Más exportaciones y menos ventas al Estado español. El 49% de las pymes industriales venden más al exterior que en 2018, cosa que demuestra "un ligero aumento del peso de los mercados internacionales" y un descenso del nacional. Así se desprende del informe presentado por Pimec Evolución de la pyme industrial catalana 2019, que pone de manifiesto que en 2019 "se nota un cierto retraso", pero que la situación evoluciona favorablemente. Las perspectivas para 2020 son, en palabras del director del Observatorio de la patronal, Modesto Guinjoan, "relativamente optimistas". Pero habrá que ver qué pasa. Con unos presupuestos "sociales, pero no industriales" en Catalunya, el presidente de Pimec, Josep González, cree que el futuro pinta más difícil porque, en definitiva, "generar industria y puestos de trabajo es hacer acción social y las partidas son insignificantes en relación a partidas de sanidad o educación, que son sensiblemente muy superiores". Y, por eso, agentes económicos y sociales tendrían que revertir el divorcio sufrido entre las dos partes para ir a la par y volver a sumar.
Unas cuentas que vuelven a contemplar una subida de impuestos, cosa que no gusta nada a la patronal, que considera que el camino que tendría que coger el Govern es precisamente el de bajarlos y no contemplar un aumento del salario mínimo catalán. Y es que, recuerda González, "cuando hubo la crisis, con motivo de la caída de ingresos se justificó que se aumentaban una serie de impuestos y se dijo que si mejoraba la economía se podían bajar". Pero la economía ha mejorado y los impuestos vuelven a ir a la alza: "Parece como si sólo tuviéramos como solución aumentar la contribución de los ciudadanos y de las empresas", se lamenta.
Según su parecer, si los impuestos bajan, se acaba el debate sobre el salario mínimo de Catalunya. "Una cosa es subirlo de todo el territorio español y la otra hacerlo sólo aquí", subraya, al mismo tiempo que pone de manifiesto que aquí, por ejemplo, "tenemos cada año una reiterada subida del IBI y unas subidas de impuestos que también encarecen la vida de los ciudadanos", cosa que demuestra que "tenemos que actuar en estos aspectos y no con un SMI catalán que afectan a nuestra competencia con el resto de España".
¿Competir en impuestos?
Partiendo de la base que "ya sufrimos bastante los comparativos de la fiscalidad" y que "sólo falta que hayamos de competir en tema de impuestos más altos por culpa de un SMI", el presidente de Pimec admite que "somos optimistas teniendo en cuenta que estamos en un contexto de desaceleración económica", pero pide que política y economía vuelvan a ir de la mano porque, a pesar de que "durante muchos años hemos dicho que la economía va al margen de la política", "esto pronto se paga porque si no tenemos gobiernos que hagan políticas económicas no iremos bien".
González: "Podemos decir que hay un divorcio entre la evolución de la economía y como va la política"
"Si comparamos la mala evolución de la política y la buena de la economía, podemos decir que hay un divorcio entre la evolución de la economía y como va la política", pone encima la mesa González, que añade que en este sentido nadie les ha consultado en materia presupuestaria y "sabemos muy poco de los presupuestos". Es el reclamo de siempre de los agentes económicos, pero todavía los mantienen al margen a la hora de consultar cuestiones como las cuentas públicas.
"Pido que se aprueben, hace mucho tiempo que no tenemos y seria muy grave que por las circunstancias que sean no se aprueben", ha reclamado González, que ya antes de acabar el año recordaba que "tenemos las condiciones porque estamos en un momento donde podemos tener cambios significativos".
Patronales vs. Cambra
Prácticamente un año después de que Pimec y Foment firmaran la paz patronal, ahora vuelve una nueva guerra. Después de que la semana pasada, las dos patronales ya avisaron de que presentarían un estudio que "desmontará buena parte de los planteamientos" recogidos en la propuesta del Consell General de Cambres de cara el anteproyecto de la futura ley, González asegura que el borrador presentado por las cámaras es un "despropósito" porque "pone en cuestión la representatividad legítima" de CCOO, UGT, Foment del Treball y Pimec.
"Las cámaras han presentado una propuesta de ley de cámaras a la Generalitat de la cual no tenemos ni la versión oficial porque no ha habido un diálogo de las cámaras con los agentes sociales respete el intento de hacer una nueva ley", critica el presidente de la patronal de las pymes, que vuelve a insistir en la idea que el documento presentado por las cámaras "quiere alterar y perjudicar la representatividad de los agentes sociales".
Precisamente por eso, Pimec y Foment presentarán esta propuesta conjunta que previsiblemente saldrá a la luz a principios de febrero. Las patronales catalanas han encargado un informe a un letrado para evaluar el documento, un documento que tilda de "insólito e inaceptable" y que harán llegar a la Consellera d'Empresa i Coneixement.
Más exterior y menos España
Por otro lado, y en relación al informe, las pymes catalanas venden un 44% en Catalunya son del 44%, al resto de España del 27%, en la zona euro del 20% cuando en 2018 eran del 19% y en el resto del mundo el 14%, cuando el año anterior era un 12%. El informe destaca que los resultados del año pasado para las pymes industriales no han sido tan buenos como los de 2018: el 40% del sector ha registrado mejores resultados, un 35% iguales y un 25%, inferiores, y el saldo entre mejores y peores resultados (15%) es un poco inferior al de 2018, año en que se cifró en el 19%.
González: "Tenemos que actuar en los impuestos y no con un SMI catalán que afectan nuestra competencia con el resto de España"
Además, la edición de este año, es relativamente optimista con las previsiones, puesto que las perspectivas en relación con la actividad global son de un aumento del 54%, mientras que la disminución representa un 11%. Así pues, se obtiene un saldo de respuestas del 43% positivo, y, en cuanto a las inversiones, la previsión también es positiva, con un saldo del 15% favorable al aumento.
Más exportaciones, menos ventas en España, presupuestos más sociales pero menos industriales y un debate sobre el salario mínimo catalán que todavía pone todavía más leña al fuego en la cuestión de la subida de impuestos. Y, mientras tanto, la pugna entre patronales y agentes sociales con las cámaras por la futura ley continúa más caliente que nunca. A sólo un mes de empezar el año, las perspectivas son positivas, pero habrá que solucionar unas cuántas cosas y que la política vuelva a tener en cuenta a la economía a la hora de legislar.