BonÀrea ha obtenido una facturación de 2.800 millones de euros (+25,4%) y unos beneficios de 69,3 millones de euros (+6%). El grupo alimentario celebra estos resultados en un entorno económico marcado por la guerra en Ucrania y los efectos colaterales como los precios de la energía o los cereales.
Con 5.768 trabajadores y trabajadoras, BonÀrea continúa siendo una de las empresas más importantes de la demarcación de Lleida. La venta de alimentos ha representado una facturación de 1.318 millones. La red de 560 tiendas es el principal canal de venta del grupo.
El control del incremento de precios se ha gestionado, según BonÀrea, con una reducción del 14% de los márgenes comerciales. En cuanto al capítulo de inversiones, en este ámbito se han destinado 148 millones de euros. 60 millones han ido a parar a la construcción de un centro alimentario en Aragón, 35 para la mejora de procesos, 37 a la adquisición de nuevos locales y el resto a diferentes acciones operativas.
Los establecimientos de BonÀrea están repartidos por Catalunya, Comunidad Valenciana, Madrid, Guadalajara, Navarra, La Rioja y Andorra. Durante el 2022, el grupo ha llevado a cabo 24 nuevas aperturas y la misma cifra de ampliaciones de tiendas ya existentes o traslados.