Rusia se enfrenta a una situación de impagos por primera vez desde la Revolución Soviética. Según el portal económico norteamericano Bloomberg, el periode de gracia del pago de unos 94 millones de euros en intereses de deuda en divisa extranjera expiró el pasado domingo. El Kremlin empieza a notar, así, los efectos sobre las arcas públicas de las sanciones impuestas por los Estados Unidos y la Unión Europea como correctivo por la invasión y la guerraen Ucrania.
El país no llegaba tarde a un pago relacionado con su deuda en divisas internacionales desde el año 1918, cuando la recientemente establecida República Socialista Federativa Soviética de Rusia -todavía a cuatro años de la unificación de la URSS- rechazó el pasivo con las potencias extranjeras contraído por el gobierno zarista, que, según estimaciones recientes, podría haber llegado al equivalente de un billón de dólares actuales.
La quiebra, pero, todavía queda lejos. El efecto de las sanciones ha supuesto el atraso de un pago que, según las fuentes consultadas por el portal neoyorquino, llegará. La principal fuente de ingresos de la Federación Rusa es todavía la venta de combustibles fósiles a diferentes países, principalmente de la Unión Europea. Las operaciones centradas alrededor del gas y el petróleo todavía reportan una facturación próxima a los mil millones de euros semanales al país gobernado por VladimirPutin.