Esta semana hemos sabido que una parte de la agonizada Enciclopèdia Catalana revivirá dentro de un nuevo grupo empresarial que estará participada por Abacus y por el empresario de la comunicación Jaume Roures Llop, gracias al acuerdo que permitirá el rescate de los sellos editoriales amenazados por la crisis de Enciclopèdia. La marca más conocida de la cartera editorial del grupo es La Galera, que en su nómina ha tenido autores como Pilarín Bayés o el superventas Joaquim Carbó (La casa sota la sorra, más de 60 ediciones). En cuanto a los compradores, por un lado, hay la cooperativa Abacus, fortalecida desde el año pasado por la fusión con SOM, otra de las cooperativas relevantes del panorama cultural catalán. El grupo SOM (antiguo Cultura 03) lo encabezaba Oriol Soler Castanys, ahora primer ejecutivo de Abacus después de la integración de las dos.
Por otro lado, hay Roures, que hace muy poco ha dejado de formar parte de la ejecutiva de la compañía audiovisual Mediapro. Producto de la salida, Jaume Roures anunció que también vendería las acciones que todavía poseía de la firma. En la actualidad, la principal actividad de Enciclopèdia Catalana era precisamente la editorial a través de los sellos que hemos mencionado. En el último ejercicio cerrado, la facturación superó los 10 millones de euros, pero no consiguieron salir de las pérdidas. En los órganos ejecutivos encontramos a Xavier Cambra Vergés (exdirectivo del Barça), Carles Sumarroca Claverol (empresario e hijo del fundador de EMTE) y Josep Lluís Vilaseca Requena (hijo de Josep Lluís Vilaseca Guasch, personaje clave en el deporte y la cultura del país). En los cargos relevantes de la firma también encontramos a Joan Abellà Barril, la persona que ha estado detrás de una crisis que ha contribuido también al hundimiento definitivo de Enciclopèdia Catalana. El caso es que Abellà lideró la creación de la distribuidora Entredos a partir de la fusión de Ágora (firma vinculada a Enciclopèdia) con la firma Les Punxes que acabó resultando un ruidoso fracaso, con muchos daños colaterales.
Pero por encima de esta empresa llamada Enciclopèdia Catalana SLU, todavía hay un nivel más, porque todas las acciones de la sociedad están en manos de la Fundació Enciclopèdia Catalana. Los miembros del patronato son las tres personas mencionadas en los órganos de gobierno de la sociedad filial (Cambra, Sumarroca y Vilaseca) y también hay un grupo de patrones donde aparecen nombres como los de la exconsejera Irene Rigau Oliver o el del profesor de Esade Àngel Castiñeira Fernández.
La crisis de Enciclopèdia Catalana, que ahora parece ya la definitiva, puede ser el momento adecuado para recordar lo que ha sido esta entidad para la cultura catalana a lo largo de un buen puñado de décadas. La llegada al mundo de esta iniciativa se produjo a mediados de la década de los sesenta, en pleno franquismo, cuando Max Emmanuel Cahner Garcia (1936-2013) se puso de acuerdo con Enric Lluch Martin (1928-2012) y otros activistas para sacar adelante un producto referente de la cultura catalana, como era una gran enciclopedia por fascículos. El primero de ellos fue un personaje muy importante de la política catalana y que procedía de una familia judía huida de las persecuciones en Europa y que habían hecho fortuna con un negocio de pinturas. Inicialmente, la enciclopedia nació integrada dentro de Edicions 62, el sello que había fundado en 1961 precisamente Cahner, pero años más tarde los destinos de las dos entidades se separaron y hoy Edicions 62 pertenece al grupo Planeta.
Las décadas de los ochenta y de los noventa fueron de crecimiento para Enciclopèdia
El primer director de la obra fue Jordi Carbonell i de Ballester (1924-2016), un activista por la causa catalana de largo recorrido, que acabó ocupando el cargo de presidente de Esquerra Republicana de Catalunya entre el 1996 y el 2004. En medio de una crisis financiera, los acreedores (básicamente la Banca Catalana de Jordi Pujol) tomaron el control del negocio y poco después, en 1969, quien lideró el proyecto fue el erudito Joan Carreras Martí (1935-2018), un especialista en lenguas semíticas que procedía de Larousse y que fue presidente de Òmnium entre 1984 y 1986. Era miembro de una familia singular, entre los cuales hay la rama de los Gimferrer, empresarios de Banyoles enriquecidos con la fabricación de sacos de yute. También era el padre del novelista Joan Carreras Goicoechea, premio Sant Jordi de novela en 2014, con L'àguila negra.
Las décadas de los ochenta y de los noventa fueron de crecimiento para Enciclopèdia, con la compra del sello La Galera (especializado en literatura infantil y juvenil) y la adquisición de la histórica Proa, una editorial que había sido financiada, en el exilio, por el millonario y filántropo Joan Baptista Cendrós. A partir de los noventa se vivió también la digitalización del negocio, que hoy en día ofrece recursos muy útiles en internet. Una vez Enciclopèdia Catalana se vea vacía de sus principales activos (los sellos editoriales que pasan a manos de Abacus y Roures), hay que ver qué sucederá con la marca y con la fundación que rige sus destinos.