
Los precios del alquiler en los municipios con zonas declaradas tensionadas han caído un 3,7% desde que entró en vigor el tope hace un año, mientras que en Barcelona el descenso se ha acentuado hasta el 6,4%. De hecho, según ha explicado la consellera de Territorio y Vivienda, Sílvia Paneque, desde que se comenzó a aplicar la medida en los primeros municipios se han firmado mil contratos nuevos cada mes en Catalunya.
Por otro lado, en lo que respecta al precio medio de los nuevos contratos de alquiler en Cataluña, el cuarto trimestre del año pasado en comparación con el mismo periodo de 2023, se redujo un 1,6% y un 3,3% en relación con los primeros tres meses del año. En la capital catalana, el precio del alquiler ha retrocedido un 5,1% entre el último trimestre de 2024 y el de 2023.
El Sindicat de Llogateres lo ve "tímido"
Una vez conocida la cifra, el portavoz del Sindicat de Llogateres, Enric Aragonés, ha definido como “tímida” la disminución de los precios del alquiler “en el mercado regulado” y ha instado a crear una normativa para el alquiler de temporada y de habitaciones. Aragonés, en una atención a la prensa después de la presentación institucional del primer año de la aplicación del tope a los alquileres, ha dicho que se trata “de un mercado desregulado, que es cada vez más grande, y que han promovido”. Al mismo tiempo, ha destacado que “es un incentivo para echar” a los inquilinos.
Además, el portavoz de la plataforma ha recordado que el 5 de abril hay convocada una movilización para reclamar la rebaja de los precios y se ha organizado, porque después de la del 23 de noviembre “los gobiernos o no han entendido nada o están pasando de todo”.