A la moratoria hotelera de Barcelona de 2015, le siguió el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (PEUAT) dos años después. La primera regulación fue una de las primeras medidas que tomó el gobierno municipal de Barcelona con Ada Colau al frente e implicó que se suspendieran las concesiones de licencias turísticas, incluidas aquellas que ya estuvieran en trámite. La medida afectó a 30 proyectos hoteleros que estaban en marcha y que no trascendieron, como un hotel de lujo de la cadena Hyatt en la Torre Glòries o un hotel, también de lujo, en la Torre Deutsche Bank. El objetivo de la moratoria de 2015 era hacer una radiografía del sector en la ciudad y elaborar un plan que frenara la presión turística en determinados barrios de Barcelona. De aquí nació el PEUAT, la regulación que hoy en día es vigente y que ha mantenido a Barcelona sin nuevos hoteles hasta la llegada del Leonardo Royal Hotel Barcelona Fira.
El Leonardo Royal Hotel se ha estrenado como el primer hotel aprobado por el Ayuntamiento de Barcelona desde la moratoria de 2015 y lo ha conseguido por su ubicación. El hotel se encuentra en el nuevo Parque Empresarial BCN Fira District, en la Zona Franca (Sants-Montjuïc), una zona contemplada por el PEUAT donde sí se pueden construir nuevos hoteles.
La regulación hotelera en Barcelona no ha sido el principal obstáculo con que se ha encontrado el hotel: la pandemia les obligó a parar las obras durante tres semanas
"La primera vez que vi el solar fue en 2017", explica Shay Raz, director general de Leonardo Hotels en España, quien asegura que no les ha parecido "raro que el Ayuntamiento sea exigente en el ámbito de la construcción" dada la experiencia que tienen con otras ciudades de Europa. La compañía Fattal Hotel Group, a la cual pertenece la cadena hotelera, cuenta con 220 hoteles distribuidos por 19 países de Europa y en Israel.
De hecho, la regulación hotelera en Barcelona no ha sido el principal obstáculo con el que se ha encontrado el hotel: la pandemia de la covid-19 les retrasó el proceso de construcción obligándolos a parar las obras durante tres semanas y dificultando la adquisición de materiales de construcción durante meses. También ha reducido notablemente el turismo de negocios, que es su principal target.
Las ferias y el turismo de negocios
El hotel está focalizado en el turismo de negocios. Cuenta con salas de reuniones y espacios de coworking adaptados a las nuevas exigencias del mundo laboral: salidas al exterior para hacer descansos, zonas adaptables para las diferentes necesidades de las empresas, etcétera. Pero falta lo más importante: los clientes. A pesar de que las ferias y los congresos han empezado a resurgir, su retorno es progresivo y el formato todavía es reducido. Según Ray, "la Fira es el punto de demanda más importante de la zona", por eso tienen muchas esperanzas en que el Mobile World Congress del 2022 y el Integrated Systems Europe (ISE) supongan el inicio de una nueva etapa para el mundo de las ferias y los congresos.
En clave turística, "Barcelona estaba más dormida que Madrid hasta el verano", asegura Raz, "pero desde el inicio de septiembre hemos empezado a ver movimiento". De todos modos, están saliendo con precios más bajos de los habituales para atraer más clientes. En algunos establecimientos, han llegado a reducir el precio de la habitación hasta la mitad, consiguiendo de este modo buenos niveles de ocupación. Otra estrategia que seguirá el hotel para conseguir más demanda es adaptarse a otro perfil y abarcar también un público familiar los fines de semana.
Shay Raz, en clave turística: "Barcelona estaba más dormida que Madrid hasta el verano"
Barco insignia con el sello de sostenibilidad
El Leonardo Royal Hotel Barcelona Fira es el noveno hotel de la compañía en España -el cuarto de Barcelona-, pero Raz lo cataloga como su hotel insignia porque es "de nueva construcción y de cuatro estrellas superior". Afirma que es "muy diferente construir un hotel nuevo que hacer un take over (adquisición) y quedarte con lo que hay". Además, es el primer hotel de la marca Royal en España, la gama más lujosa de la compañía.
Shay Raz: "Es muy diferente construir un hotel nuevo que hacer un 'take over' (adquisición) y quedarte con lo que hay"
El hotel ha supuesto una inversión de 45 millones de euros. Cuenta con 204 habitaciones, 6 salas de reuniones, espacio de coworking, un jardín urbano de casi 700 metros, un gimnasio y una piscina. Tiene un diseño minimalista y atemporal y, por supuesto, cuenta con el sello de sostenibilidad: está construido con materiales sostenibles, utiliza un sistema de recuperación de aguas grises, tiene puntos de carga para vehículos eléctricos y está conectado a la red de ecoenergías District Heating & Cooling, una central que suministra energía térmica a Barcelona sur, la Zona franca y l'Hospitalet.