08
de Febrero
de
2016
A principios de los años 40, acabada la Guerra Civil, el fútbol era un buen refugio para olvidar por unas horas las penurias de la época. Este deporte ya movía masas como lo hace ahora, pero el que no movía eran tanto dinero. Eso sí, "daba muchas oportunidades a los futbolistas". Lo explica Benito Garcia Debora, actual administrador de Benitosports e hijo de Benito Garcia Cano, un voluntarioso defiende central que defendió los colores azul y grana del FC Barcelona entre el 1939 y el 1945.
Sin los sueldos millonarios actuales, Benito sí que aprovechó el fútbol para montar un negocio con el apoyo de los directivos del club. "Mi padre era cómo lo Jordi Alba del equipo, y se asoció con Messi de la época", explica su hijo a VÍA Emprendida. La estrella del Barça de entonces era Mariano Martín, un potente delantero centro fichado del SantoAndreu , que dio nombre a la tienda: Deportas Martín. Era el 1943, y más de 70 años después el negocio sigue bien vive como Benitosports, con una facturación de 9 millones de euros y 60 trabajadores repartidos en sus ocho tiendas propias.
Los primeros especialistas en fútbol
El primer establecimiento lo abrieron a la avenida de la Luz, unas galerías comerciales acabadas de estrenar a los vestíbulos de la estación de Plaza Cataluña, por debajo de la calle Pelai y la Rambla de Cataluña. Después de pillar los entuertos de un primer contable que aprovechaba las ausencias de los dos futbolistas, Benito Garcia enseguida se implicó de pleno a la tienda, dejando a Mariano Martín el papel de reclamo por los forofos. Las colas eran inmensas para ver la estrella futbolística del momento vendiendo pelotas y material deportivo durante las fiestas de Nadal.
En aquella época sólohabía cinco tiendas de deportes a la ciudad, cada una especializada en un deporte diferente. Deportas Martín, por supuesto, lo hizo en fútbol. "En aquella época nohabía productos,había carencia de materias primeras, pero Cataluña tenía una industria textil y manufacturera muy importante", explica Benito Garcia hijo. Aprovechando este contexto y los conocimientos de los propietarios, empezaron a hacer su propia fabricación y suministro.
"A los años 60 tenían su propia pelota, la Nitram (Martín leído a la inversa), con la que lo Barça jugaba sus partidos", dice el actual dirigente de Benitosports. "También hacían las camisas para jugar (entonces no eran camisetas) o venían las botas Munich". Benito Garcia destaca que "era un mercado pequeño", hecho por el cual también venían juguetes, especialmente en la época navideña.
La evolución a Benitosports
Deportas Martín fue creciente y se trasladó pronto a la plaza de Urquinaona. Durante años fue una referencia del sector, y el negocio lo heredaron los hijos de los dos socios en 70. Después de 11 años juntos, el 1988 se separaron y el negocio quedó en manso de Benito Garcia hijo. "Teníamos diferencias de criterio en la gestión lógicas y comprensibles con el paso de los años", recuerda el actual dirigente. De este modo nació la marca Benitosports.
"Paralelamente fundé una central de compras, Detalle Sport, que consideró que para poder competir con la entrada de operadores extranjeros potentes había que crear la marca Base", explica Garcia. Por eso las ocho tiendas propias se llaman Base: Benitosports; mientras que la misma Base cuenta también con más de 100 tiendas. "Somos especialistas en fútbol, pero hemos ido evolucionando igual que el cliente y el modelo de negocio se ha ido adaptando", dice Garcia.
El 'modelo Buen Precio'
El mercado del deporte vivió un boom con la entrada de grandes marcas en 70. Gigantes como Nike o Adidas empezaron a imponer su ley. "Te tienes que adaptar y cambiar tu surtido a las marcas que funcionan más", dice Benito Garcia sobre la evolución de los productos que ofrecen sus tiendas. Constata que el modelo actual del sector se ha dividido por formatos: tiendas pequeñas o tiendas grandes de más 1.500 metros cuadrados.
La idiosincrasia de Benitosports lo ha traído a consolidarse en tiendas más pequeñas de centro urbano multimarca de gama mediana y media-alta; en contraposición con los grandes formatos como Decathlon, donde el 80% es marca propia. "Nosotros somos marquistes", asegura Garcia; que haciendo el paralelismo con el sector de la distribución alimentaria se alinea con el "modelo Buen Precio" más que con el de Mercadona. "Nuestra tarea es poner al alcance del cliente las tres o cuatro marcas principales con nuestra opinión sobre ellas. Tenemos la obligación de darle la oportunidad de escoger", asegura.
Del mismo modo, Garcia es consciente que su modelo se tiene que concentrar "en tres o cuatro deportes por la incapacidad de conocerlo todo". Por eso se dedican básicamente al fútbol, el running y la moda. "Siempre hemos sido honestos, hemos trabajado primeras marcas con un personal que puede dar opinión", destaca. De hecho, tiene claro que "no venderemos nada por muy barato que sea si es malo. Si vendo un anorak para ir a la Patagònia, no dejaré que pases frío".
La relación con las multinacionales
Cada vez más las grandes multinacionales del sector deportivo han apostado para abrir sus propias tiendas monomarca y acercarse directamente al consumidor. Este es uno de los aspectos que provoca una relación "difícil" con ellas por Benitosports. "Las marcas van al que van, con un concepto de rentabilidad a corto plazo que choca con el concepto de la empresa familiar, que es más de medio y largo plazo", constata Garcia.
"Te encuentras normalmente que ellos lo saben todo y tú no sabes nada. Tú lo haces todo mal y ellos todo bueno. Con 64 años que tengo me tengo que acostumbrar a no entrar a la disputa o a ser políticamente correcto ante gente joven", reconoce Benito Garcia. Lamenta que las grandes multinacionales del deporte "no tienen muchos miramientos, cuando se quema alguien lo reponen y llestos".
Ahora bien, también deja claro que "somos honestos con ellos y los reconocemos que se gastan su dinero a crear demanda, a innovar en producto, en estrellas mediáticas y acontecimientos". Garcia es consciente que "los necesitamos, pero tenemos que encontrar un punto mediano porque no podemos arriesgar con todas las novedades que nos presentan".
La venta al mayor, un buen seguro
A pesar de ser grandes especialistas en la venta al por menor, Benito Garcia apunta que "tenemos la suerte de vender a colectivos al mayor". La sección de grandes clientes, uno de los puntals de la empresa, los permite "vender y estar en relación con el mundo del fútbol y el running".
Damm, Danone, la Escuela Thau, los Jesuitas, el Real Club de Polo, el Júnior, o el Egara son algunos de estos clientes, que siguen valorando la tarea de Benitosports. "Nos preocupamos para tener nuestra propia personalidad, si la perdemos no seremos útiles por los proveedores ni por los clientes", concluye.
Sin los sueldos millonarios actuales, Benito sí que aprovechó el fútbol para montar un negocio con el apoyo de los directivos del club. "Mi padre era cómo lo Jordi Alba del equipo, y se asoció con Messi de la época", explica su hijo a VÍA Emprendida. La estrella del Barça de entonces era Mariano Martín, un potente delantero centro fichado del SantoAndreu , que dio nombre a la tienda: Deportas Martín. Era el 1943, y más de 70 años después el negocio sigue bien vive como Benitosports, con una facturación de 9 millones de euros y 60 trabajadores repartidos en sus ocho tiendas propias.
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| Benito Garcia Cano supo aprovechar las oportunidades que le daba jugar al Barça para montar un negocio. Cedida |
Los primeros especialistas en fútbol
El primer establecimiento lo abrieron a la avenida de la Luz, unas galerías comerciales acabadas de estrenar a los vestíbulos de la estación de Plaza Cataluña, por debajo de la calle Pelai y la Rambla de Cataluña. Después de pillar los entuertos de un primer contable que aprovechaba las ausencias de los dos futbolistas, Benito Garcia enseguida se implicó de pleno a la tienda, dejando a Mariano Martín el papel de reclamo por los forofos. Las colas eran inmensas para ver la estrella futbolística del momento vendiendo pelotas y material deportivo durante las fiestas de Nadal.
En aquella época sólohabía cinco tiendas de deportes a la ciudad, cada una especializada en un deporte diferente. Deportas Martín, por supuesto, lo hizo en fútbol. "En aquella época nohabía productos,había carencia de materias primeras, pero Cataluña tenía una industria textil y manufacturera muy importante", explica Benito Garcia hijo. Aprovechando este contexto y los conocimientos de los propietarios, empezaron a hacer su propia fabricación y suministro.
"A los años 60 tenían su propia pelota, la Nitram (Martín leído a la inversa), con la que lo Barça jugaba sus partidos", dice el actual dirigente de Benitosports. "También hacían las camisas para jugar (entonces no eran camisetas) o venían las botas Munich". Benito Garcia destaca que "era un mercado pequeño", hecho por el cual también venían juguetes, especialmente en la época navideña.
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| Durante años se jugó con esta pelota a la 1a División. Cedida |
La evolución a Benitosports
Deportas Martín fue creciente y se trasladó pronto a la plaza de Urquinaona. Durante años fue una referencia del sector, y el negocio lo heredaron los hijos de los dos socios en 70. Después de 11 años juntos, el 1988 se separaron y el negocio quedó en manso de Benito Garcia hijo. "Teníamos diferencias de criterio en la gestión lógicas y comprensibles con el paso de los años", recuerda el actual dirigente. De este modo nació la marca Benitosports.
"Paralelamente fundé una central de compras, Detalle Sport, que consideró que para poder competir con la entrada de operadores extranjeros potentes había que crear la marca Base", explica Garcia. Por eso las ocho tiendas propias se llaman Base: Benitosports; mientras que la misma Base cuenta también con más de 100 tiendas. "Somos especialistas en fútbol, pero hemos ido evolucionando igual que el cliente y el modelo de negocio se ha ido adaptando", dice Garcia.
El 'modelo Buen Precio'
El mercado del deporte vivió un boom con la entrada de grandes marcas en 70. Gigantes como Nike o Adidas empezaron a imponer su ley. "Te tienes que adaptar y cambiar tu surtido a las marcas que funcionan más", dice Benito Garcia sobre la evolución de los productos que ofrecen sus tiendas. Constata que el modelo actual del sector se ha dividido por formatos: tiendas pequeñas o tiendas grandes de más 1.500 metros cuadrados.
La idiosincrasia de Benitosports lo ha traído a consolidarse en tiendas más pequeñas de centro urbano multimarca de gama mediana y media-alta; en contraposición con los grandes formatos como Decathlon, donde el 80% es marca propia. "Nosotros somos marquistes", asegura Garcia; que haciendo el paralelismo con el sector de la distribución alimentaria se alinea con el "modelo Buen Precio" más que con el de Mercadona. "Nuestra tarea es poner al alcance del cliente las tres o cuatro marcas principales con nuestra opinión sobre ellas. Tenemos la obligación de darle la oportunidad de escoger", asegura.
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| Una de las tiendas de Benitosports, presente al Centro Comercial Arenas de Barcelona. Cedida |
Del mismo modo, Garcia es consciente que su modelo se tiene que concentrar "en tres o cuatro deportes por la incapacidad de conocerlo todo". Por eso se dedican básicamente al fútbol, el running y la moda. "Siempre hemos sido honestos, hemos trabajado primeras marcas con un personal que puede dar opinión", destaca. De hecho, tiene claro que "no venderemos nada por muy barato que sea si es malo. Si vendo un anorak para ir a la Patagònia, no dejaré que pases frío".
La relación con las multinacionales
Cada vez más las grandes multinacionales del sector deportivo han apostado para abrir sus propias tiendas monomarca y acercarse directamente al consumidor. Este es uno de los aspectos que provoca una relación "difícil" con ellas por Benitosports. "Las marcas van al que van, con un concepto de rentabilidad a corto plazo que choca con el concepto de la empresa familiar, que es más de medio y largo plazo", constata Garcia.
"Te encuentras normalmente que ellos lo saben todo y tú no sabes nada. Tú lo haces todo mal y ellos todo bueno. Con 64 años que tengo me tengo que acostumbrar a no entrar a la disputa o a ser políticamente correcto ante gente joven", reconoce Benito Garcia. Lamenta que las grandes multinacionales del deporte "no tienen muchos miramientos, cuando se quema alguien lo reponen y llestos".
Ahora bien, también deja claro que "somos honestos con ellos y los reconocemos que se gastan su dinero a crear demanda, a innovar en producto, en estrellas mediáticas y acontecimientos". Garcia es consciente que "los necesitamos, pero tenemos que encontrar un punto mediano porque no podemos arriesgar con todas las novedades que nos presentan".
La venta al mayor, un buen seguro
A pesar de ser grandes especialistas en la venta al por menor, Benito Garcia apunta que "tenemos la suerte de vender a colectivos al mayor". La sección de grandes clientes, uno de los puntals de la empresa, los permite "vender y estar en relación con el mundo del fútbol y el running".
Damm, Danone, la Escuela Thau, los Jesuitas, el Real Club de Polo, el Júnior, o el Egara son algunos de estos clientes, que siguen valorando la tarea de Benitosports. "Nos preocupamos para tener nuestra propia personalidad, si la perdemos no seremos útiles por los proveedores ni por los clientes", concluye.