En Catalunya hay muchas frases hechas y refranes, pero una de las más utilizadas del sector económico y empresarial es "hacer el agosto". Básicamente se utiliza para referirse a quien tiene un negocio exitoso que puede permitirse disfrutar del mes de agosto entero de vacaciones sin preocuparse por las facturas o nóminas a pagar. Puede parecer que el octavo mes del año es el más flojo de todos los negocios pero, como todo en la vida, siempre existen excepciones. A continuación, las profesiones que no necesitan "hacer el agosto", sino que viven de él todo el año. Cuando los meses de verano son temporada alta.
1. Los organizadores de festivales
Catalunya, que acoge cientos de festivales de música en vivo durante todo el año, concentra entre los meses de verano la mayor parte de su oferta. Este año, más de 100 festivales de música se están celebrando de uno a otro del territorio catalán, entre los meses de mayo y septiembre. Así lo apuntaba la directora de VIA Empresa, Elena Busquets: "Si hace unas semanas decíamos que Catalunya era tierra de hubs tecnológicos, también podemos afirmar que lo es de festivales de música en directo". Pese a que necesiten meses de preparación es en verano cuando más brillan y mayor volumen de trabajo requieren. Éste es el caso del Festival Cruilla (con más de 76.000 espectadores) la Acústica de Figueres o el White Summer de Pals, con 100.000 asistentes. Por ejemplo, durante el año cuentan con tres trabajadores de forma fija en el White Summer, mientras cuando viene la primavera y a principios de verano ya se amplía hasta los 10 miembros activos. Posteriormente cuando el festival está en activo la plantilla es de 90 miembros, sobre todo jóvenes entre 20 y 30 años.
También es interesante conocer la historia de Martín Pérez Lombarte, empresario y promotor musical que ha creado e impulsado algunos de los festivales más reconocidos como Cap Roig, Jardins de Pedralbes o Mil·lenni, además de organizar conciertos de grandes artistas mundiales como Los Tres Tenores, Sting, Mariah Carey o Julio Iglesias. Así lo desgrana el periodista Bernat Bella en su caso de éxito: El creador de festivales de música de éxito en Catalunya.
2. Los restauradores (especialmente los chiringuitos de la playa)
Bares, restaurantes, discotecas y chiringuitos necesitan reforzar a su personal en verano para atender a la mayor clientela que tienen en verano. En las ciudades costeras, el turismo experimentará una importante escalada en esta estación, lo que hace que la mayoría de los comercios, tiendas de ropa, supermercados, restaurantes y hoteles, necesiten distintos perfiles, como los mencionados anteriormente. No es ninguna sorpresa en este listado, cuando el porcentaje del PIB dependiente del turismo ha superado desde hace décadas el 10% en Catalunya.
La novedad de este año es el turismo coreano. Barcelona está de moda entre los coreanos y el sector turístico se ha marcado como objetivo fidelizar a visitantes que se gastan más de 300 euros diarios. "Solo los queremos a ellos", confiesan a VIA Empresa.
3. Socorristas, profesores de surf y monitores de rafting
Es una de las profesiones veraniegas por excelencia, tanto si se trabaja en la playa, en los ríos o en piscinas públicas o privadas. Muchos de ellos son jóvenes y gracias a trabajar durante más de tres meses pueden vivir de esto gran parte del año. Un caso curioso es el de la empresa Ràfting Catalunya ubicada en Sort que tiene la mayoría de los días ocupados para practicar esta modalidad y que como confiesan a nuestro medio "es un no parar". El precio de las actividades supera los 50 euros por persona.
4. Heladeros
Esta profesión tiene otro tipo de “peligro”: el de querer comer helado en todo momento mientras se trabaja. Aunque cada vez se ha destacionalizado más, es habitual ver colas kilométricas en las heladerías catalanas durante el verano. A continuación, la historia de los Gelats D’liri, el delirio de una familia del Empordà para hacer los mejores helados. La familia Pagès no tenía experiencia en hacer helados cuando se hizo cargo de una heladería de l'Escala y ahora se han hecho un hueco en el Empordà. Y el ritmo durante el verano, no se detiene.
El propietario Josep Pagès también confiesa que "un negocio de temporada no es sencillo, porque cuando no trabajas, estás tranquilo, pero en la temporada es muy intenso, son las 24 horas”. Y que un día de lluvia en pleno mes de agosto puede derribar la facturación de manera importante.
5. Bonustrack: los agentes de viajes y el caso de Etiopía
Las agencias de viaje catalanas prevén un verano récord, con un incremento del 15% de las reservas respecto a 2022 y superior también al de 2019, antes de la pandemia. Asimismo, el sector indica que alcanzarán precios históricos por la inflación y la gran demanda que se registra. Todas las esperanzas están en verano. Sin embargo, quien ha tenido trabajo extra ha sido la agencia de viajes de Barcelona, Kananga.
En esta ocasión, un grupo de catalanes se vio sorprendido por una revuelta violenta de la guerrilla Fano, enfrentada con el Gobierno en la región de Amhara en Etiopía, el 2 de agosto, y quedó atrapado en una especie de hostal que estaba en muy malas condiciones, sin agua corriente, pulgas en las camas y compartiendo espacio con animales. Al lograr salir del país y llegar doce días después al Aeropuerto de El Prat de Barcelona, los turistas aprovecharon para "criticar al Gobierno por su inacción y atribuyen su liberación a un hotelero y la agencia de viajes".