El tráfico en el Puerto de Barcelona ha caído durante el primer semestre del año un 18,8% en relación con el mismo periodo de 2019 como consecuencia de la pandemia. de covid-19 . Según ha explicado el director general del Puerto de Barcelona, José Alberto Carbonell, en rueda de prensa telemática los descensos han estado de dos dígitos en casi todas las categorías. Las exportaciones de contenedores han caído cerca de un 3% (336.720 TEU) y las importaciones lo han hecho en un 15% (255.566 TEU). En cuanto a los resultados, el puerto ha obtenido un beneficio de 12,5 millones, un 39% menos.
La presidenta, Mercè Conesa, ha asegurado que el peor momento de la epidemia ya ha pasado y confía en el comercio exterior como clave para la recuperación económica. De hecho, las exportaciones han aguantado el golpe de la pandemia y sólo han sufrido un descenso del 3%. Ahora bien, respeto los cruceros no ha podido concretar cuando volverán a la capital catalana.
Carbonell, por su parte, ha explicado que la bajada del tráfico total en el Puerto de Barcelona también se explica por la reducción en los transbordos y en especial de los petróleos refinados. Por lo que hace las exportaciones, globalmente han caído un 5% -la de contenedores lo ha hecho en un 2,9%- y las importaciones han retrocedido un 15%. Carbonell ha señalado que el descenso del 3% es un "excelente comportamiento" teniendo en cuenta el contexto y ha apuntado que ya se está recuperando después de tocar fondo en mayo (16,6%).
Conesa y Carbonell durante la presentación de resultados | Cedida
Algunas de las bajadas más acusadas se han producido en la automoción, con un 48% y en los tráfico Ro-Ro con Italia y las Islas Baleares, con un 19%. Por lo que hace a la automoción, destaca el descenso del 84,8% de abril, cuando muchas fábricas estaban cerradas ni tampoco se venían vehículos por el estado de alarma. También se resintió el mercado de alquiler, muy vinculado al turismo.
En cuanto al tráfico Ro-ro, con Italia la caída fue de un 12%, especial con el norte de Italia, donde el impacto de la covid-19 golpeó más duramente, mientras que con las Islas Baleares el efecto se ha notado por el descenso en el turismo.
Sea como sea, y como dicen su presidenta y su director, el Puerto de Barcelona es "un motor generador de prosperidad que debe actuar como palanca para la reactivación económica".