Un cuaderno rojo ha acompañado al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, en su participación este martes en el Cercle d'Economia en Barcelona. Es el documento que recoge la Estrategia Valenciana de Recuperación y que Puig ha dejado junto a Javier Faus, presidente del Cercle Según ha explicado, sigue la 'vía valenciana' que está plasmando en su gestión política, un cóctel concreto porque, ha dicho Puig, "mientras otros territorios han hecho de la fractura la respuesta al virus, en la Comunidad Valenciana ha imperado el trellat valenciano, la serenidad, la estabilidad y la confianza".
Puig ha hecho enseña de la estabilidad política valenciana frente al clima crispado otros territorios: "Basta de confrontación, apostamos por la confianza, por la mirada a largo plazo (...) Cómo dice Anton Costas -presente en la jornada- ahora toca recuperar y reinventar. Serenidad, cooperación...", ha explicado. "Es hora de los ingenieros de puentes, no de los técnicos de demolición", añade.
En esta etapa que se divisa, el presidente Puig ha destacado que "necesitamos un trato que de estabilidad a los mayores pero también un pacto social para los jóvenes atrapados entre dos crisis". Además, sabedor del auditorio al cual se presentaba, el socialista ha reconocido que son "las empresas las que crean trabajo, no hagamos trampas al solitario diciendo otra cosa. Acompañarlas es una prioridad en la vía valenciana", ha defendido abiertamente.
La cuestión catalano-valenciana
Haciendo uso de la retórica, Puig ha establecido su discurso como un trayecto ferroviario con tres paradas; la vía valenciana, su defensa de la gestión de la crisis del coronavirus y del futuro; la Commonwealth mediterránea y la España de Españas, entrando ya en un terreno menos económico y más político. Así pues, Puig se ha adentrado en la que ha denominado "la cuestión bilateral catalano-valenciana" para matener que "nadie puede defender sus intereses en Europa de manera individual, nadie, aunque sus élites continúen pensándolo".
"El trellat valenciano necesita el seny catalán", ha afirmado el presidente autonómico valenciano, después de enumerar las cifras que demuestran la buena relación económica entre ambos territorios, como es el hecho que Catalunya es el principal cliente valenciano porque "sólo hay dos territorios donde compramos más que aquí, en China y en Inglaterra".
Ximo Puig defiende que "sólo hay dos territorios donde compramos más que aquí, en China y en Inglaterra"
¿Puentes en común? Muchos. Y uno de ellos, la apuesta por la descentralización, de la cual Puig se ha manifestado militante. "Es el momento de la España macrocefálica, es inaplazable acabar con el efecto que convierte a Madrid en una gran aspiradora de redes de influencia, de recursos, de funcionarios...", opina Puig. El presidente ha hecho alusión al estudio encargado este 2020 al Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE), Madrid: capitalidad, economía del conocimiento y competencia fiscal, que muestra como el sector público estatal y el gobierno de la Comunidad de Madrid contribuyen con sus políticas a dar continuidad al proceso de concentración de poder y recursos en la capital. En este sentido, Puig ha hablado de redistribuir los centros de decisión. "Puertos del Estado, ¿por qué no...?", ha dejado caer, como una especie de idea en esbozo y ha criticado que "ejercer el dumping fiscal y además presumir, es ciertamente insultante".
El Corredor como ejemplo de colaboración
Puig, firme defensor de la España federalista- ha puesto como ejemplo de proyecto de interés común y vertebrador el Corredor Mediterráneo: "La vía valenciana propone tejer alianzas y si hay que hablar de un proyecto en común, tenemos que hablar del Corredor Mediterráneo, con el apoyo de la sociedad civil y con Josep Vicent Boira como firme defensor".
Y una anécdota para concluir: "En 1930, ante la posible llegada de un tren de ancho internacional a Barcelona, que finalmente no llegó, una delegación del Ayuntamiento de Valencia viajó a Barcelona para hacer presión conjunta... De esto ya hace noventa años... y todavía nos cuesta tanto llegar en ese tren...".