Llenar el depósito de gasolina para esta Semana Santa es un 2,5% más caro que el pasado año, según los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea. De media el litro de gasolina en el Estado cuesta 1,63 euros el litro, mientras que durante las vacaciones del pasado año -que fueron un poco más adelante, entre el 10 y el 17 de abril- marcó 1 ,59 euros el litro, teniendo en cuenta que entonces se aplicaba un descuento de 20 céntimos el litro. Así, llenar un depósito medio de 55 litros este año cuesta 89,7 euros, mientras que hace un año costaba 87,5 euros. En cambio, en el caso del diesel el precio descendió un 5,3%. En ambos casos los precios están lejos de los máximos de las vacaciones de verano, cuando se superaron los dos euros el litro.
En concreto, este año el diésel cuesta 1,529 euros el litro, mientras que durante las vacaciones de Semana Santa del año pasado subía hasta 1,613 euros (1,813 sin tener en cuenta el descuento que aplicaba el gobierno español). Por tanto, llenar un depósito de 55 litros este año cuesta alrededor de los 84 euros, mientras que hace un año valía 88,7 euros.
El descuento de 20 céntimos el litro de carburante empezó a aplicarlo el gobierno español para combatir la escalada de precio que registraron los combustibles a raíz de la guerra en Ucrania. Sin embargo, la ayuda no evitó que durante el verano los precios tocaran techo y subieran hasta más de dos euros el litro. La bonificación global se eliminó para este 2023 y el ejecutivo de Pedro Sánchez lo justificó por la "bajada de precio" que habían registrado los carburantes. Hasta el pasado 31 de marzo el transporte profesional todavía mantenía una rebaja de 10 céntimos al litro. El Boletín Petrolero de la Unión Europea calcula los precios a partir de los datos de más de 11.400 estaciones de servicio de todo el Estado.