El Eurostat ha confirmado este viernes que la inflación en el conjunto de la eurozona se mantiene en cifras récord. Después de la subida de precios sin precedente registrada en abril (+7,4%), la oficina de estadística de la Unión Europea ha informado que los productos en los países de la zona euro se encarecieron un 8,1% en términos interanuales en mayo.
El crecimiento responde principalmente a la evolución de los precios de la energía, que se han incrementado un 39,1% y que están fuertemente afectados por las consecuencias derivadas de la guerra de Ucrania. Sin embargo, también destaca el encarecimiento de los alimentos (+7,5%). Dentro de los alimentos, los productos no procesados son los que más han variado de precio (+9%). En cuanto a los bienes industriales y los servicios, las subidas fueron del 4,2% y el 3,5%, respectivamente.
El anuncio del Eurostat llega justo un día después de que la patronal catalanaFoment del Treball publicara su informe de la coyuntura económica haciendo una especial mención al peligro de la inflación y la incertidumbre que vive, en consecuencia, el panorama empresarial. Todo ello, según la patronal, "oscurece la recuperación" económica.