• Emprendedores contra el cáncer

Emprendedores contra el cáncer

El 36% de la I+D del sector biomédico se destina a la oncología, un campo que busca la terapia definitiva para eliminar la enfermedad y que reclama nuevos servicios para atender las necesidades de los pacientes que la superan

Marie-Eve Beaulieu, Sílvia Casacuberta Serra, Laia Foradada Felip, Laura Soucek de Peptomyc | Cedida
Marie-Eve Beaulieu, Sílvia Casacuberta Serra, Laia Foradada Felip, Laura Soucek de Peptomyc | Cedida
Barcelona
19 de Octubre de 2017

Durante el 2016 se diagnosticó cáncer a unas 38.500 personas en Cataluña. De estas, la consejería de Salud estima que un 53% continuarán vivas de aquí a cinco años, el que es el resultado de un buen procedimiento de diagnóstico y tratamiento de la enfermedad, la cual ya se empieza a etiquetar como 'crónica' y no 'mortal'. Una gran noticia en este Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, el cual afecta cerca del 28% de las mujeres que sufren la patología.

Rosa Olmos es una de las mujeres que ha sufrido este cáncer, que ha sobrevivido –y lo está haciendo a su metástasis- y que se ha aferrado a la vida con más energía y vitalidad que nunca. Su respuesta a toda la experiencia ha sido hacerse emprendedora y crear el centro médico Vidaria, una clínica especializada en la atención a enfermos oncológicos.

A diferencia de quienes superan los cinco años de tratamiento, que reciben el alta, ella no dejó de tener revisiones periódicas. Así, un pequeño resfriado o un mal en una rodilla pasaba de ser atendido con una visita rápida al médico a un estudio exhaustivo de su estado. "El de cabecera siempre me derivaba a la oncòleg porque mi caso es diferente y yo sentía que iba a molestarlo por un simple resfriado, cuandohabía gente que necesita mucho más que yo su atención", explica a VÍA Emprendida. De aquí nace hace ahora tres años y medio el proyecto Vidaria.

En el centrotrabajan una decena de personas especialistas en varias áreas: medicina interna, integrativa, estética, nutrición, psicopedagogía, enfermería y fisioterapia, pero siempre con el factor común de tener conocimiento sobre la vinculación de su ámbito con la oncología para atender los casi 1.200 pacientes que han pasado por sus manos.

Olmos: "Somos pacientes que tenemos los problemas que tiene todo el mundo, pero que hay que enmarcarnos en el cáncer"

Precisamente es la cronificació de la enfermedad el que ha hecho que casos como el suyo sean cada vez más frecuentes. "Somos pacientes que tenemos los problemas que tiene todo el mundo, pero que hay que enmarcarnos en el cáncer porque hemos pasado por tratamientos muy duros y que tienen efectos secundarios", recuerda sobre una situación que no siempre se tiene en cuenta a la hora de poner remedio a males ligeros y habituales.

rosa olmos vidaria

Rosa Olmos a la clínica Vidaria | Cedida

La idea inicial de Olmos y del suyo otro fundador, José Maria Flores, fue centrarse en el periodo postcàncer, pero han crecido también "hacia el cáncer porque hay muchos pacientes que necesitan este servicio", afirma su impulsora, quien destaca que el hecho de haber vivido la patología ha ayudado a enfocar la estrategia y a detectar la carencia médica en el mercado.

Biomedicina volcada en el cáncer

A la banda contraria, la de la investigación, también se están destinando recursos y esfuerzos en la lucha contra el cáncer. Según el Estudio sobre la inversión en biomedicina en Cataluña elaborado por CataloniaBio y Ernst Young, un 36% de los recursos destinados a I+D en el sector son para la investigación oncológica.

En la lista de compañías que hacen su aportación, seencuentra GoodGut, una espín off de la Universitat de Girona y el Instituto de Investigación Biomédica de Girona. Su cofundadora y CEO, Mariona Serra, explica que se encuentran en plena "fase de desarrollo de una herramienta de criba por el cáncer colorectal".

Se trata de un test no invasivo para el diagnóstico precoz de la enfermedad que permite reducir el número de colonoscòpies que se producen con el sistema de criba actual –"prueba más invasiva y que tiene un cierto riesgo de muerto"-. "Este examen se hace a mayores de 50 años asimptomàtics, pero un 30% de los resultados son negativos, el que demuestra que es un proceso innecesario", comenta Serra, "además, una persona que sufre hemorroides, que tiene problemas digestivos o toma aspirina, puede dar positivo".

Equip de Goodgut | Cedida

Equipo de Goodgut | Cedida

Para detectar los afectados del que señala como el segundo cáncer con más mortalidad en el mundo, su propuesta es un análisis de las bacterias de las heces que aumenta la sensibilidad de la detección de la lesión precancerosa. Hasta el momento, se encuentran en fase de estudio clínico con varios hospitales de Cataluña y de Alemania y prevén salir al mercado el 2019. La ambición es dar una alternativa real de prevención del cáncer y a la necesidad de reducir el gasto en el diagnóstico de una enfermedad ya habitual y paliar la saturación que viven algunos centros con el alud de colonoscòpies preventivas.

En una fase similar se encuentra también Aniling, espín off del Instituto de Medicina Predictiva y Personalizada del Cáncer, pero con una propuesta de diagnóstico que tiene que servir para el sector médico en general. El suyo es un producto que quiere convertirse en "un nuevo estándar para el análisis genético a escala global, un método que analiza el genoma y el epigenoma de manera simultánea", apunta el CEO, Llorenç Coll.

Para crear el prototipo se han invertido cerca de 1,2 millones de euros, y a pesar de que puede ser una solución adaptable para cualquier tipo de patología, hoy por hoy se están focalizando en los tratamientos oncológicos. "La epigenética estudia la parte del ADN que es sensible al entorno, al estilo de vida y a cómo envejecemos", sintetiza, "el que combinado con la base genética quepuede haber en cualquier cáncer hará que se desarrolle antes o después o que sea más o menos grave".

Cuello: "La oncología epigenética puede llegar a generar hasta 10.000 millones de dólares en el mercado de aquí al 2025"

Con la propuesta de Aniling, se puede personalizar la terapia de cada persona, adaptándola a su patología y características. Además, Cuello añade que hay tratamientos epigenéticos con "muy potencial": "Se ha calculado que la oncología epigenética puede llegar a generar hasta 10.000 millones de dólares en el mercado de aquí al 2025". La causa? Nuevos fármacos y soluciones "menos agresivas que la quimioterapia" que, segundo el CEO, pueden llegar a "revertir determinadas mutaciones epigenéticas con más facilidad que no alteraciones genéticas".

Para Coll, que este ámbito médico reciba tanta inversión y propuestas de científicos, startups y espín offs es debido al amplio radio de afectación de la enfermedad. "Te puedes encontrar con un tumor en cualquier parte del cuerpo y cada tejido y órgano tiene que tener un tratamiento diferente. Seguramente por eso necesita tanta investigación y hay tantas nuevas propuestas de negocio cada año para sacar al mercado algún día una solución", concreta. La dificultad es llegar a un tratamiento eficaz y viable: "Porque una farmacéutica decida desarrollarlo, se tiene que pasar un proceso largo y costoso que realmente demuestre su eficiencia".

Aniling Foto Grup

Equipo de Aniling | Cedida

Laura Soucek comparte esta opinión, peroañade el hecho que cada vez se están encontrando más casos de resistencia a los tratamientos actuales y sin la posibilidad de tener una solución alternativa. Por eso a Peptomyc , espín off de Vall de Hebrón Instituto de Oncología e ICREA de la que es cofundadora y CEO, trabaja en la creación de nuevas terapias que ataquen las células tumorales.

"Peptomyc es el resultado de 20 años de investigación. Desde que era estudiante que vi que las soluciones que tenemos ahora son demasiado agresivas y tóxicas y que había que buscar una segunda vía más eficaz y sin efectos secundarios", señala. Su propuesta es una opción terapéutica que ataca la proteína Myc con un péptido inhibidor llamado Omomyc, desactivando sólo las células cancerosas y dejando la puerta abierta a pensar en "erradicar algún día la enfermedad".

Hasta el momento las pruebas con ratones han dado buenos resultados y esperan hacer los primeros tests con pacientes a principios del 2019. La buena dirección que sigue el proyecto los permitió cerrar hace un año una ronda de 1 millón de euros con capital privado y captar 2 millones de euros de ayudas públicas. "Este año, pero, hemos marcado la diferencia con una ronda en series A que nos ha dado 4,2 millones de euros para empezar la producción industrial y avanzar hacia los ensayos clínicos", afirma Soucek.

Soucek: "La investigación que se hace en Cataluña y Barcelona es una de las mejores del mundo y hay recursos que no se encuentran en casi ninguno otro lugar"

Italiana de nacimiento, la investigadora ha recorrido gran parte de Europa buscando el mejor lugar donde desarrollar su investigación. Y tal como apunta, Barcelona y el hospital Vall de Hebrón parecen ser la elige definitiva: "La investigación que se hace en Cataluña y Barcelona es una de las mejores del mundo y hay recursos que no se encuentran en casi ninguno otro lugar". Una calidad médica y científica para la cual reclama "más financiación y apoyo" para evitar que su "alto nivel" decaiga.