Colegios y asociaciones de profesionales del ámbito tributario han alertado de que la reformafiscal anunciada por el Govern puede generar deslocalizaciones de empresas y personas. En un comunicado, la Asociación Española de Asesores Fiscales, la Asociación Profesional de Técnicos Tributarios de Catalunya y Balears, el Colegio de Economistas de Catalunya y el Colegio de la Abogacía de Barcelona han afirmado que el aumento de ciertos impuestos para las rentas más altas es "contraproducente" y "resta competitividad" en Catalunya con respecto a otros territorios.
Estos profesionales critican especialmente las modificaciones en el IRPF y en las sucesiones y donaciones, y afirman que la reforma tributaria prevista aumenta "todavía más" la presión impositiva que soportan los catalanes "y ensancha la ya importante diferencia frente a territorios de más baja tributación, como puede ser la Comunidad de Madrid u otros países europeos".
Una deslocalización de ciudadanos y empresas puede "producir un efecto perjudicial para el país de pérdida de puestos de trabajo y de riqueza". La presión impositiva sobre los directivos, además, "también puede arrastrar a sus empresas".
Los profesionales han puesto como ejemplo que un empleado residente en Catalunya con una renta superior a 90.000 euros anuales, tributará por su IRPF a un tipo impositivo marginal del 46% por la suma de la tarifa estatal (22,5%) y la catalana (23,5%), mientras que en Madrid tributaría un 43,5% (22,5% más 21%). También tendría que pagar el impuesto de patrimonio si acumula bienes y derechos por un valor no exento de más de 500.000 euros, "un impuesto que en Madrid no pagaría". Por último, ha añadido que en caso de que muriera y dejara como herederos a sus hijos, éstos tendrían que hacer frente al impuesto de sucesiones, "que en Madrid y otros países europeos tampoco pagarían".
Por todo esto, los colegios y las asociaciones han remarcado que la fiscalidad "es uno de los factores principales que puede generar la deslocalización hacia otros territorios y es causante directo de una decisión empresarial que bien puede generar la inversión en un territorio atractivo como es Catalunya y la creación de puestos de trabajo, o por el contrario, la pérdida de estas inversiones y un grave perjuicio para la sociedad". Han reclamado "evitar seguir ensanchando, todavía más, los diferenciales impositivos que sólo favorezcan a otros territorios y no a Catalunya".