"Aquí siempre ha habido el mar, pero esto no siempre ha sido un puerto". El Palau de la Música se llena de autoridades y personalidades para celebrar y conmemorar el 150o aniversario del Puerto de Barcelona. Durante todo el año, el enclavo barcelonés ha protagonizado varios actos para conmemorar el siglo y medio de la infraestructura como las visitas gratuitas a las instalaciones a bordo de las Golondrinas, conciertos y visitas al Museo de Historia de Barcelona, donde se exponen los hechos más relevantes de la vida del Puerto. Un Puerto que representa mucho, que ha abierto las puertas del mar a la capital catalana, pero que todavía tiene camino a recorrer para ganar competitividad. Su presidenta, Mercè Conesa, ya reclamaba durante una entrevista con VIA Empresa que el Gobierno diera más independencia a los puertos -como marca la regulación europea-, así como el despliegue de una red de mercancías, que tienen un peso muy importante en el PIB de Catalunya. Y lo ha vuelto ha hacer. "Los puertos, si queremos mantenernos como competitivos, tenemos que asegurar que el espacio marítimo está conectado con el interior de los territorios", reivindicaba y reivindica Conesa. Y es que, el de la ciudad condal, es el primer puerto de España para tráficos internacionales.
¿Los objetivos más inmediatos? Ser "un puerto de referencia para todos aquellos barcos que sean más limpios", pero esto, como tantas otras cosas, también está sujeto a Puertos del Estado y no permite a la instalación tener "flexibilidad para establecer las bonificaciones ambientales". Ésta, decían fuentes cercanas en Conesa, ha sido una de las prioridades desde que cogió el relevo a Sixte Cambra hace casi un año y medio. Antes de Cambra (2011-2018), Joaquim Tosas (1998-2004), Joaquim Coello (2004-2006) y Jordi Valls (2006-2011) habían liderado la Autoridad Portuaria de Barcelona, el organismo público que opera el Puerto y que cuelga directamente de Puertos del Estado, es decir, del Ministerio de Fomento. Todos los expresidentes del Puerto y exdirectores generales han recibido de la mano de Conesa y del director general, José Alberto Carbonell, placas conmemorativas por su tarea. Todos menos aquellos que no han podido asistir al acto, como Tosas, que igualmente han sido citados y recordados.
Todas las autoridades conmemoradas del Puerto
El pistoletazo de salida al acto lo han protagonizado Anaïs Vila y Mateu Peramiquel al piano con la canción Maremar y, de fondo, el mar y el Puerto. Los actores Marta Marco y Lluís Marco recitaban las primeras palabras de Vistes al mar de Joan Maragall. Versos que daban paso a un vídeo que resume muy bien todo lo que representa el Puerto: oferta hotelera, pasajeros, emprendeduría con el Pier 01, pesca, pasión por la náutica y clubes náuticos, comercio, restauración, mercancías y exportaciones, cultura, tecnología... en definitiva, todo un mar para navegar y ser navegado en el pasado, presente y futuro.
Un Puerto nacido del diálogo
Conesa ha despedido el acto lamentando que Josep Rull, que "es muy querido por la comunidad portuaria", no esté, citando a las víctimas del temporal y haciendo un apunte que está a la orden del día: "Nos habría gustado que este acto se hubiera celebrado en otro contexto porque lo que conmemoramos hoy es fruto del diálogo".
Dicho esto, y después de repasar las cifras de la instalación, de las cuales " estamos muy orgullosos", ha hecho una declaración de intenciones de sus retos y ha mandado un mensaje muy claro (y en castellano) a Puertos del Estado recordándoles que "los puertos sólo podremos seguir creando prosperidad si damos competitividad a las empresas" y, precisamente "por eso, es tan importante reflexionar sobre el modelo de governanza".
Conesa: "Es muy importante reflexionar sobre el modelo de governanza de los puertos"
La presidenta del Puerto tampoco se ha olvidado de mencionar al Corredor Mediterráneo, que "sólo será una realidad si los puertos están conectados", y ha subrayado la importancia de "abordar la transición energética y digital, mientras tendía la mano a la ciudad de Barcelona y del Prat, que son las que alberga el enclave. "Los puertos tenemos el gran reto de generar prosperidad para nuestra comunidad, esto es fácil de decir y difícil de hacer", ha sentenciado para dar paso a Ítaca Band con Com si no hi hagués demà. Y, para cerrar del todo, Apropa't.
Let it shine
Pero antes, el Puerto ha querido agradecer con unas placas conmemorativas a diferentes agentes del enclave básicos para su funcionamiento (y crecimiento). Placas repartidas por su presidenta, Mercè Conesa, el director general del Puerto de Barcelona, José Alberto Carbonell, y el director corporativo de Puertos del Estado, Magec Montesdeoca. Las personas reconocidas han sido: el presidente del Consejo General de Agentes de Aduanas, Antonio Llobet, el presidente del Consejo General de Agentes Consignatarios de Barcos de Barcelona, Jordi Trius, el representante de los estibadors portuarios del Puerto de Barcelona, Albert Gil, y el presidente de la Asociación de Transitarios de Barcelona, Emili Sanz.
El Orfeó Català celebra el 150o aniversario del Puerto de Barcelona
Pero además de estas autoridades, también se ha podido ver a otras figuras como la delegada del Gobierno en Catalunya, Teresa Cunillera, el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, el primer teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni -en ausencia de la alcaldesa, Ada Colau-, la presidenta de Adif, Isabel Prado, o la delexpresident Artur Mas y el expresident José Montilla, además de diputados, cónsules y muchas más.
El Orfeó Català ha inundado el Palau con su música: una catqa de Go down moses y de Let it shine. Y después, han continuado las placas conmemorativas. Ha habido para el Govern y para la delegación del Gobierno, para Puertos del Estado, para el Ayuntamiento de Barcelona y para el Ayuntamiento del Prat de Llobregat.
De la Barcelona sin Puerto, a la apertura catalana
En la Barcelona sin puertos le carecían resguardos naturales como los que ya había en Génova o Marsella, pero también la dinámica del litoral barcelonés provocaba la entrada constante de arena. La ciudadanía vio la necesidad e importancia de tener un puerto, también porque los barcos de mercancías necesitaban seguridad para cargar y descargar.
Un dibujo de Barcelona antes de tener puerto | Puerto de Barcelona
Precisamente por eso, el 11 de diciembre de 1868, el Ministerio de Fomento aprobó la Junta de Obras del Puerto con el objetivo de dar luz verde a la construcción del primer muelle transversal, ejecutado entre 1877 y 1882. La Junta, que fue la primera entidad responsable de la administración y gestión de la instalación catalana y que impulsó la financiación y construcción de las obras del puerto moderno, se constituía el 5 de febrero de 1869, ahora hace 150 años. A partir de aquí, Barcelona empezó a abrirse en el mundo. La apertura del Canal de Suez aquel mismo año, conectaba a los puertos del mediterráneo con el Extremo Oriente y sus barcos ya aprovechaban el Puerto de Barcelona como base para hacer escalas.
La Junta resolvió un problema histórico de la ciudad consiguiendo proporcionar un resguardo amplio y seguro para los barcos y, además, transformó el Puerto de Barcelona "en la instalación marítima que la economía catalana industrializada necesitaba para conectarse con el resto del mundo". Pero 150 años dan para mucho y el enclave barcelonés se ha convertido en un elemento básico tanto para la economía catalana, como la estatal e internacional posicionándose como el hub logístico del Mediterráneo.
"Aquí siempre ha habido el mar, pero esto no siempre ha sido un puerto". Haz un viaje al pasado con nosotros y revive los 150 años de historia del #PortdeBarcelona. pic.twitter.com/dfxcxmpoua
— Puerto de Barcelona (@portdebarcelona) Augusto 2, 2019
Un hub que ha vivido cuatro ampliaciones y que, a pesar de querer crecer "ordenadamente", tiene en su horizonte la ampliación de la terminal BEST y la creación de una tercera, pero antes habrá que "impulsar aquellos trámites que sean necesarios para que de aquí unos años, cuando el Puerto lo necesite, la infraestructura esté preparada".
La competitividad, en la proa del Puerto
Pero a todo esto se tiene que sumar el hecho de que, mientras que el Puerto de Barcelona aportará al Fondo de Compensación Interportuario un total de 5,8 millones de euros, casi un cuarto de los 30,5 millones de euros de este fondo, sólo recibirá 315.000 euros o, dicho de otro modo, Barcelona aporta el 19% del sistema portuario pero recibe sólo el 0,7%.
Ahora, habrá que tener, como pide Conesa, "una red ferroviaria de mercancías que nos permita conectarnos con Europa" y una buena conexión con el interior de los territorios. "Una de nuestras oportunidades de competitividad como puertos no es sólo mirando a la línea marítima, sino también al hinterland, es decir, a la actividad interior", explica la presidenta del Puerto. Unas mercancías que, a pesar de no disponer de esta red, elevan su tráfico mes a mes y, en los primeros nueve meses de 2019, suponen un 1,6% más que el año pasado con un total de 52 millones de toneladas -el 73% de las exportaciones catalanas y el 24% de todo el Estado-. Además, el Puerto ya representa el 0,9% de la ocupación de Catalunya, con más de 41.200 puestos de trabajo y más de 3.000 clientes en forma de empresas.
El Puerto ya representa el 0,9% de la ocupación de Catalunya, con más de 41.200 puestos de trabajo y más de 3.000 empresas
Esto va de competitividad, una competitividad que pasa por la actuación de Puertos del Estado, que ni siquiera permite a la instalación "inspeccionar la mercancía garantizando su seguridad". Y una competitividad que también pasa por la rápida adaptación a la transformación digital y las nuevas tecnologías. De momento, se han sumado a la plataforma 5G y tienen previsto "empezar a desarrollar un espacio dentro del Puerto donde la tecnología pueda permitir una mejor conectividad y operaciones que pueden ser muy seguras y eficientes". Competitividad, sostenibilidad y digitalización son la vela actual y de futuro del Puerto de Barcelona, que quiere trabajar despacito y con buena letra y "primero consolidar y después crecer". "Aquí siempre ha habido el mar, pero esto no siempre ha sido un puerto".