La población catalana pasará de los 7,5 millones de habitantes actuales a los ocho en 2030, según la previsión mediana del Instituto Catalán de Estadística (Idescat). Todo y la baja natalidad y el aumento de la esperanza de vida, que supondrá un envejecimiento notable de la población y un crecimiento natural negativo, la llegada de unos 40.000 inmigrantes cada año hará que tres de cada cuatro comarcas aumenten la población, sobre todo las de Girona, ámbito metropolitano, Penedès y Camp de Tarragona, mientras que las Tierras del Ebro probablemente perderán población. A largo plazo, la población de Catalunya crecerá moderadamente y en 2060 se situaría en 8,770 millones de habitantes.
El Idescat ha presentado las Proyecciones de población de Catalunya, que hace cada cinco años, con previsiones demográficas hasta 2030, 2038 y 2061, según el caso, de la mano del director del Idescat, Frederic Udina, con el vicepresident del Govern, Pere Aragonès, la secretaria general d'Economia, Natàlia Mas, y el director del Centro de Estudios Demográficos, Albert Esteve. El Idescat proporciona tres escenarios de proyecciones de población basándose en diferentes hipótesis de fecundidad, esperanza de vida y flujos migratorios. Este informe se centra en el escenario mediano, que es el que se considera más plausible de acuerdo con la dinámica demográfica actual. En el escenario bajo, Catalunya se quedaría con la misma población que ahora en 2030, y en el escenario alto llegaría a los casi 8,4 millones de habitantes. En 2060, el escenario bajo sitúa la población en 6,9 millones, y el escenario alto en 10,5.
La población en edad de trabajar, de 16 a 64 años, aumentará ligeramente, fruto de los saldos migratorios previstos
La población en edad de trabajar, de 16 a 64 años, aumentará ligeramente, fruto de los saldos migratorios previstos. Esta población potencialmente activa pasaría de 4,863 millones el 2018 a 5,088 millones en 2030 y superaría el máximo histórico registrado el 2009 (5,022 millones). Paralelamente, la población en edad de trabajar estará más envejecida, puesto que aumentará la población de 45 a 64 años, tanto en valor absoluto como en porcentaje.
La población de 65 años y más ha aumentado de manera progresiva y constando en las últimas décadas y lo continuará haciendo en el futuro, puesto que pasará de 1,417 millones en 2018 (el 18,8% de la población) a 1,785 millones en 2030 (el 22,3%). A largo plazo, en el horizonte del año 2060, la población mayor de 65 años sería de 2,615 millones de personas y representaría el 29,8% de la población.
Tierras del Ebro, a otro ritmo
En el horizonte 2030 todos los ámbitos territoriales tendrán más población que en 2018, excepto las Tierras del Ebro (-0,7%). Los ámbitos con más crecimiento en términos relativos de aquí a 2030 serían el Penedès (8,1%), las comarcas gerundenses (7,8%) y el Campo de Tarragona (7,8%), seguidos del área metropolitana de Barcelona (6,2%). El crecimiento sería más moderado en las Comarcas Centrales (5,5%) y Poniendo (2,5%), mientras que sería más débil al Alto Pirineu y Aran (0,2%).
El envejecimiento de la población es una tendencia global de la población de Catalunya que afecta todas las comarcas. En 2030, en 14 comarcas (una de cada tres) al menos una cuarta parte de la población tendrá 65 años o más. Como resultado de la baja natalidad y el envejecimiento de la población, tres de cada cuatro comarcas tendrán más defunciones que nacimientos en el conjunto del periodo 2018-2030. En cambio, en este periodo se prevé que la migración será positiva en todas las comarcas catalanas y, por lo tanto, en muchas compensaría el saldo natural de signo negativo. En consecuencia, la migración será el componente que hará crecer la población en la mayoría de comarcas.
La ciudad de Barcelona crecería un 2,1% y pasaría de los 1,614 millones de habitantes en 2018 a los 1,648 millones en 2030
La mayoría de comarcas ganarán población a medio plazo. Según el escenario mediano, en 2030 la población será superior al actual en tres de cada cuatro comarcas. Las situadas al litoral y prelitoral de Barcelona y Girona, y las situadas al litoral del Campo de Tarragona, son las que crecerán más. Concretamente, las comarcas que lo harán más en términos relativos serán el Gironès (11,5%), el Baix Penedès (11,5%), el Tarragonès (11,1%) y el Maresme (10,1%), donde la población aumentaría más del 10% respecto a la población actual. Las seguirían el Vallès Occidental, Osona, el Alt Penedès y el Baix Llobregat.
La ciudad de Barcelona crecería un 2,1% y pasaría de los 1,614 millones de habitantes en 2018 a los 1,648 millones en 2030. De hecho, del cerca de medio millón de habitantes que se prevé que aumente Catalunya hasta 2030, casi la mitad, 240.000, estarán en el área metropolitana sin contar el Barcelonès.