suministrar el producto a nuestros clientes a un precio asequible".