Estos últimos días de compras navideñas ha surgido una polémica a las redes sociales arran un tuit del exportaveu de Ciutadans en el Parlamento de Cataluña, Jordi Cañas (@jordi_canyas), en que pedía a la firma Zara que rotulara en castellano en sus tiendas. Siguiendo esta demanda, nos preguntamos si en Cataluña, según la ley, hace falta que Zara rotule en catalán?
Y sí, las señalizaciones y los carteles y letreros de caracteres fijo tienen que figurar como mínimo en catalán, así como los letreros de precios de los productos. Así lo determinan la Ley de política lingüística y la Ley del Código de consumo. Hay varias disposiciones legales que obligan el uso del castellano a la rotulación (especialmente de maquinaria, indicaciones en empresas y estaciones de transporte, transporte marítimo, indicación de precios de algunos productos concretos...) pero no afectan la rotulación general de establecimientos como Zara.
Para @ZARA en Puerta de Ángel de @barcelona_cat los castellanoparlantes no necesitamos indicaciones comerciales, evitando rotular en uno de los idiomas oficiales en Cataluña. ¿Se una cuestión puntual o una norma en la empresa? Agradecería respuesta del CM de @ZARA . pic.twitter.com/wes1czpuoo
— Jordi Cañas (@jordi_canyas) 2 de enero de 2018
Es normal que se obligue a rotular en catalán?
Sí, es plenamente normal. En general, las lenguas de países de tradición democrática de dimensiones similares a la nuestra tienen esta misma obligación. Esto pasa por ejemplo por las diversas lenguas propias de Suiza, para el finés y el sueco en Finlandia, el francés en el Quebec, lituano, letón, estonià... Y por supuesto para el catalán en Andorra. Es más extraño en Estados con lenguas con muchos hablantes donde el uso ya está normalizado.
Aun así en países como Francia el francés también es obligatorio. En los territorios españoles de lengua propia castellana no está esta obligación, aunque España es uno de los países más impositivos lingüísticamente encima las empresas, con más de 300 disposiciones impositivas del castellano en varios ámbitos. Probablemente si en estos lugares hubieran muchos comercios que no tuvieran la rotulación en castellano, el Estado o las autonomías respectivas actuarían.
En general, Zara cumple esta obligación, salvo algunas señalizaciones como las de emergencia, que no siempre son como mínimo en catalán. También tiene en catalán los letreros de productos, el ticket de compra y la opción para el web. Aun así los usos orales de los dependientes y de la megafonía en general no son en catalán. En estos casos la ley no los obliga.
España es uno de los países más impositivos lingüísticamente encima las empresas
Aun así, los comercios tienen bastantes obligaciones lingüísticas de uso interno para el castellano, sobre todo en las relaciones con la Administración pública. En cuanto a las relaciones de consumo en relación con el cliente destacamos las obligaciones de uso del castellano en garantías de productos, contratos y etiquetado. En todos los casos cumple estas obligaciones.
Zara también tiene que poder atender los consumidores tanto cuando se dirigen en castellano como cuando se dirigen en catalán, sin necesidad que los correspondan con la lengua que se los han dirigido. Del mismo modo que está obligada para el castellano, Zara también está obligada a etiquetar los productos en catalán (informaciones obligatorias sobre componentes, seguridad, avisos...). En este aspecto, la totalidad de productos distribuidos en Cataluña se encuentran fuera de la normativa vigente.