La sede de Nueva York de la ONU acogerá entre los días 6 y 17 de marzo la 67 Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer de Naciones Unidas (CSW67), órgano establecido en 1946 que se reúne anualmente para promover la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres. A este encuentro, que coincide con la celebración del 8M, Día Internacional de la Mujer, acudirá por primera vez una de las expertas más reconocidas de Cataluña, España y Europa en diversidad y género, Mireia Del Pozo. La profesional asistirá a las jornadas como presidenta del Centro de Estudios de las Mujeres de Europa, organización declarada de interés público el pasado mes de enero por la Generalitat de Catalunya.
El tema central de la 67 CSW es “Innovación y cambio tecnológico, educación en la era digital para conseguir la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y niñas”, y, como en tema de revisión, “Desafíos y oportunidades en la consecución de la igualdad entre los géneros y el apoderamiento de las mujeres y las niñas rurales”. Sobre estas jornadas, Del Pozo destaca la importancia de la educación, formación y sensibilización para alcanzar la igualdad de género. "Sólo la educación nos hará libres. La innovación y el cambio tecnológico deben ser la palanca de cambio, y esto hay que hacerlo con perspectiva empresarial de género y visión ética”, continúa. Y añade: "Hay que desplegar y ejecutar programas y acciones a empresas y organizaciones, contando con el acompañamiento de expertas que desplieguen las directrices que se marcan en la ONU y en el Parlamento Europeo".
Mireia Del Pozo insiste en que, aunque en muchos países occidentales ya se han aprobado planes de igualdad, lo realmente necesario es establecer mecanismos de seguimiento que garanticen que se desplieguen, para que el cambio cultural empresarial desde la cúpula hasta la base sea real. Esta reclamación ya la ha planteado Del Pozo en otros encuentros internacionales, como la Jornada de los Derechos de las Mujeres que se celebró en 2022 en Estrasburgo, en el Parlamento Europeo, también con motivo del Día de la Mujer. "Es una reivindicación que en el marco del 8M permite visualizar una situación injusta y antidemocrática, que es necesario revertirse con el compromiso y la acción de los diferentes agentes sociales, económicos y políticos".