La tasa de actividad de los extranjeros que residen en España es del 78%, una de las más elevadas de la Unión Europea, superando a países como Alemania (73%), Italia (71%) o Francia (70%), según el último informe del Banco de España sobre flujos migratorios. A diferencia de lo que ocurre en otros países, la tasa de participación de los extranjeros en el mercado laboral español —y también en el italiano— es más alta que la de los trabajadores autóctonos. En los últimos años, España se ha convertido en uno de los países europeos con más flujos de entrada de migrantes en relación con su población.
El Banco de España recuerda en su informe que la contribución de los extranjeros al dinamismo del empleo ha sido muy importante en varios países europeos, especialmente en España, donde los trabajadores nacidos en el extranjero aportaron 2,3 puntos al incremento total del empleo registrado en 2023, en comparación con 1,3 puntos en los Países Bajos y 1 punto en Alemania.
En los últimos años, España se ha convertido en uno de los países europeos con más flujos de entrada de migrantes en relación con su población
Por otro lado, el estudio recoge las características de los extranjeros residentes. Según los últimos datos de 2022, el nivel medio de educación de los extranjeros que llegaron a España era más elevado que el de los que llegaron a Alemania e Italia. Los que tenían un nivel alto —estudios terciarios— representaban un 43% en España, un 38% en Alemania y solo un 15% en Italia, mientras que los de bajo nivel educativo suponían un 30% de las entradas en España, menos que en Alemania (37%) e Italia (50%).
Un 50% de trabajadores extranjeros sobrequalificados
En este sentido, en 2022 España era, junto con Italia, el país con una proporción más grande de trabajadores extranjeros sobrecalificados (50%), mientras que en Alemania y Francia este porcentaje se situaba alrededor del 30%.
En general, los trabajadores extranjeros suelen concentrarse en actividades que no requieren una formación elevada, como el servicio doméstico o la hostelería, aunque desde 2008 ha habido "indicios de cierto desplazamiento a sectores de mayor cualificación", como las comunicaciones, donde han pasado del 2% al 12%, las manufacturas, donde el incremento ha sido del 5% al 11% o el comercio donde han pasado del 12% al 17%. También se han detectado incrementos en sanidad y servicios sociales (del 1,6% al 3,3%), mientras que ha disminuido el total de ocupados en el servicio doméstico (del 22% al 9%) y la hostelería (del 13% al 8%).
Los migrantes proceden principalmente de Latinoamérica
En España, los migrantes proceden principalmente de Latinoamérica y constituyen un colectivo más homogéneo y culturalmente más próximo al país de destino que los que se dirigen a otros países europeos. En general, tienen más edad y nivel educativo, y hay una mayor presencia de mujeres. Por el contrario, los que provienen de la UE, África y Asia han perdido relevancia en el conjunto de entradas en España entre 2008 y los años prepandemia.
El nivel medio de educación de los extranjeros que llegaron a España era más elevado que el de los que llegaron a Alemania e Italia
En otros países con un alto porcentaje de migrantes provenientes de fuera de la UE, como Italia o Suecia, el origen es más diverso y con menos proximidad cultural y de idioma entre países de origen y de destino. Así, durante los años prepandemia, un 25% de los migrantes que llegaron a Italia procedían de África, un 18% de Asia, un 15% de América y un 15% de países europeos fuera de la UE.