La 39ª reunión del Cercle d'Economia, que comienza hoy y se extenderá hasta el viernes, será la gran protagonista de finales de mayo, en medio de pactos para configurar el nuevo gobierno catalán, elecciones europeas a la vista, visitas con trasfondo político - incluida la presencia del rey Felipe VI - y el reto de aumentar la productividad en el país, tal como adelantaron desde el Cercle d’Economia en la nota de opinión que compartieron hace unos días. Una entidad "singular" de 1.300 miembros que, sin ser una patronal, reúne a los principales empresarios de Catalunya, así como a varios intelectuales, y que aspira a ser escuchada por los políticos y la sociedad civil para dar respuesta a los grandes retos estratégicos de Catalunya y España. Pero, ¿cuál es su origen? Spoiler: nació en 1958 cuando un grupo de jóvenes empresarios querían más apertura económica y modernizar la España franquista, bajo el nombre de Club Comodín. Tardaron una década en ser legalizados. Y uno de los retos que aún arrastra hasta hoy es atraer a más mujeres (solo el 15% lo son) y rejuvenecer la entidad.
El Cercle d'Economia tiene 66 años de historia, 1.300 miembros y la mayoría de ellos son empresarios e intelectuales
Si se hace una retrospectiva del pasado, el Club Comodín estaba formado por un grupo de amigos inquietos por su futuro profesional y también colectivo. En plena dictadura franquista, en el verano de 1951, dos jóvenes universitarios de la burguesía catalana, Joan Mas Cantí y Carlos Ferrer Salat, se planteaban en el paseo Maristany de Camprodon (Ripollès) cómo hacer frente a la situación de bloqueo que percibían en el país. De allí reivindicaban las esencias y los valores fundacionales de lo que sería el futuro Cercle d’Economia, centrados en la defensa de la unidad europea y de las libertades, dos ejes sobre los cuales parte de la burguesía catalana, empresarios inquietos e intelectuales de las universidades se contraponían al régimen franquista. El término Club Comodín define bien la gran capacidad de sus miembros para adaptarse a las circunstancias. Posteriormente, comenzaron a "reunirse cada jueves" y también se reunieron anualmente en la Costa Brava. Los cuatro jóvenes fundadores fueron también los cuatro primeros presidentes: Carles Ferrer i Salat (1959-1965), Carles Güell de Sentmenat (1965-1969), Artur Suqué i Puig (1969-1972) y Joan Mas i Cantí (1972-1975). Décadas después, gran parte de ellos fueron promotores para que España ingresara en la Comunidad Económica Europea.
Con la llegada de la democracia, muchas personas fueron invitadas a estas reuniones, que se celebraron en Sitges hasta 2019 y también socios del Cercle que, desde posiciones políticas diferentes, asumieron responsabilidades políticas relevantes. La influencia de sus documentos y posicionamientos aumentó y desde entonces tiene ascendencia directa en diferentes entidades más.
Como apuntaba el economista Enric Llarch en VIA Empresa, el Cercle d’Economia siempre ha vestido sus “tareas de lobby empresarial” con una “pátina académica” que, además de Vicens Vives, contó con el apoyo de los mismos Sardà y Estapé hasta Ernest Lluch y Anton Costas, que ha llegado a ser presidente. Los mandatos del presidente y de su junta duran actualmente tres años, sin posibilidad de repetición, al menos inmediata. Pero durante 22 años, hasta 2018, tuvo un mismo director general, Jordi Alberich, que dejó el cargo para dar relevo a la "tercera generación".
En el caso de los relevos presidenciales, lo más habitual es que solo haya una propuesta del presidente saliente, como fue el caso de Javier Faus en 2019, a pesar de la excepción de las elecciones de 2022. "Cuando el presidente hace la propuesta es que esta ha sido muy consensuada y consultada", apuntan desde el club en reiteradas ocasiones. Para presentarse solo se necesitaba una antigüedad mínima de dos años en el club y disponer de la firma de 50 socios. Aunque una vía habitual para convertirse en presidente es ser vicepresidente en la junta anterior.
La respuesta en otoño "caliente" del 2017
El historiador Joan B. Culla explicó con detalle en sus memorias (La història viscuda, Grup 62, 2019) cómo la pretendida vía del medio, o “tercera vía”, que el Cercle y determinadas fuerzas políticas y mediáticas habían defendido a raíz de los primeros pasos del proceso independentista hacia principios de la década de 2010, se convirtió en una defensa cerrada de la unidad de España, prácticamente sin matices. Una evolución que, según destacaba Culla, culminó en las tres últimas ediciones de las Jornadas que el Cercle organizaba anualmente en Sitges (se trasladaron en 2020 a la capital catalana), en que los “reproches” a las autoridades catalanas fueron generalizados y contrastaron con la ausencia de cualquier crítica o demanda a los representantes del gobierno español.
Con los primeros pasos del proceso independentista, desde el Cercle promovieron una defensa cerrada de la unidad de España
El Cercle d'Economia emitió una opinión el 4 de octubre de 2017 sobre el conflicto catalán en la que rechazaba la vía de una Declaración Unilateral de Independencia (DUI) -opción que suponía “máxima preocupación”- y llamaba a las partes al diálogo -y afirmaba estar "desde hace más de una década a favor de una vía dialogada y moderada"-. El Cercle aprovechó para condenar también la violencia del 1-O. La veía “inexplicable e injustificada”. “Ha deteriorado nuestro marco de convivencia, nuestra imagen colectiva en el mundo y refleja, de manera extremadamente preocupante, la incomprensible e irracional dinámica (...) del conflicto catalán”.
Hace pocos meses, el Cercle también se ha posicionado públicamente en el debate que genera la posibilidad de amnistiar a los afectados por causas vinculadas al proceso y al referéndum de independencia del 1 de octubre de 2017. La entidad aboga por apoyar el cierre judicial para los encausados por el desafío separatista. “El Cercle d’Economia considera urgente iniciar un nuevo ciclo político”, recogía en una nota de opinión. Lo condiciona a que los independentistas hagan una enmienda a su estrategia de confrontación: “Las reafirmaciones a la unilateralidad son incompatibles con cualquier pacto dirigido a la normalización política”.
¿Quién es quién en el Cercle d'Economia actual (2022-2025)?
Actualmente, Jaume Guardiola es el 20º presidente del Cercle d'Economia, tras proclamarse ganador de las primeras elecciones a la presidencia del Cercle con dos candidatos el 12 de julio de 2022. El ex consejero delegado del Banco Sabadell se impuso a la empresaria Rosa Cañadas con el 70,8% de los votos a favor. En este trienio están abordando la democracia, Europa, la economía, Catalunya y su encaje territorial, y Barcelona como los grandes temas del Cercle; aspectos que el ex consejero delegado del Banco Sabadell ha querido tratar con una mirada "larga y con notas de opinión independientes, valientes y que sean transaccionadas, que busquen el acuerdo", según ha apuntado en reiteradas ocasiones.
Lo acompañan como vicepresidentas Teresa Garcia-Milà y Núria Cabutí. Como secretaria está Camino Quiroga, de tesorera, Carmina Ganyet, como secretario, Oriol Aspachs y de director general, Miquel Nadal. Entre los vocales están Marc Puig, Miguel Trías Sagnier, Jordi Amat, Maite Barrera, Daniel Aicart, Clara Campàs, José María Lassalle, Núria Mas, Pol Morillas, Alfonso Rodés, Francesc Rubiralta, Laura Urquizu, Xavier Vives, Rita Almela y José Manuel González-Páramo. Actualmente, el Cercle lo conforman más de 1.300 socios, como se ha mencionado anteriormente. La gran mayoría de ellos residentes en Barcelona y Catalunya en general, aunque también es significativo el número de socios residentes en Madrid. También han impulsado el Cercle Obert, que tiene voluntad de conectar el talento más joven del Cercle para garantizar el relevo generacional de la institución, proponiendo nuevos debates y reflexiones para seguir contribuyendo al interés general.
El año pasado la entidad conmemoró los 65 años de historia y reconoció a 33 socios que lo son desde hace más de 50 años, entre los cuales estaban el expresidente Jordi Pujol, así como Josep Maria Puig (Grupo Puig), Pere Vicens (uno de los hijos del historiador), Joan Mas Cantí, Antoni Siurana, Joaquim Folch, Antoni Argandonya, Joan Majó, Magda Ferrer Dalmau o José Felipe Bertrand de Caralt, entre otros.
El título de la 39ª Reunión del Cercle d'Economia es una declaración de intenciones: 'El mundo a prueba. Estrategias para impulsar la productividad y el bienestar en tiempos de cambio'
Con las reuniones anuales del Cercle, que hasta 2019 se celebraron en Sitges, se trasladó a Barcelona bajo la presidencia de Javier Faus en el Cercle. El actual presidente, Jaume Guardiola, decidió mantener la ubicación en Barcelona, pero ahora con un nuevo punto de encuentro, en el Palau de Congressos de Catalunya para realizar la edición 39 de esta cita anual. El título es una declaración de intenciones: El mundo a prueba. Estrategias para impulsar la productividad y el bienestar en tiempos de cambio. Además de abordar el contexto internacional y especialmente el momento que vive Europa con las elecciones al Parlamento Europeo, se hablará de la importancia de impulsar la productividad y el bienestar para la competitividad de nuestra economía. Y lo harán desde una perspectiva amplia, tratando temas de educación, tecnología, simplificación administrativa o los retos de la empresa familiar.