El domingo por la noche, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, admitió en una entrevista a Fox que el país atravesaba un "período de transición". Este lunes, la bolsa norteamericana ha castigado esta falta de contundencia con caídas lideradas por el Nasdaq (-4%), que ha sufrido su peor jornada desde 2022, aunque también se ha reflejado en el S&P500 (-2,69%) y Dow Jones (-2,09%). Una tendencia a la baja que se suma a las que ya se anotaron la semana pasada.
Casualmente, uno de los socios de gobierno de Trump, Elon Musk, ha sido el gran perjudicado de esta caída. Las acciones de Tesla se hundieron un 15,4% durante el lunes negro. Son los títulos más perjudicados de la jornada y, en general, de todo 2025: en dos meses y medio, su valor ha retrocedido un 45%. Con todo, la compañía de coches eléctricos futuristas ya ha perdido todos los beneficios que había acumulado desde la victoria del candidato republicano a principios de noviembre de 2024.
Los aranceles de Trump no están gustando a los mercados estadounidenses, pero tampoco a entidades bancarias relevantes como Goldman Sachs. El banco ha rebajado su previsión de crecimiento del PIB estadounidense del 2,4% al 1,7%, además de agregar que la inflación aumentará del 2% al 3%. Todo ello es una consecuencia de un panorama incierto en el que algunos inversores y analistas consideran que reina un "ambiente de caos".
Las criptomonedas, también perjudicadas
Tradicionalmente, el comportamiento de las criptomonedas ha sido diferente al de los demás mercados. Con Trump, sin embargo, esto ha cambiado: el bitcoin, que había alcanzado su máximo después de la victoria del nuevo presidente, ya ha quemado gran parte del repunte que había logrado y hoy se encuentra en 81.400 dólares de valor. Durante este sacudón, se hundió hasta los 76.000 dólares momentáneamente.