Las imágenes de peleas y codazos para entrar primero a las tiendas en el inicio de las rebajas son cada vez menos habituales. La liberalización de los descuentos -hace tres años en Catalunya y desde 2012 en el resto del Estado- ha desdibujado cada vez más un calendario que antes era muy claro: después de Navidad, rebajas; al inicio del verano, rebajas. Ahora, "están distorsionadas", según el presidente de PimecComerç, Àlex Goñi. Las promociones son continuas, una situación a la que los pequeños comerciantes aseguran que se ha llegado debido al comercio electrónico y a la importación de fechas como el Black Friday. Aún así, las ventas durante el tradicional periodo de rebajas de enero continúan subiendo. Según datos de la patronal del pequeño comercio, el año pasado la facturación aumentó un 0,8%. De cara a este año, la asociación de las empresas familiares de retailde Catalunya Comertia prevé una mejora de las ventas del 3% en comparación a la campaña de rebajas de 2018.
Para Goñi, estas cifras distan mucho de lo que era habitual: asegura que en los años previos a la liberalización sus asociados incrementaban entre un 4% y un 5% la facturación. El presidente de Comertia, German Cid, coincide en el diagnóstico, pero se muestra más positivo: "Nuestros asociados son moderadamente optimistas después de la campaña de Navidad, que ha dejado un incremento del 2% de las ventas en comparación al año pasado". Califica el momento por el que pasan los descuentos como un "estancamiento positivo" en vez de un "decrecimiento".
"La temporada de rebajas es todo el año ahora", afirmaGoñi; "la gente está todo el año de rebajas", indica Cid. Cuando los periodos de descuentos estaban regulados, las rebajas de enero duraban hasta dos o tres meses; ahora, sólo son una o dos semanas, según Goñi. La Confederación Española de Comercio apunta los dos mismos factores que han provocado esta situación y prevén un incremento de las ventas del 2% durante la campaña de rebajas de invierno. De todos modos, Goñi admite que antes la campaña de Navidad y las rebajas de enero representaban un 30% de las ventas anuales y que ahora, a pesar de moderarse la facturación durante las rebajas de enero, si se incluye el Black Friday en la ecuación se mantiene este 30%.
"Esto del Black Friday empieza a ser preocupante", opina Goñi. Mientras que en Estados Unidos, de donde proviene el fenómeno, es una noche de ofertas salvajes, la adaptación en el Estado español se ha hecho diferente y, entre ese día y el Cyber Monday, "las rebajas previas a Navidad duran dos semanas", se queja el presidente de Pimec Comerç. Según el observatorio de la patronal, este año un 56% de los asociados no se adherirán al Black Friday. En cuanto al comercio online, Cid considera que ha permitido una "visualización constante de los precios", puesto que el consumidor sabe en todo momento dónde encontrar el producto con el coste más bajo. Esto en vez de afectar a las ventas, "castiga los márgenes" de beneficio de los comerciantes.
El comercio electrónico y el Black Friday han llevado a una tendencia de promociones continuas
Pero las pequeñas empresas se han añadido a esta tendencia. "En internet ves que anuncian un descuento del 80%, pero no es real; en las tiendas físicas, tenemos inspecciones que comprueban los precios antes y durante las rebajas e indicamos las promociones tal como son, sin hinchar los precios", se queja el presidente de Comertia. Ante los gigantes online, sin embargo, Cid ve una rendija de luz para los pequeños comerciantes: "El consumidor empieza a ver que es insostenible vivir sólo del ecommerce: el impacto medioambiental es mucho más alto".
Más gasto y ocupación temporal
Pese a la era del descuento constante, los periodos de rebajas como tal -o una versión reducida- continúan existiendo. Este año, algunos comercios han empezado las rebajas antes de Reyes, mientras que otros han decidido esperar que pasen los regalos y aprovechar que es un día no lectivo en las escuelas. Según un estudio de la fintech Bnext, cada español se gastará unos 206 euros en las rebajas de invierno. La cifra es más del triple del gasto registrado el año pasado en el mismo periodo, que según la compañía fue de unos 63 euros.
Los catalanes comprarán un 43% más que la media estatal, según el mismo informe, con una previsión de unos 295 euros por persona. Pero los habitantes de las comunidades autónomas que más dinero invertirán serán los de Navarra y La Rioja, con unos 306 euros. Por sectores, la moda, los viajes y la tecnología serán los más demandados. Las ofertas en ocio, belleza, deportes y comida a domicilio también tendrán una amplia aceptación, según el mismo estudio.
En cuanto a los puestos de trabajo que generará la temporada de rebajas, la situación será muy diferente entre las grandes y las pequeñas empresas. El presidente de Pimec Comerç recuerda que son las multinacionales las que amplían plantilla estas semanas, pero que a la vez representan la minoría del tejido comercial: "Un 85% son tiendas pequeñas y la media en cada una es de 1,5 trabajadores". Hace años, era diferente: "Las pequeñas empresas también contrataban a nuevos trabajadores y, entre Navidad y rebajas, tenían trabajo durante tres meses".
Los pequeños comerciantes prevén mejor campaña que el año pasado: un 3% más de ventas, según Comertia
Como la llegada del Black Friday ha supuesto una "redistribución" de las ventas, el volumen de trabajo también se ha repartido más y ya no es necesario fichar más empleados en los pequeños comercios. Según un estudio de Adecco, la contratación de personal para hacer frente al aumento de consumidores que acudirán a las tiendas crecerá. Los dependientes y dependientas no serán el único perfil profesional solicitado, sino que las empresas de logística y transporte también se tendrán que reforzar de cara a absorber el incremento de la demanda de repartos propia de esta época. Catalunya será la comunidad autónoma que más contratos nuevos generará, según el informe.
En concreto, la consultora de recursos humanos prevé que se contrate a unas 23.820 personas, cifra que representa un 7,9% más que durante las rebajas de invierno del año pasado. El gran consumo es el sector que más trabajadores temporales incorporará, seguido de la distribución, el retail y la logística y el transporte. "Esta campaña de rebajas será una continuación de la tendencia experimentada durante el periodo del Black Friday y Navidad", considera el director de Adecco Retail-Distribución, Jose Antonio Fernández-Freire.
Por provincias, Barcelona concentrará la mayor parte de contrataciones del conjunto del Estado y el mayor aumento, según los cálculos de Adecco. Serán 19.195, un 10% más que en enero de 2019. Tarragona ocupa la segunda posición, con 2.213 contratos; Girona, la tercera con 1.861; y Lleida será la cuarta con 550. Todas se mantienen estables respecto al año pasado. En el conjunto del Estado, la consultora prevé un incremento del 5,6% de nuevos puestos de trabajo, que llegarán a los 124.860.
Mover el Black Friday a enero
Las rebajas no han desaparecido, sólo se han redistribuido. La mayor variedad de opciones que tiene ahora el cliente para acceder a promociones y descuentos, sin embargo, tiene descolocado al pequeño comercio, que no siempre se puede adaptar a la realidad de las grandes empresas. "No nos compensa nada hacer grandes descuentos antes de las compras de Navidad", indica Goñi, que ve como posible solución "coger el Black Friday y moverlo a finales de enero". Esto dotaría de "coherencia" a toda la temporada de rebajas, considera.
Tanto desde Pimec Comercç como desde Comertia ven una solución a una situación que no quieren calificar de negativa, pero tampoco les satisface: regulación. De este modo, quizás habría un inicio de rebajas unificado y volverían las colas.