Reabre el nuevo Puerto Olímpico de Barcelona sin ocio nocturno

Un espacio de 20.000 metros cuadrados dedicados a la economía azul, la náutica y la gastronomía, con una zona de restaurantes que se pondrá en marcha entre finales de agosto y septiembre

Reobre el nou Port Olímpic de Barcelona sense oci nocturn Reobre el nou Port Olímpic de Barcelona sense oci nocturn

Este domingo por la mañana ha reabierto el nuevo Puerto Olímpico de Barcelona después de cuatro años de obras y con un espacio de 20.000 metros cuadrados dedicados a la economía azul, la náutica y la gastronomía, con una zona de restaurantes que se pondrá en marcha entre finales de agosto y septiembre. De esta manera, se pone punto final al ocio nocturno después de años de quejas por parte de los vecinos. El ayuntamiento prevé que se instalen unas cincuenta empresas vinculadas a la náutica, la innovación o los servicios relacionados con el mar. El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha destacado que se inicia una "nueva etapa de reconexión de la ciudad con el mar".

El muelle de Mestral es ahora una plaza de 8.000 metros cuadrados donde hay varios locales para que próximamente se instalen empresas relacionadas con la economía azul. Desde el Ayuntamiento de Barcelona esperan más de 50 empresas que generen 150 puestos de trabajo. También hay varios espacios de recreo donde se programarán actividades para la ciudadanía.

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha destacado que se inicia una "nueva etapa de reconexión de la ciudad con el mar"

Durante la inauguración, Collboni ha expresado la necesidad de "rehabilitar y recuperar espacios que conecten la ciudad con el mar Mediterráneo". Por eso, ha subrayado la apuesta por la náutica, ubicando allí el Centro Municipal de Vela o la celebración de regatas. De hecho, dentro de un mes se iniciará la Copa América y el Puerto Olímpico será uno de los escenarios de este evento deportivo.

Sin ocio nocturno

Una de las principales novedades de las instalaciones portuarias es que se elimina el ocio nocturno. El presidente de la asociación de vecinos de la Villa Olímpica, Jordi Giró, ha recordado que la convivencia fue "muy difícil" en los últimos años y ha subrayado que el puerto "vuelve a la vida que se había previsto en 1993 en su inauguración". Giró también ha valorado positivamente el "consenso" sobre el cual se ha construido el proyecto, poniendo de acuerdo a todos los grupos políticos municipales, así como a las tres administraciones (ayuntamiento, Generalitat y Estado).

Sí que habrá un espacio para la restauración denominado balcón gastronómico. En total, abrirán once restaurantes y tres tiendas que ahora se encuentran en la fase final de adecuación. A partir de finales de agosto habrá lugares dedicados a la cocina catalana, comidas internacionales o una heladería, entre otros negocios gastronómicos.

Un puerto sostenible

Collboni también ha señalado la sostenibilidad del nuevo Puerto Olímpico. Destaca la instalación de las cuatro pérgolas fotovoltaicas sobre la ubicación de los restaurantes que constituyen el conjunto fotovoltaico urbano más grande de la ciudad con 3.560 metros cuadrados de superficie total y que generarán 825.000 kWh/año, el equivalente al consumo medio de 360 viviendas, según el ayuntamiento.

Por otro lado, se han naturalizado parcialmente los 2.000 bloques de hormigón que protegen el dique de Recer y se han sumergido 50 biótopos submarinos para favorecer la presencia de flora y fauna marina.

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