26
de Marzo
de
2015
Act.
26
de Marzo
de
2015
La cuestión de la financiación es como un río que suena y que, si no lo hace, preocupa. Casi siempre sale a los papeles. Y en pleno debate soberanista en un año marcadamente electoral, los técnicos del Instituto de Economía de Barcelona (IEB) ponen un argumento más sobre la mesa para pedir un cambio fiscal en Cataluña.
Tal como explica la investigadora de la IEB Maite Vilalta, la nivelación de los recursos del actual sistema de financiación autonómica resulta "errático y poco justificado". Vilalta, que ha hecho estas declaraciones durante la presentación en la Universitat de Barcelona del VI Informe IEB sobre Federalismo Fiscal, señala que "la autonomía financiera actual es insuficiente" y reclama ajustes del sistema que nivela los territorios con más y menos recursos (es decir, del que se denomina solidaridad financiera).
Ajustes que podrían emmirallar-se en el modelo que funciona en el Canadá, donde las regiones que más recursos disponen (Alberta, con más de 12.000 dólares por habitante; Saskatchewan, Newfoundland and Labrador, British Columbia, en este orden) mantienen, apenas después de participar de esta 'solidaridad financiera' que gestiona el Gobierno federal, los mismos niveles de dólares canadienses por habitante. En resumen, que quién más capacidad financiera tiene no la pierde después de la nivelación. El resto de valoraciones sobre el modelo canadiense, y sobre todo sobre el caso del Quebec, son el grueso del artículo que, dentro del informe, firma el autor Marcelin Joanis, del Polytechnique Montréal CIRANO.
Cataluña y Extremadura, alejadas
El que pasa en el Canadá es el contrario, pero, del que pasa en Cataluña y en otros territorios del Estado, siguiendo la gráfica que maneja la IEB. Vilalta ha analizado el modelo de financiación española (las cifras con que trabaja pertenecen al periodo 2009-2012) para mostrar que Cataluña, a pesar de ser la tercera región que más aporta al régimen común, queda relegada en una novena posición después de los ajustes de nivelación pertinentes (tributos, fondos de garantía de los servicios públicos fundamentales y fundes ajuste), en amarillo en la gráfica anterior.
Con los recursos procedentes del modelo de financiación autonómica, la media de los años 2002-2012 en Cataluña se sitúa en 2.017 euros por habitante, en Extremadura en 2.510 euros por habitante y en Madrid –la comunidad que más ingresos por tributos genera- un total de 1.904 euros por habitante. "En esta situación, Extremadura -que contribuyendo es la penúltima- acaba teniendo más recursos per cápita que Cataluña", ha expuesto la experta. Es por eso que la profesora propone eliminar los tres fondos de ajuste, puesto que distorsionan el efecto del fondo de garantía, que considera "mejorable" pero que ya funciona como instrumento de nivelación entre las comunidades.
En este sentido, Vilalta también ha destacado las dos comunidades forales que no participan de esta nivelación económica: Navarra y el País Vasco. "Hay muchas comunidades autónomas que comen 'aparte'. Tienen plena autonomía y no participan de la nivelación", ha denunciado, a la vez que ha criticado "el privilegio" que sí que disfrutan estas comunidades. "La autonomía financiera no es un capricho, sino que obliga los gobiernos a tomar decisiones", ha añadido. Razones suficientes por Vilalta para exigir una revisión del modelo actual, puesto que "el futuro es incierto", ha añadido. Y es que el documento también incide en la necesidad de más autonomía tributaria para las comunidades, que actualmente sólo tienen capacidad de decisión y gestión sobre el 13% de los ingresos procedentes de impuestos, cosa que "limita en exceso" su margen de maniobra para conseguir ingresos, ha apuntado Vilalta.
La independencia, un posible escenario
"Yo he hecho números de que pasa en el modelo sin nosotros. El modelo de financiación actual puede funcionar sin Cataluña, pero alguien se comería el marrón y saldría perdiendo, quizás sería Madrid, porque seva un territorio aportador", ha puntualizado Vilalta. Y es que la docente ha numerado cuatro escenarios para solucionar la ensambladura de Cataluña en el modelo actual: además de la secesión mencionada, el mantenimiento del estatus quo con reformas mínimas, el impulso de una reforma federal de la Constitución y el acuerdo bilateral Cataluña-España para establecer un modelo específico por esta comunidad. En el informe, Vilalta sostiene que "la revisión del modelo ya se tendría que estar haciendo" y no hacerlo "implica dejar de aplicar la ley", ha matizado.
En resumen, la técnica de la IEB reclama más autonomía financiera de los gobiernos autonómicos y un reparto equitativo de los recursos. "Se trata de compatibilizar autonomía e igualdad, tal como pasa en la totalidad de los modelos que nos ofrece el sistema comparado. El modelo de financiación de las provincias del Canadá es un excelente ejemplo", mantiene. Por lo tanto, y si la solución viene del Quebec?
Tal como explica la investigadora de la IEB Maite Vilalta, la nivelación de los recursos del actual sistema de financiación autonómica resulta "errático y poco justificado". Vilalta, que ha hecho estas declaraciones durante la presentación en la Universitat de Barcelona del VI Informe IEB sobre Federalismo Fiscal, señala que "la autonomía financiera actual es insuficiente" y reclama ajustes del sistema que nivela los territorios con más y menos recursos (es decir, del que se denomina solidaridad financiera).
Ajustes que podrían emmirallar-se en el modelo que funciona en el Canadá, donde las regiones que más recursos disponen (Alberta, con más de 12.000 dólares por habitante; Saskatchewan, Newfoundland and Labrador, British Columbia, en este orden) mantienen, apenas después de participar de esta 'solidaridad financiera' que gestiona el Gobierno federal, los mismos niveles de dólares canadienses por habitante. En resumen, que quién más capacidad financiera tiene no la pierde después de la nivelación. El resto de valoraciones sobre el modelo canadiense, y sobre todo sobre el caso del Quebec, son el grueso del artículo que, dentro del informe, firma el autor Marcelin Joanis, del Polytechnique Montréal CIRANO.
Cataluña y Extremadura, alejadas
El que pasa en el Canadá es el contrario, pero, del que pasa en Cataluña y en otros territorios del Estado, siguiendo la gráfica que maneja la IEB. Vilalta ha analizado el modelo de financiación española (las cifras con que trabaja pertenecen al periodo 2009-2012) para mostrar que Cataluña, a pesar de ser la tercera región que más aporta al régimen común, queda relegada en una novena posición después de los ajustes de nivelación pertinentes (tributos, fondos de garantía de los servicios públicos fundamentales y fundes ajuste), en amarillo en la gráfica anterior.
Con los recursos procedentes del modelo de financiación autonómica, la media de los años 2002-2012 en Cataluña se sitúa en 2.017 euros por habitante, en Extremadura en 2.510 euros por habitante y en Madrid –la comunidad que más ingresos por tributos genera- un total de 1.904 euros por habitante. "En esta situación, Extremadura -que contribuyendo es la penúltima- acaba teniendo más recursos per cápita que Cataluña", ha expuesto la experta. Es por eso que la profesora propone eliminar los tres fondos de ajuste, puesto que distorsionan el efecto del fondo de garantía, que considera "mejorable" pero que ya funciona como instrumento de nivelación entre las comunidades.
En este sentido, Vilalta también ha destacado las dos comunidades forales que no participan de esta nivelación económica: Navarra y el País Vasco. "Hay muchas comunidades autónomas que comen 'aparte'. Tienen plena autonomía y no participan de la nivelación", ha denunciado, a la vez que ha criticado "el privilegio" que sí que disfrutan estas comunidades. "La autonomía financiera no es un capricho, sino que obliga los gobiernos a tomar decisiones", ha añadido. Razones suficientes por Vilalta para exigir una revisión del modelo actual, puesto que "el futuro es incierto", ha añadido. Y es que el documento también incide en la necesidad de más autonomía tributaria para las comunidades, que actualmente sólo tienen capacidad de decisión y gestión sobre el 13% de los ingresos procedentes de impuestos, cosa que "limita en exceso" su margen de maniobra para conseguir ingresos, ha apuntado Vilalta.
La independencia, un posible escenario
"Yo he hecho números de que pasa en el modelo sin nosotros. El modelo de financiación actual puede funcionar sin Cataluña, pero alguien se comería el marrón y saldría perdiendo, quizás sería Madrid, porque seva un territorio aportador", ha puntualizado Vilalta. Y es que la docente ha numerado cuatro escenarios para solucionar la ensambladura de Cataluña en el modelo actual: además de la secesión mencionada, el mantenimiento del estatus quo con reformas mínimas, el impulso de una reforma federal de la Constitución y el acuerdo bilateral Cataluña-España para establecer un modelo específico por esta comunidad. En el informe, Vilalta sostiene que "la revisión del modelo ya se tendría que estar haciendo" y no hacerlo "implica dejar de aplicar la ley", ha matizado.
En resumen, la técnica de la IEB reclama más autonomía financiera de los gobiernos autonómicos y un reparto equitativo de los recursos. "Se trata de compatibilizar autonomía e igualdad, tal como pasa en la totalidad de los modelos que nos ofrece el sistema comparado. El modelo de financiación de las provincias del Canadá es un excelente ejemplo", mantiene. Por lo tanto, y si la solución viene del Quebec?