
"Ha llegado el momento de que la Unión Europea (UE) se emancipe y comience a liderar su propio camino". Con el modelo rupturista que promete la administración de Donald Trump, el matrimonio Estados Unidos-UE ha devenido en divorcio. O, al menos, así lo ha interpretado Jordi Martí, economista y profesor de la Universitat de Barcelona (UB). Lo ha hecho durante la conferencia Europa… Economía y Fiscalidad, el primero de los seis foros que ha organizado para 2025 Cornellà Creació en el Auditorio de Cornellà de Llobregat. Martí ha protagonizado un cara a cara con otro referente, Santiago Castellà, presidente de la Autoridad Portuaria de Tarragona, quien le ha dado la razón e incluso ha comparado el tablero geopolítico actual con una situación más cotidiana: "Putin y Trump nos han invitado a una gran barbacoa y tenemos que decirles que nos da la gana ser vegetarianos", ha afirmado. Y ha ido más allá: "No solo es tan respetable como cualquier opción, sino que, además, los que comen carne humana no son respetables", ha agregado. Todo ello, una metáfora del cambio de rumbo a aplicar ante sus políticas proteccionistas.
Ahora bien, el punto de partida no es el ideal. "Hemos perdido mucho tiempo y oportunidades. Llegamos a una guerra comercial donde detrás se esconde un conflicto de valores y nos coge con los deberes por hacer", ha lamentado Castellà. En este sentido, no ayuda la falta de consenso entre los países que forman la UE. Ambos ponentes han señalado el hecho de que "Europa sea tan pequeña que cabría en China, Estados Unidos o Brasil", pero a la vez esté fragmentada en diferentes discursos. A pesar de ello, hay un gran rasgo diferenciador común: el compromiso con los "derechos humanos" y "el humanismo", además del estado del bienestar.
Martí: "Hemos dejado que EE. UU. avance en investigación básica, mientras que Europa se ha quedado en la aplicada"
De acuerdo con Castellà, llegamos tarde en aspectos como la "productividad, transición ecológica, descarbonización, Internet de las Cosas (IoT) o, incluso, la IA". Pero, ¿qué ha fallado para que la UE se haya quedado atrás? "Hemos dejado que EE. UU. avance en investigación básica, mientras que Europa se ha quedado en la aplicada", ha explicado Martí. Esto significa que en el país norteamericano se han facilitado investigaciones "sin tener en cuenta para qué servirán", un hecho que no se ha producido en el Viejo Continente. El resultado se puede ver, por ejemplo, con la IA. "Comenzaron probando cosas que no sabían si les llevaría a generar textos o imágenes", ha insistido el profesor.
¿La buena noticia? Que la IA se encuentra en una fase "incipiente" y que aún hay margen para ser relevantes en IA productiva. "Tenemos una sociedad muy bien formada e informada, además de universidades de larguísima tradición, hay que sacar provecho y valor añadido", ha asegurado Martí. Por su parte, Castellà ha planteado que nos encontramos en una "encrucijada" a la que también hemos llegado con retraso. "Podemos ser los últimos humanistas ilustrados o bien los primeros que traslademos estos valores a una sociedad digital en la que todas las reglas han cambiado", ha cuestionado.
Informe Draghi: pros y contras
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Así pues, Europa debe ponerse manos a la obra. La hoja de ruta ya existe: el conocido Informe Draghi, que sirve al mismo tiempo como radiografía y remedio de nuestro statu quo. "Se ha perdido la cultura del esfuerzo, ha aumentado el absentismo y tenemos un exceso absurdo de burocratismo y una falta de agilidad a la hora de tomar decisiones", ha remarcado Castellà. El presidente del Port de Tarragona ha añadido que necesitamos "más unidad" y "trabajar más", una afirmación que ha aplaudido Martí: "Europa debe defender un pacto único a ultranza".
A pesar de ello, el profesor ha expresado divergencias con el informe Draghi. "Sabemos hacer más cosas de las que recoge", ha defendido. En concreto, considera que se equivoca en un diagnóstico, ya que "solo habla de producción, pero debería decirnos cómo vender lo que producimos". Dicho de otra manera, Martí sostiene que no tenemos un problema de productividad, sino de competitividad. "Si nuestras fábricas de automóviles venden los coches más baratos, nuestra productividad siempre será baja", ha criticado.
Castellà: "Me ha sorprendido cómo toda la logística naviera puede ser un instrumento de política exterior importantísimo. Aquí hay muchos elementos así que no utilizamos"
La automoción no ha sido el único ejemplo que ha presentado el economista. También se ha referido a la gestión del agua por parte de España y Catalunya. "Somos un país exportador de agua y tenemos unas sequías brutales", ha manifestado, citando la fruta o la carne como alimentos que contienen agua y no se han sabido aprovechar. En esta línea, Martí también ha recordado el aceite de oliva, el cual aumentó considerablemente su precio durante la inflación, sin generar ningún retorno. "Si lo hubiéramos vendido como se hace con los fármacos, el valor añadido habría sido mucho mayor. Saber vender es lo que genera el valor añadido", ha reflexionado.
Esta exposición ha dado pie a un segundo punto de vista: las ciudades inteligentes del futuro. Martí considera que Europa "las debe liderar", mientras que Castellà ha pedido "ponerse las pilas en el ámbito local, porque eso permitirá construir a escala europea". Y ha citado un caso de su mismo gremio: "Me ha sorprendido cómo toda la logística naviera puede ser un instrumento de política exterior importantísimo. Aquí hay muchos elementos así que no utilizamos".
El papel de Catalunya y España
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Queda claro que la UE debe aprender a competir para poder subsistir. Así lo constata el retrato geopolítico que ha trazado Trump, donde parece que cuentan más Putin y Xi Jinping que Ursula von der Leyen. Pero, ¿cuál debe ser la postura del estado español y de Catalunya ante este panorama? "El papel de España no se entiende sin Europa, debemos ir de la mano o nos quedaremos desdibujados", ha sentenciado Castellà.
En un momento en que países como Francia y Alemania están en horas bajas, el impulso de los Next Generation ha situado a la economía española como una de las punteras en Europa. Ahora bien, las tasas de Trump representan una amenaza a nuestra apuesta por la reindustrialización. "El aumento de los aranceles al hierro y el acero nos puede perjudicar muchísimo", ha avisado Castellà. Para evitar este impacto, Martí ha llamado a "liderar el futuro de Europa" desde las empresas españolas y aprovechar la "situación ventajosa" que nos ofrece la geografía: "Son los empresarios españoles los que deben liderar la relación con África. No puede ser que 15 kilómetros de mar nos separen tanto; las relaciones con Argelia, Marruecos y América deben mejorar".
En cuanto a la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales, el profesor se ha mostrado a favor. "Es evidente que la necesitamos, somos un país con un problema demográfico, pero con una gran capacidad productiva", ha reiterado, en referencia a sus declaraciones sobre el informe Draghi.
Martí se ha mostrado a favor de la reducción de la jornada laboral, mientras que Castellà ha señalado las desigualdades en el impacto según el tamaño de las empresas
En este punto, Castellà ha denunciado las desigualdades existentes en el tejido empresarial estatal. "Hay un tipo de compañía productiva y de un tamaño más pequeño que asume unos costes mucho más elevados que una gran empresa con actividades muy especulativas y que tiene un margen de beneficio sobre sus ganancias muy elevado", ha protestado. Una problemática que ha hecho extensible a toda Europa y que obliga, de nuevo, a "reformularse" comunitariamente. "La fiesta la pagamos entre todos, pero tengo la sensación de que algunos siempre pagan menos", ha culminado. Ha sido la enésima advertencia sobre los fantasmas que planean sobre Europa y que deben ser atacados lo antes posible.