La compañía Mon-Pa, a través de las panificadoras Myrpa y Pamyr, ha presentado un expediente de despido colectivo (ERE) que afecta a un total de 96 trabajadores y que supone el cese de su actividad productiva. El grupo cuenta con 23 panaderías en Barcelona y cuatro más en Mollet del Vallès. Los titulares de la empresa son los hermanos Garcia Vico, que comunicaron a los trabajadores el 16 de agosto pasado el cierre de la sociedad y les anunciabaron que habían empezado los trámites para el cierre de la empresa.
En un comunicado, CCOO ha expresado su rechazo a esta decisión, que la empresa barcelonesa ha tomado alegando causas económicas, y la ha calificado de "desproporcionada e injusta". El sindicato denuncia que la compañía ha ejecutado el expediente "de mala fe" y ha pedido a la dirección que abone a las dos últimas mensualidades que adeuda a la plantilla.
Además, le emplaza a buscar soluciones que garanticen la continuidad de la actividad y la articulación de medidas no traumáticas para la plantilla. Hasta el momento, asegura CCOO, la empresa "no ha aportado ninguna solución y únicamente alega la falta de liquidez para pagar las nóminas, dejando clara una nula voluntad de diálogo con expectativas de continuidad".