Sant Valentín se convierte en una nueva ocasión para los ciberdelincuentes para pescar nuevas víctimas. Concretamente, y según datos de Check Point Research, la división de Inteligencia de Amenazas de Check Point, desde enero se han creado 18.171 nuevos dominios que contenían las palabras "Valentine" o "love", cifra que supone un incremento del 30% respecto al mes anterior y del 17% respecto al año anterior. Ahora bien, lo preocupante es que 1 de cada 8 de estos nuevos dominios ha sido considerado malicioso o de riesgo.
Parece, además, que muchos de estos ciberdelincuentes han conseguido lo que buscaban, pues una de cada 27 empresas han accedido a estas páginas web peligrosas. Según Check Point, se trata de un 34% más que el mes anterior y un 175% más que en enero del 2023. La tendencia pone de manifiesto la escalada de los riesgos de ciberseguridad que acompañan los grandes acontecimientos o festividades del año, como es el caso del Día de Sant Valentín o el Black Friday.
Desde enero se han creado 18.171 nuevos dominios que contenían las palabras "Valentine" o "love"
Los ataques de phishing son la forma más común de ciberataque. Consisten en manipular a los internautas para que compartan información confidencial o hagan click en enlaces maliciosos. Con el auge de herramientas de inteligencia artificial como ChatGPT, estas ciberestafas se han vuelto más sofisticadas porque aprovechan dominios falsos y bots para imitar a empresas legítimas o, incluso, perfiles de personas que pretenden "enamorar".
En fechas señaladas como esta, los ciberdelincuentes difunden correos electrónicos de phishing y spam para engañar a los usuarios y llevarlos a páginas web fraudulentas y maliciosas para infectarlos, robarles dinero o información. Algunas de las prácticas más habituales son, por ejemplo, enlaces que se asemejan a una página web activa conocida, pero dónde hay una letra cambiada, solicitar llenar formularios y encuestas para recibir algún regalo temático a domicilio, o publicar una oferta -maliciosa- que caduca rápidamente para que el usuario no tenga tiempo de reaccionar o pensar bien las consecuencias.