La Comisión Europea empeora un punto y medio las previsiones para la economía española respecto a los cálculos de mayo. En las previsiones de verano, el ejecutivo europeo pronostica que el PIB español se desplomará un 10,9% este año por la crisis causada por la covid-19, mientras que prevé un repunte del 7,1% para el año que viene. Así, las nuevas previsiones de Bruselas prevén un hundimiento todavía más profundo de la economía española del esperado para este año, pero aumentan una décima el repunte económico para 2021.
Según los cálculos, la española es la segunda economía de la eurozona que más caerá este año como consecuencia de la crisis causada por el coronavirus, sólo superada por la italiana con un hundimiento del 11,2%. El informe sobre las previsiones económicas de verano de la Comisión Europea apunta que la covid-19 ha causado una contracción económica "sin precedentes" en la economía española y que es "peor de lo que se esperaba".
"No se compensará completamente con el repunte previsto para la segunda mitad de 2020 a pesar de que muchas restricciones se hayan levantado", dice el documento de la Comisión Europea, que prevé que la economía española no se recupere de la crisis antes de 2022. De hecho, acabará 2021 más de cuatro puntos por debajo de los niveles previos a la covid-19. "La actividad se continuará recuperando durante la primera mitad de 2021 y después se moderará gradualmente en la segunda mitad del año", apunta el informe, que también prevé que la inflación caiga al -0,1% este año y aumente hasta el 0,9% en 2021.
Aumento del paro
Las previsiones de la Comisión también alertan del aumento del paro este año después del impacto "desproporcionado" de la crisis. En las previsiones de mayo, calculaba un paro del 18,9% y, a pesar del repunte económico para 2021, el desempleo se mantendría en el 17%. Según Bruselas, los ERTE han evitado la pérdida de puestos de trabajo, pero alerta de que cuando se retire esta medida puede crecer el número de parados.
Según Bruselas, el sector de los servicios es el más afectado por la crisis y prevé que la recuperación sea lenta en este ámbito porque implica una "interacción intrínseca". Así, el ejecutivo europeo apunta que las medidas de distanciamiento social y los cambios en el comportamiento del consumidor tendrán "impacto durante un largo tiempo" en la actividad económica española por el gran peso del sector servicios. Además, el ejecutivo europeo prevé que el turismo internacional no se recupere a pesar de la apertura de fronteras y que se vea afectado por la reducción de vuelos.
"La actividad manufacturera se prevé que recomience más rápido que la de los servicios, pero las disrupciones en la cadena global de valor y la débil demanda pueden impedir la normalización de la actividad industrial antes de finales de año", apunta el documento. En cuanto al consumo privado, Bruselas no prevé que recupere niveles previos a la covid-19 ni este año ni el que viene, mientras apunta que la inversión también repuntarà "lentamente debido a la débil demanda".
La economía de la eurozona cae un 8,7%
Las previsiones de la Comisión Europea también empeoran un punto los cálculos para la eurozona, que ve como todas sus economías caen por encima del 6%. Bruselas calcula que el PIB de la zona euro caerá un 8,7% este año y rebaja dos décimas el repunte para 2021, que se sitúa en el 6,1%. Italia, con un hundimiento del PIB del 11,2%, lidera la previsión de caída de la economía, después de que el ejecutivo europeo haya empeorado en casi dos puntos sus previsiones para el PIB italiano.
La siguen el Estado español, con una caída del 10,9%; Portugal, con un hundimiento del 9,8%; Eslovaquia y Grecia, con una disminución del PIB del 9%; y Bélgica, con una caída de la economía del 8,8%. Las previsiones de verano de la Unión Europea también empeoran en casi un punto los cálculos para la economía de la Unión Europea. Sitúan la caída en el 8,3% y rebajan tres décimas las previsiones de repunte para 2021, que se sitúan en el 5,8%