Más de 22 proyectos de semiconductores, un componente electrónico en el centro de las tensiones del mercado global, se interesan por invertir en Catalunya, según ha anunciado el presidente del Gobierno, Pere Aragonès, en una reunión con representantes del sector en el Palau de la Generalitat . De concretarse todos, supondría una inversión de 1.600 millones de euros y la creación de 1.800 puestos de trabajo en los próximos dos o tres años. El sector de los semiconductores ha ganado peso en los últimos años y ya tiene 86 empresas, 12 centros de investigación e investigación, 6 universidades y emplea a 4.400 personas en Catalunya. "Tenemos la seguridad de que disponemos de todos los ingredientes para dar un paso adelante", ha dicho Aragonès.
En estos momentos, el sector especializado catalán factura 160 millones de euros, una cifra moderada pero fuentes del Govern remarcan que "el potencial del sector es ilimitado". Esta cifra no incluye las inversiones recientemente anunciadas como las de Intel que destinará 400 millones de euros para abrir un laboratorio de diseño de semiconductores, conjuntamente con el Barcelona Supercomputing Centre (BSC).
Inversión de 1.600 millones de euros y la creación de 1.800 puestos de trabajo en los próximos dos o tres años
Cerca de un 40% de las compañías se dedican a la fase de diseños de los chips, una de las tres fases de la cadena de valor de fabricación de estos materiales que se necesitan en gran cantidad para hacer funcionar los dispositivos electrónicos y principalmente se fabrican en Asia.
El Govern ha defendido que el potencial de Catalunya para atraer inversión del sector descansa sobre cuatro patas: la realidad "industrialmente más sólida" que el resto del Estado, el ecosistema digital y tecnológico maduro, la presencia de infraestructuras científicas como el BSC o el ICFO y la capacidad de generar talento especializado con 6 universidades que ofrecen formación vinculada al sector.