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Arrom, el atún preferido de los restaurantes japoneses

La empresa catalana distribuye este pescado en España, Francia e Italia y combate el estacionalitat con técnicas de ultracongelació al mismo barco

Josep Comas Arrom lidera la distribución de atún a los mejores restaurantes japoneses | Cedida
Josep Comas Arrom lidera la distribución de atún a los mejores restaurantes japoneses | Cedida
Aiats Agustí
Periodista
Barcelona
16 de Abril de 2018

La bisabuela de Josep Comas Arrom, na Joana, era vendedora ambulante de pescado al barrio del Borne de Barcelona. La abuela Dorotea regentó una parada al antiguo mercado de Santa Caterina que, posteriormente, heredaría Joana, la madre de Josep. Comas lidera hoy en día Arrom, una empresa distribuidora de "pescado de la mejor calidad" especializada en atún. Comas continuó el legado familiar distribuyendo este preciado pescado en sus mejores variantes: Bluefin (atún rojo), Yellowfin y la Bigeye. Y lo ha seguido adaptándose a los nuevos tiempos con la técnica de la ultracongelació en el mismo barco y haciendo crecer la empresa hasta acontecer líder del sector con una facturación de más de 20 millones de euros anuales.

 

Un idilio con el atún

De la venta ambulante durante la posguerra a una parada al mercado de Santa Caterina. Estos son los orígenes de Arrom. Cuando Josep tenía 14 años se incorpora a dar un golpe de mano a la parada: "No acababa de ir bien en los estudios y me castigaron a trabajar, esperando que volviera a la escuela", recuerda. Pero no volvió, "allá empecé a aprender el oficio, la venta al por menor, desde bajo".

"Empecé a salir fuera de la pescadería, llevaba el pescado a algunos bares de Ciutat Vella", rememora el empresario. Comas empezó a construir una clientela fuera del mercado "y entendí que el servicio era muy importante". Durante esta época -que sus padres desaprobaban-, Comas construyó el principio del nuevo proyecto.

 

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Cuando se sacó el carné de conducir amplió el radio de acción y de clientes -ahora ya con el permiso de los padres-. El 2008 Arrom pone en marcha una nave en Viladecans desde la cual empieza a servir pescado a restauradores de toda el área de Barcelona y alrededores, a mercados, pescaderías y distribuidores. De este modo y con su especialización, Arrom ha acontecido proveedor de los principales restaurantes japoneses de Barcelona. En total dan servicio además de 150 establecimientos de restauración.

"Hace unos años nadie daba un duro por el atún, pero la moda de la cocina japonesa lo ha recuperado y ha venido para quedarse"

 

"Cuando surgieron los locales de cocina asiática cubrimos la necesidad creciente de servir atún con un corte especial por sushi, sahimi o para cocinar recetas japonesas", dice el responsable de la empresa. "Hace unos años nadie daba un duro, pero la moda de la cocina japonesa lo ha recuperado y ha venido para quedarse", afirma. Pero también distribuye a todo el grupo Iglesias, el grupo de Albert Adrià, El Barrio, a los hermanos Torres, en Madrid al Diverxo, en el País Vasco con otros y un largo etcétera.

De aquella primera furgoneta a 15 actualmente. El siguiente paso fue abrir parada al mercado de los mayoristas el 2016. "Ya contábamos con clientes mayoristas por nuestra especialización en el atún, hace dos años abrimos dos casillas a Mercabarna", dice. De entonces acá, la empresa experimenta un crecimiento en volumen y en número de clientes al contar con un punto logístico clave. En solamente un año Arrom asume el liderazgo en el sector del atún y del salmón.

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La parada a Santa Caterina todavía existe, pero Arrom ha evolucionado hasta una empresa que factura 20 más de millones de euros anuales y distribuye cuatro toneladas de atún en España, Francia e Italia, y últimamente también en Londres. Distribuyen también 30 toneladas semanales de salmón y otros pescados del litoral mediterráneo, cantábrico. Arrom importa otros países como el Japón, Marruecos, Maldivas, Alaska, Corea, Sri Lanka, India, Noruega, Senegal, Turquía, Malta, Holanda, Escocia, Dinamarca y Portugal y cuenta con compradores a todos los palcos de pescado del Estado.

Así mismo, la empresa ha iniciado la tarea de distribuidor exclusivo de atún procedente del puerto mexicano de Ensenada. Este atún procedente de la Baja California es similar a la Bluefin pero es más pequeña (la del Mediterráneo tiene un peso de entre 250 y 350 kg).

Parar el tiempo

Arrom ha incorporado ahora un sistema de ultracongelació a -60 grados que garantiza la oferta de este pescado a lo largo de todo el año y con una calidad prèmium. Esta técnica Super Frozen permite "atender a la creciente demanda de atún rojo en los mejores restaurantes japoneses de Barcelona, así como garantizar al máximo el control sanitario contra el anisakis". La congelación al mismo barco permite "parar el tiempo", afirma. El 90% del atún vendido en el Japón se vende con esta técnica. Arrom colabora con la primera empresa del mundo en este sector, la murciana Ricardo Fuentes, que practica esta técnica para el mercado japonés.

Los objetivos de Arrom: una nueva nave, llevar el atún ultracongelada en Francia e Italia y ensartar la facturación a los 24 millones de euros

 

"En casa nuestra somos mucho pescado fresco, pero los tiempos cambian y el congelado puede ser incluso más bono que el pescado fresco, porque mata los parásitos, si el pescadotiene", apunta el empresario. Ahora el camino implica llevar este producto a sus mercados: Francia, Italia y también los restaurantes londinenses y ensartar la facturación hasta los 24 millones de euros.

"En los próximos meses nuestro objetivo es conseguir una nueva nave donde poder desarrollar nuestra nueva división Super Frozen para el atún" –explica- y en paralelo "me gustaría empezar a elaborar productos propios derivados del atún", concluye.

La empresa invierte un millón de euros al año en desarrollo empresarial, como por ejemplo la ampliación de instalaciones y puntos de venta, nuevo personal, flota de vehículos, etc. Actualmente da trabajo a 45 trabajadores de manera directa.