La farmacéutica catalana Almirall ha cerrado el primer trimestre del año con un beneficio neto de 20,4 millones de euros, un 31,5% menos que el mismo periodo del 2021. Según ha informado la compañía en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), las ventas netas han llegado a los 218,8 millones de euros, un 1,6% más que el año pasado, impulsadas por el mercado europeo, donde han crecido un 31% en términos interanuales. El Ebitda total se situó en los 59,6 millones de euros, un 19,7% menos que el 2021, y la deuda neta de la farmacéutica asciende hasta los 253 millones de euros. Después de todo, Almirall ha destacado los resultados "sólidos", que se encaminan a cumplir las previsiones de la compañía por el 2022.
La farmacéutica catalana especializada en la investigación y comercialización de medicamentos dermatológicos ha indicado que el producto Ilumetri, para el tratamiento de la psoriasi, mantuvo un crecimiento durante el primer trimestre, con un aumento interanual de las ventas del 60%. Respecto a Kilsyri, lanzado en los Estados Unidos el febrero del 2021 para tratar la queratosis actínica de la cara y el cuero cabelludo, Almirall ha destacado la "buena acogida" que ha tenido al mercado alemán y británico. Finalmente, la farmacéutica trabaja en los ensayos clínicos del antibiótico oral del Seysara, un tratamiento derivado de la tetraciclina contra la acné.