Wally, el norte y el sur

Un paseo por el mundo; las guerras, el cambio climático y la pandemia llenan nuestro día a día

Wally cruza el mundo entero; a cada puerto, una historia diferente | iStock
Wally cruza el mundo entero; a cada puerto, una historia diferente | iStock
Barcelona
27 de Mayo de 2021

Ensartó mal el estrechado de Gibraltar adentrándose en la Mediterránea. Ha atravesado los océanos, haciendo miles de kilómetros desde el Pacífico Norte, de la costa oeste americana, hasta aquí. Despistada o aventurera, vete tú a saber, la joven ballena gris, Wally, de ocho metros de largo, fuera de su habitad, no encuentra comida suficiente para nutrir su voluminoso cuerpo. Acostumbrada a los abundosos alimentos en aguas frías y abismales, las aguas calientes y poco profundas de la Mediterránea la están dejando cada día más magra.

 

Probablemente el cetáceo atravesaba el estrecho cuando el rey de Marruecos empujaba su ejército de niños y jóvenes famélicos a invadir Ceuta y crear uno de los conflictos más importantes de los últimos años en la frontera sur de la Unión Europea. Mohamed VI, rey multimillonario de un país de economía en desarrollo, quiere dos cosas a la vez. La primera, mayor protagonismo en el África, jugando en la geopolítica mundial. La segunda, más dinero de Europa. Estados Unidos está dispuesto a darle una oportunidad pan-africana, mientras que la Unión Europea solo negociará con él si frena la emigración en la frontera y acepta admitir sus nacionales que llegan ilegalmente.

De hecho, aspira a recibir gran parte de los 90.000 millones de euros a través del Instrumento de Vecindad, Desarrollo y Cooperación (VDCI), que los países norteños de África están negociando para el periodo 2021-2027. Adicionalmente querría más recursos económicos, aparte de los que recibe habitualmente de España, una partida de los cuales ha sido entregada estos días del conflicto. Despistado o aventurero, el rey de Marruecos, ensarta su estrecho de Gibraltar particular hacia Ceuta y habrá que ver si alguien le ayuda, como la ballena Wally, a salir del mediterráneo. De todos modos, no sé si este vecino es de fiar.

 

¿Qué fue primero el huevo o la gallina?

No hay constancia, pero en su periplo por la Mediterránea, Wally podría haber llegado a Palestina, concretamente a Gaza. Es una zona costera, con dunas, una cierta aridez, pero con unas playas mediterráneas que harían tilín si no fuera por lo que se ve una vez entras en el interior del territorio. Hay la mayor densidad de población y pobreza de la tierra, un guetto, el rincón más triste del mundo, un campo de refugiados en todo el territorio. Si la ballena gris hubiera llegado a Gaza, seguro que habría huido despavorida cuando sintió los misiles tirados por el ejercido israelí. Netanyahu, el primer ministro de aquel país, dice que atacó porque los palestinos, en concreto Hamás, iniciaron los ataques contra la población israelí. ¿Qué fue primero el huevo o la gallina?

La mayor provocación es que después de decenas de años, desde 1937, antes de que se constituyera el estado de Israel, las Naciones Unidas han reclamado la constitución de dos Estados, el israelí y el palestino. Cada día que pasa se aleja esta solución, mientras de facto o deiure los israelíes amplían sus fronteras y expulsan al exterior los palestinos. Netanyahu, despistado o aventurero, sigue protegido por los grandes de la tierra, recibiendo decenas de millones de dólares anuales por su presupuesto en defensa y por su sostenimiento en la zona por parte de los norteamericanos.

Wally se ha topado con jóvenes, niños y mayores con mascarillas, con ojos de pandemia y miedo a la muerte

En su viaje hacia la nada, Wally se ha topado con jóvenes, niños y mayores con mascarillas, con ojos de pandemia y miedo a la muerte. Ha acabado sabiendo que ella misma podría ser portadora del virus y rechazada en cualquier mar. No ha sufrido escenas de rechazo, pero mientras busca desesperadamente comer en cantidad, no está convencida. Catorce meses después de iniciarse la pandemia, cuando parece que se producen los primeros síntomas de desconfinamiento, ahora nos damos cuenta que cuándo lleguemos a la inmunidad de rebaño en el primer mundo, en el África habrán vacunado solo el 3% de la población; en la India y en otros países africanos, asiáticos y latinoamericanos el porcentaje será muy parecido. ¿En estas condiciones en las que dos terceras partes del planeta no estarán vacunados, tiene razón de ser hablar de la inmunidad a Occidente?

El FMI ha calculado que para acabar de vacunar a todas las personas del planeta se requieren unos 40.000 millones de euros. Verdaderamente se trata de una minucia en relación con las cantidades que se manejan estos meses en los países ricos y en los organismos internacionales. Si comparamos magnitudes, la Unión Europea aportará en España unos 120.000 millones de euros, de un total de 750.000 millones que verterá entre todos los estados de la Unión. Estados Unidos ya ha empezado a repartir los seis billones de dólares en estímulos fiscales para reducir el impacto de la pandemia y relanzar su economía. ¿Qué son dentro de este mareo de cifras, los 40.000 millones de euros de aquí a 2022? No acabamos de concebir que si no se vacuna toda la población, peligra nuestro desconfinamiento. No solo la salud, sino también la recuperación económica; el mismo FMI dice que los beneficios económicos de "la operación vacuna" aportarían a la economía mundial unos 7 billones de euros.

¿Despistados o aventureros, nuestros representantes y nosotros mismos? Norte y sur, Mediterránea y Pacífico, todo está en el mismo meridiano.