Cada vez son más las empresas que en un intento de rebajar costes sin renunciar a la busca de talento, apuestan por la contratación de profesionales freelancers para salir adelante proyectos concretos o para hacer frente a sobrecargas de trabajo puntuales.
A pesar de que esta tendencia todavía no llega a niveles otros países como Holanda, donde desde el 2000 la cifra de empresas que recurren a este perfil de colaboradores se ha disparado un 94% -en España ha crecido un 50%-, las cifras revelan que el futuro de muchas compañías pasa por este sistema.
El mercado actual dibuja un panorama en que cada vez hay empresas más pequeñas, con un core business dedicado a la estrategia y la cadena de suministro, que externaliza el resto de departamentos. "La contratación de freelancers aporta eficiencia, permite reducir costes e incorpora un talento muy caro que quizás no podríamos pagar si tuviéramos que contratar en plantilla a aquella persona", explica Maite Moreno, CEO y fundadora de Monday Happy Monday, la primera empresa de gighunting del Estado.
Fuerza laboral expandida
Esta apuesta por los freelancers ha traído muchas compañías ha expandir su fuerza laboral, el que significa que su capacidad de trabajo se ha extendido más allá de las personas que están en plantilla, dejando de ser sólo el núcleo de esta.
En esta línea, Moreno asegura que es muy importante que la empresa desarrolle políticas de gestión de personas, acciones de formación para freelancers, jornadas de transmisión de la cultura de la empresa y también de acogida: "Es clave si quieres que este talento esté disponible por otro proyecto".
'Coworking' corporativo para 'freelancers'
Moreno aconseja crear espacios de coworking corporativos dentro de la propia empresa contribuye a captar talento y mantener viva la conexión con aquellos profesionales que ya han establecido algún tipo de vínculo con la empresa. "Se trata de crear un ecosistema capaz de atraer profesionales relacionados con el mismo negocio", explica Moreno que añade que si el talento ya está trabajando físicamente dentro de la empresa, será más fácil que la compañíapueda acceder en un determinado momento porque lo tiene a su alcance.
La dificultad de la selección
A pesar de los aspectos positivos, muchas empresas consideran que la busca del profesional idóneo es una tarea demasiado pesada. Si bien es cierto que actualmente existen varios canales para acceder en el talento freelancer, como los marketplaces, plataformas online donde se agrupan este tipo de trabajadores, también lo es que el procès puede llegar a ser muy complejo.
La empresa Monday Happy Moday se encarga de facilitar el trabajo a las compañías buscando el profesional que más se ajusta al perfil que necesitan. "Llevamos a cabo un proceso de selección que va más allá del currículum y se fija en otros aspectos como el propio portafoli, la reputación on-line o las referencias", apunta Moreno.
Los 'marketplace' de freelancers
Para hacerlo, esta start-up que nació a principios de 2014, tiene como partner lo marketplaceSwapsee, un espacio web donde da a conocer la oferta y de donde selecciona los posibles candidatos para después entrevistarlos vía Skype o en persona. "Aportamos un valor añadido a la negociación porque escogemos entre los mejores, los más económicos o que se ajustan más al objetivo que nos ha marcado la compañía", comenta Moreno.
La voz de la experiencia
Laura Pellisé, co-fundadora de la Fundación Bonobo que contrató los servicios de Monday Happy Monday para encontrar un fundraiser con experiencia, asegura que el apoyo de esta start-up fue clave para lograr sus objetivos. "Habíamos tratado de buscar este perfil varias veces pero encontrar fundraisers freelancers con experiencia no es nada fácil y más, si tienes limitaciones económicas, y por lo tanto, que estuvieran dispuestos a apostar en cierta forma, por nuestro proyecto", comenta Pellicè.
En este sentido advierte que Monday Happy Monday es una herramienta muy útil cuando se trata de empresas que no cuentan con un departamento de recursos humanos, ni con capacidad suficiente para contratar un headhunter o una compañía de colocación. Así, confirma que el resultado del trabajo fue muy positivo porque los presentaron varios candidatos "sorprendentemente ajustados al perfil" que estaban buscando.