
La Comisión Europea pondrá a disposición de los fabricantes de baterías para vehículos eléctricos hasta 1.800 millones de euros con el objetivo de "crear una cadena de suministro segura y competitiva de materias primas". Con esta fórmula, Bruselas espera contribuir al "crecimiento" de la industria de la automoción europea y reducir "dependencias estratégicas" respecto a países como China.
El anuncio emitido este miércoles por el comisario de Transporte Sostenible y Turismo, Apostolos Tzitzikostas, forma parte de un plan de acción para impulsar el sector del automóvil en el continente, una acción vinculada al mismo tiempo al diálogo estratégico que inició la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, con representantes de la industria.
Por su parte, Catalunya acelera decididamente hacia el vehículo eléctrico, con el recientemente presentado Plan de impulso al vehículo eléctrico 2025-2030, que tiene como objetivo electrificar la movilidad en las carreteras catalanas y desbloquear la adopción del coche eléctrico en el territorio, que solo ha crecido un 3% desde 2020. ¿El objetivo? Cumplir con los deberes del Pacto Verde Europeo e impulsar Catalunya hacia un territorio “más inteligente, saludable e innovador”, según declaró el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, en la presentación del Plan.
El Plan está compuesto por cinco ejes y 20 medidas, dotado de 1.400 millones de euros para el próximo periodo de cinco años y diseñado por los departamentos de Empresa y Trabajo, Economía y Territorio, Vivienda y Transición Ecológica.