Una de las 1.000 empresas con un crecimiento más rápido según el ranking del Financial Times es gerundense. Y no sólo esto, sino que es el hogar de los maestros del corte. Tres emprendedores de Cornellà del Terri están detrás de Astech, una empresa pionera en la innovación de máquinas de corte para la industria alimentaría. "Hay competencia en el sector, pero cuando otras compañías presentan nueva maquinaria, nosotros ya vamos por la siguiente versión", señala el cofundador de Astech, Jaume Gelada.
A pesar de que la filosofía de esta empresa gerundense es "ir creciendo poco a poco", ha registrado una facturación de 3,1 millones de euros el 2018 y un crecimiento del 50% respecto al año anterior. El cóctel de su éxito es la exportación y el I+D: "Operamos en un mercado global con productos que el mercado necesitaba y no ofrecía hasta ahora", apunta Gelada. De hecho, un 10% de la facturación se invierte en I+D. Un mix que la ha llevado a situarse en la posición 337 en la lista de las 1.000 empresas europeas que tendrán un crecimiento más rápido este 2019.
La empresa nace en 2012 de la mano de tres ingenieros –Jaume Gelada es ingeniero industrial, Ricard Masoliver es ingeniero mecánico y Albert Mach es ingeniero eléctrico- que se conocieron en la universidad. Después de unos años trabajando en el sector alimentario, vieron, como muchos jóvenes con espíritu emprendedor, que lo que realmente querían era tener un proyecto propio, así que empezaron a diseñar maquinaria a medida para la industria alimentaría como manipuladores, cintas transportadores o instalaciones de tofu, entre otras.
La empresa gerundense destina un 10% de su facturación al I+D
Pero como toda empresa y economía, la especialización es vital para sobrevivir. Así que con los años Astech se fue enfocando cada vez más hacia el corte de producto congelado en sierra automática, su actividad actual. La empresa empezó produciendo un par de máquinas al año hasta que el 2015 se atrevieron a salir al mercado exterior. "Pero no vendimos nada", reconoce Gelada.
La exportación como motor para crecer
De no vender nada a exportar el 40% de su facturación de un año para otro. El 2016 el rumbo de la empresa cambió totalmente y actualmente las ventas al exterior ya suponen casi la mitad de la facturación de esta firma gerundense. Principalmente exportan a Europa, a pesar de que también hay sierras automáticas de Astech trabajando en todos los continentes. Entre sus clientes figuran compañías como El Pozo o varios interproveedores de Mercadona. Al final, son empresas que procesan alimentos para supermercados o para el canal horeca.
Las máquinas de Astech sirven para cortar tanto carne como pescado, pero con la condición que sea congelado, puesto que el producto tiene que ser rígido. Actualmente su catálogo cuenta con cuatro tipos de máquinas: para cortes paralelos de producto congelado, para cortes a grados especialmente para el pescado, para cortes longitudinales, y la última innovación, una máquina que escanea el producto para hacer el corte.
Esta última máquina es la única del mercado con un escáner para cortar con sierra según unos valores preestablecidos de peso y gruixa. De este modo, la sierra con cinta automática es capaz de cortar producto congelado y fresco a peso fijo, lo cual permite sacar el máximo rendimiento del producto y optimizar los cortes con un peso determinado. De hecho, Astech la presenta oficialmente estos días en la feria alemana IFFA, que se celebra del 4 al 9 de mayo en Frankfurt, después de casi dos años trabajando en esta innovación.
Entre los clientes de Astech figuran empresas como El Pozo o interproveedores de Mercadona
Toda la maquinaria de Astech se vende a unos 100.000 euros la unidad y tiene capacidad para cortar entre 4.000 y 5.000 kilos de producto al día. A pesar de ser una empresa exportadora, la proximidad es su punto fuerte y por eso se hace todo el proceso de producción únicamente desde la planta que tienen en Girona: el diseño de las máquinas a la oficina técnica, la soldadura en el taller y también toda la parte eléctrica y de programación. En total, la compañía cuenta con una plantilla de 22 trabajadores. De hecho, son los mismos empleados de Astech que se encargan directamente de comercializar sus productos y organizar el transporte de la maquinaria al extranjero, ya sea por la vía aérea, marítima o terrestre.
Ahora bien, este ha sido uno de las principales trabas con los cuales se han topado los fundadores de Astech: crecer en cuanto a trabajadores y en volumen de producción. "Al principio, cuando hacíamos productos a medida, lo hacíamos todo nosotros mismos y éramos capaces de controlar todo el proceso productivo. Una de las cosas que nos ha costado más ha sido el aspecto organizativo dentro de la empresa para ser más productivos", explica Gelada. El empresario añade que "gracias al esfuerzo realizado el año pasado para mejorar la organización hemos conseguido el crecimiento obtenido de manera eficiente".
La seguridad como valor añadido
La seguridad de las personas que trabajan con máquinas de corte es uno de los aspectos más relevantes y a la vez preocupantes en la industria alimentaría. Un hecho que Astech ha querido maximizar con sus máquinas de corte automático. "Antes nuestro cliente cortaba con sierra manual, una máquina muy peligrosa. Lo que hemos hecho nosotros es automatizar todo el proceso para dar más seguridad a los trabajadores", explica Gelada.
Con las máquinas de Astech, el empleado sólo tiene que cargar el producto en el aparato e indicar y programar el tipo de corte. Después, todo el proceso se hace solo sin que el trabajador tenga que estar en contacto directo con la sierra.
Pero no sólo se gana en seguridad, sino que la automatización del corte permite a los clientes de la compañía incrementar la calidad del producto cortado y tener un mayor control de la producción. Una innovación que sitúa a la empresa gerundense, que espera seguir creciendo los próximos años aunque a un ritmo de un 10% al año, más cerca de su objetivo: ser líderes mundiales en el corte con sierra automática. La automatización y la robotització también ha llegado a la línea de producción de las fábricas alimentarias de la mano de Astech.