Sin lugar a dudas, Catalunya es una de las principales regiones del mundo en las que las leyes y los derechos LGTBI están más avanzados que en otros lugares, con un profundo respeto por la diversidad y la protección de la libertad personal. Barcelona, especialmente el Eixample izquierdo conocido como el Gaixample, conforma un espacio único para disfrutar de actividades para todos los gustos. Además, la ciudad ha sido reconocida como el mejor destino turístico LGBTI del mundo según los Gay Travel Awards.
¿Cuáles son las "singularidades" de un turista LGTBI? Con la llegada del buen tiempo, este perfil de visitante gasta de media más de 250 euros diarios, sin incluir el alojamiento. La comunidad LGTBI representa el 10% del total de viajeros internacionales, con un gasto anual de 165.000 millones de dólares en el mundo, según las cifras de la Organización Mundial del Turismo (OMT). Y un crecimiento vertiginoso: aumentan un 10,3% anual. Junto con los turistas coreanos e irlandeses, el colectivo LGTBI se ha convertido en uno de los más deseados y buscados por los hoteleros y restauradores catalanes. Y por este motivo, una gama de servicios "a sus pies".
Las "singularidades" del turista LGTBI: gasto de 250 euros diarios y un crecimiento vertiginoso de visitantes del 10,3% anual
Según señalan desde Barcelona Turisme, aparte de los diversos galardones, la ciudad condal se ha convertido en la capital LGTBI del Mediterráneo. Durante junio y julio, en Barcelona hay varios festivales específicos para el público LGTBI, como el Pride o el Circuit Festival. También se ofrecen festivales de cine gay y lésbico durante la primavera y el verano.
Por ejemplo, durante agosto de 2023, el grupo Matinée organizó del 5 al 13 de agosto la 14ª edición de un festival de referencia en la escena gay internacional. El 80% de los asistentes eran extranjeros y el gasto medio subió a 250 euros al día. Sin contar el alojamiento que, mayoritariamente, se realiza en hoteles y apartamentos de la ciudad, hecho que contribuye de manera muy significativa a incrementar la tasa de ocupación hotelera de la ciudad.
Cifras del Circuit festival: 60.000 asistentes, contratación de 500 personas y más de 1.000 indirectas
De hecho, atrajeron a más de 60.000 personas, superando ligeramente el número de asistentes del 2022. El festival supuso la contratación directa de 500 personas y más de 1.000 de manera indirecta. Matinée hace valer que el Circuit se ha convertido "en un lugar de peregrinaje anual" para gays procedentes de todo el mundo que buscan disfrutar durante unos días de las vacaciones y la música que más les gusta en un espacio de libertad y tolerancia como el que encuentran en Barcelona. En este sentido, destacan que muchos de los visitantes proceden de países donde la homosexualidad aún está penalizada y perseguida, como China o los países árabes, que se sitúan en el top 10 del ranking por origen. Otros países de referencia en número de asistentes son Estados Unidos, Taiwán, Corea del Sur, Qatar, Kuwait, Israel, Brasil y Colombia.
Para los amantes de la cultura, también existe una librería especializada en literatura gay y lésbica. Se trata de Antinous, que abrió sus puertas hace más de 20 años. Ubicada en la Calle de Casanova, 72, de Barcelona, es un ambicioso proyecto que nació en 1997 con la intención de colaborar en la normalización del "hecho homosexual" desde la cultura y desde una participación activa en la sociedad, muy cercana al modelo de librería "Gay-lésbica" del norte de Europa. La librería Cómplices, nacida en 1994, cerró hace un año y medio, no por falta de clientes, sino por la jubilación de las propietarias. "Rompió muchos tabús y luchó por abrir camino", señalan muchos visitantes en las redes.
Sitges, un municipio pionero
Desde hace décadas, Sitges ha sido un municipio pionero en Catalunya en cultivar un entorno gay-friendly. De hecho, en 1980, la localidad del Garraf inauguró la primera discoteca para un público LGTBI en España, a la que pronto se sumó una red lúdica y comercial que hoy en día aún funciona plenamente. Siguiendo esta tradición, fue la primera localidad catalana en instalar un monumento contra la homofobia en 2006.
Sitges inauguró en 1980 la primera discoteca para un público LGTBI en España
A Sitges también se le suma Figueres y Lloret de Mar, que cuentan con el mayor número de servicios LGTBI y amigables de la Costa Brava y el resto de la provincia de Girona. Respecto a la Costa Dorada, destaca Salou, pero últimamente Tarragona y Reus también lideran una oferta amigable.
Finalmente, las personas del colectivo LGBTI viajan tres veces más que las heterosexuales, con una estancia más larga en el destino y un gasto medio tres veces superior, según los datos de un estudio de la Asociación Internacional de Viajes LGBTQ+ (IGLTA, en inglés). Sin embargo, encuentran barreras para viajar en más de 75 países del mundo. Por ello, uno de los principales aspectos que determina el destino elegido es sentirse seguro. Así, el estado español recibe seis millones de turistas LGTBI al año, que gastan proporcionalmente un 40% más que el resto.