"Este virus se engendró en la provincia de Wuhan, el paciente cero fue en noviembre". [...] "Los chinos, detrás del escudo de la Organización Mundial de la Salud, durante dos meses escondieron el virus del mundo y enviaron centenares de miles de chinos en avión a Milán, Nueva York y en todo el mundo para sembrarlo". Intenta adivinar quién ha hecho estas declaraciones.
No, no fue Trump. Pero sí que fue una persona muy cercana a él. Las hizo un hombre que se llama Peter Navarro y que es ayudante del presidente y director de políticas comerciales e industriales, entre otros. Con estas declaraciones nos levantábamos lunes en Europa. Y a pesar de que la semana anterior las bolsas no reaccionaron demasiado bien a las tensiones entre China y Estados Unidos, esta semana la situación era diferente.
Viernes de la semana anterior se publicó el descubrimiento de un medicamento Anti-SARS-CoV-2 que funcionaba a la perfección en pruebas in vitro. Lunes por la mañana también supimos como AstraZeneca anunció que tendría 30 millones de dosis de vacunas preparadas para distribuir en el Reino Unido en septiembre. Esta vacuna todavía se encuentra en la primera fase, en vistas de que empiece la segunda y última, y parece que es una de las que está liderando la carrera por el gran hallazgo. Poco después y ya durante esta semana, los Estados Unidos se aseguraban un suministro de 400 millones de dosis para el mes de octubre. A principios de semana, la farmacéutica Moderna que también buscaba una vacuna para el coronavirus, publicó resultados positivos, pero limitados.
"La euforia bursátil se basaba en unos resultados preliminares que, a pesar de que tenían un 100% de efectividad, contaba con un número muy bajo de personas"
Todas estas noticias positivas hicieron que las bolsas reaccionaran al alza a principios de semana. Todo este positivismo se acabó cuando Stat, una agencia de comunicación médica, abrió los ojos a todo el mundo. La euforia bursátil se basaba en unos resultados preliminares que, a pesar de que tenían un 100% de efectividad, contaba con un número muy bajo de personas. Más en concreto, 25 personas habían generado anticuerpos, y de entre estas a ocho se les realizó una prueba para ver si eran suficientes para tener inmunidad. A pesar de que sí que eran inmunes, sólo era un resultado sobre 8 personas. Si bien es cierto que es un resultado esperanzador, no se pueden sacar conclusiones firmes.
Volviendo hacia Europa, Alemania y Francia juntaron fuerzas para pedir un fondo europeo común de 500.000 millones de euros para luchar contra el coronavirus. Este fondo se pagaría con presupuesto europeo e iría destinado a las economías más afectadas por el coronavirus. Similarmente, en Estados Unidos la Reserva Federal también instaba al gobierno a coordinarse para poder salir más rápidamente de la crisis. Todo esto mientras Thierry Breton regañaba a MarkZuckerberg para hacer todo lo posible para pagar menos impuestos.
En España durante esta semana se iba cocinando la derogación de almenos algunas partes de la reforma laboral. Esto convertiría los mercados en menos flexibles, cosa que no gusta a los inversores. Para entender porque no gusta, se tiene que entender que no sólo es una medida que dificulta el despido, sino que también dificulta la creación de nuevos puestos de trabajo. Al hacer el mercado laboral más rígido, las empresas tienen más costes a la hora de despedir, y esto hace que se lo piensen bien cuando quieran contratar. Por lo tanto, a nivel individual es cierto que es menos probable que nos echen, pero también nos será más difícil buscar trabajo si nos quedamos sin. Esto, crea desigualdades, puesto que las personas paradas eructarían más rápidamente en un mercado laboral más flexible.
Para poner un símil, cuando contratamos una línea de teléfono para tener Internet a casa, nos lo pensaremos dos veces si sabemos que tendremos dificultades a la hora de darla de baja. Si tenemos permanencia, o sabemos que la empresa pone trabas para cancelar el contrato, quizás miraremos alternativas que nos generen menos compromiso. En cambio, somos muchos los que hemos probado servicios como Netflix y HBO porque sabemos que en el momento que queramos darnos de baja lo podemos hacer en dos clics. Este símil se puede trasladar a las empresas para ver que un mercado laboral más rígido no sólo hace que la rotación del paro sea más baja, sino que también hace que más gente se quede sin trabajo.
"La derogación de la reforma laboral convertiría los mercados en menos flexibiles y esto no gusta a los inversores"
Los mercados saben esto y saben que la economía se verá resentida, y por lo tanto, el Ibex cada vez se va convirtiendo en un activo menos atractivo. Por este tipo de medidas que se están proponiendo el Ibex ha sido de los índices que menos ha recuperado las caídas de marzo. Al cómputo global de la semana en Estados Unidos los tres principales índices, el S&P 500, el Nasdaq y el Dow Jones, han subido alrededor del 3%. El DAX, el índice de referencia de Alemania ha subido más de un 5%, y el Ibex lo ha hecho más de un 3%. Por lo tanto, a pesar de los altibajos la semana ha acabado a la alza.
Ojo a la bolsa!