Hay (des)inversión más allá de las infraestructuras. Madrid juega a otra liga y, una vez más, se constata la simetría del superávit de la capital española con el déficit de Catalunya. Si Foment del Treball ya se lamentaba la semana pasada de la falta de ejecución de las inversiones previstas para el territorio catalán en infraestructuras, la Cambra de Comerç de Barcelona añade un punto más a la cuestión y avisa de que "el diferencial de la inversión publica es una cuestión estructural". Catalunya ha recibido en los últimos 5 años entre un 8,4% y un 13,2% de la inversión total regionalizada, mientras que Madrid ha obtenido entre el 12,5 y el 16,5%. Y no sólo esto. La ciudad central del Estado "ha recibido un diferencial positivo, que le ha supuesto un impacto sobre el PIB del 1,28%, mientras que en Catalunya es del 0,26%". Esto, sumado al efecto sede del sector público, explicaría el sorpasso anunciado que protagonizó la Comunidad de Madrid en 2019 cuando, por primera vez en seis años, superó a la comunidad catalana.
"Madrid tiene un bonus de capitalidad". El presidente de la Cambra de Barcelona, Joan Canadell, ha lamentado durante una nueva rueda de prensa telemática con el director del Gabinete de Estudios Económicos de la Cambra, Joan Ramon Rovira, que precisamente este diferencial "puede explicar este hecho que se ha ido viendo en los últimos informes de coyuntura, que Madrid iba atrapando a Catalunya en PIB e incluso hizo el sorpasso". Un sorpasso que elevaba a la comunidad madrileña al top 1 en PIB en España, pero que lo hacía sólo con una ligera diferencia: Madrid representa el 19,2% y Catalunya el 19%.
Si bien es cierto que, de siempre, las infraestructuras han centrado el debate, también lo es que esta actitud del Estado con el territorio catalán va más allá de todo esto. Según Canadell y Rovira, "las inversiones que no son en infraestructuras de transporte, en Catalunya son residuales". Las cifras hablan por sí mismas. El Gobierno central ha invertido en los últimos cuatro años menos del 14% en conceptos que no son infraestructuras, mientras que en Madrid el porcentaje se ensarta entre el 49,4% y el 61,3%. Estos porcentajes representan entre un 0,01% y un 0,05% del PIB catalán, mientras que sube hasta el 0,24% y el 0,30% si nos fijamos en el de Madrid. Mientras tanto, la media española está entre el 0,17% y el 0,28%.
Canadell: "Pedimos que haya un compromiso del Estado para compensar este diferencial para que Catalunya no vuelva a quedar como siempre por detrás"
Esto, como dice Canadell, va en linea con la capitalidad, pero también de una historia ya crónica de falta de ejecución de las inversiones en Catalunya, que no sólo "se sitúa muy por debajo de lo que le tocaría no sólo comparada con Madrid", sino que también está por debajo del resto de comunidades. "Pedimos que haya un compromiso del Estado para compensar este diferencial en las inversiones que no son infraestructuras para que Catalunya no vuelva a quedar como siempre por detrás", insiste Canadell.
Los colores de Madrid
Pero empecemos por el principio. Según el informe de la Cambra sobre Inversión pública del Estado, dos tercios de las inversiones que ejecuta van a parar a infraestructuras. Esto quiere decir que un 66,3% de los 36.463 millones de euros que el Ejecutivo español ha invertido entre 2015 y 2019 en las diferentes regiones va a parar a las grandes olvidadas en Catalunya. De este dinero, el territorio catalán tendría que haber recibido 6.951 millones de euros, de los cuales 4.612 millones tenían que ser para infraestructuras. Pero, ¿cuánto ha recibido realmente Catalunya? 3.849 millones de euros, es decir, mucho menos de que tenía que recibir sólo para infraestructuras, el 55,4% de la inversión prometida.
"El diferencial de inversión pública entre Madrid y Catalunya es una cuestión estructural derivada de la concentración sistemática de recursos públicos diferentes de las infraestructuras en la capital del Estado", señala Rovira, que atribuye este diferencial a la inversión de los Ministerios y de los organismos adscritos. "En el caso de Madrid los colores están muy muy repartidos", pone encima de la mesa el jefe del Gabinete de Estudios Económicos de la Cambra. La diferencia entre Ministerios suma 1.243 millones de euros de inversiones a favor de Madrid, mientras que la diferencia entre organismos adscritos suma 1.237 millones de euros.
Rovira: "No sólo es un tema de ejecución del grado de las infraestructuras sino una cuestión estructural, el superávit que tiene Madrid es muy simétrico al déficit que tiene Catalunya"
Catalunya no sólo ha recibido muchos menos dinero del que tocaba en inversiones, sino que, además, para otras inversiones más allá de las infraestructuras sólo ha recibido 613 millones de euros, un déficit de 1.726 millones menos y que se sitúa muy por debajo de los 2.304 millones de euros de inversión pública que ha recibido la capital española en los últimos cinco años. El déficit en infraestructuras se sitúa en los 1.376 millones de euros y sólo se han destinado 3.236 millones.
"No sólo es un tema de ejecución del grado de las infraestructuras sino una cuestión estructural, el superávit que tiene Madrid es muy simétrico al déficit que tiene Catalunya", advierte Rovira. Con todos estos argumentos bajo el brazo, y como ya hizo Foment hace unos días, la Cambra vuelve a dar un toque de alerta a los de PedroSánchez y les reclama "una estrategia concreta para reducir esta diferencia".
Más toques de alerta (también por la covid-19)
Pero fuera de las inversiones, Canadell también ha exigido al Gobierno español y al resto de administraciones públicas que "actúen con anticipación porque la solución no puede ser que cada vez que haya un rebrote tengamos que cerrar", sino "poner medidas para anticiparnos a los rebrotes". Y es que este informe de coyuntura económica presentado por la Cambra "es el primero de los últimos años que da unos datos tan pesimistas para la economía catalana", pero todavía estamos a tiempo de darle la vuelta.
Según el también presidente del Consell de Cambres de Catalunya, si los gobiernos se anticipan y llegan a controlar la evolución de la pandemia, "lo peor ya ha pasado porque hemos tocado fondo" y ahora nos vamos recuperando despacio. Aunque esta recuperación sea más lenta de lo que lo fue la caída, es importante ver el vaso medio lleno y, en este sentido, Canadell señala que, por ejemplo, "el efecto en los puestos de trabajo tiene una caída inferior probablemente a la que había que esperar respecto a la caída del PIB".
Si no hay más confinamientos, la caída del empleo para 2020 será del 6,8%, pero hay que tener en cuenta que "la recuperación no será igual para todos los sectores" y que hay que continuar poniendo medidas para aquellos que están y estarán más afectados por la crisis de la covid-19. Para evitar que la situación vaya a peor, Canadell insiste en recordar que "el hecho de no controlar la pandemia está afectando a la economía" e insta a las administraciones a evitar el rebrote masivo a partir de tres ejes claros y definidos: hacer tests PCR masivos, generar más rastreadores y crear una aplicación de seguimiento de los casos de coronavirus. "Estas medidas son claves para controlar la pandemia", ratifica el presidente de la Cambra.
De momento, todo parece estar descontrolado y, como lamenta Canadell, "estamos empezando con mal pie" el mes de julio. Los rebrotes del Segrià, el Hospitalet de Llobregat y Barcelona están comportando que muchos turistas anulen sus viajes en Catalunya en un momento en que Barcelona se sitúa como ciudad líder en reservas internacionales por delante Madrid, Roma, Lisboa y Milà.
La capitalidad (no) reconocida de Barcelona
La capital catalana ya encabezaba el ranking de reservas antes de la pandemia y ahora lo continúa haciendo, pero esto sólo se salvará "si se hacen las cosas bien". Y hacer las cosas bien también pasa por "velar para que el dinero que viene de Europa sirva para salvar la economía". Un dinero de los fondos europeos que desde la Cambra esperan que lleguen a principios de 2021 y que puede servir para cerrar la segunda parte de la recuperación.
Canadell: "Tenemos que velar para que el dinero que viene de Europa sirva para salvar la economía"
Según Canadell, los fondos europeos -pero también el dinero que aporta ahora el Estado- tienen que servir para encarar proyectos en la línea de continuar potenciando el crecimiento económico, pero también para que estos proyectos estén "enfocados a la mejora de la competitividad económica y social", de forma que la economía aporte el valor añadido de la sostenibilidad y de ser más sociales porque sólo así continuaremos siendo competitivos. "2021 podría ser un año muy bueno que podría ayudar a este cambio de modelo y nos daría más competitividad y un crecimiento más sostenible en el tiempo".
Con la idea siempre de esquivar un nuevo cierre de la economía y una parada en seco de la actividad del país, Canadell, como Oriol Amat, ve la botella medio llena y tiene claro que "hay lugar para el optimismo si se hacen las cosas bien". Porque, si es así, la recuperación será lenta y tímida pero saldrá adelante. Ahora bien, si las administraciones no captan el mensaje, la recuperación podría pasar de ser una U a una W y con nuevos rebrotes descontrolados, la caída sería más fuerte. "No hay lugar para el pesimismo si estamos haciendo bien el trabajo, la economía irá saliendo y 2021 podría ser muy intenso en recuperación de la economía", sentencia el presidente de la Cambra.