"Hay que promover la confianza entre todas las personas que forman parte de un equipo, sean cabezas o trabajadores de base. Esto quiere decir tener organizaciones donde las personas se sientan apoderadas en un entorno seguro y abierto a la opinión y a la crítica constructiva. Porque de un entorno tolerante a los errores pueden salir interesantes cambios de perspectiva o, incluso, las innovaciones más insospechadas".
Con estas palabras se expresaba la directora general de la Fundació Factor Humà, Anna Fornés, en un artículo de opinión en VIA Empresa pocas horas antes de celebrar la undécima edición de los Premis Factor Humà en el Caixaforum. El lema de la gala lo dice todo: Una perspectiva transformadora. Los premiados también hablan por si sólas: Buff y Suara Coop.
Superar los propios límites. La conferencia central ha ido a cargo de Albert Llovera, piloto de rallys y embajador de Unicef. "Estamos aquí de casualidad. Disfrutemos de aquello que somos y seamos felices", ha reivindicado. Con 17 años y después de participar en los Juegos Olímpicos de Invierno de Sarajevo durante el 1984, Llovera sufrió una grave lesión en la medula y se quedó en silla de ruedas.
El piloto ha destacado la actitud, la familia y los amigos por delante de cualquier otra cosa: "Todo el equipo es quién te empuja a salir adelante, sin los otros no somos nada". Las emociones del público estaban a flor de piel. "Cuando tú sabes que eres bueno en una cosa tienes que luchar para conseguirlo", ha defendido. No se lo pusieron fácil, pero la perseverancia y la resiliencia le permitieron convertirse en el primer piloto de rallys en competir con una discapacidad.
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"En la Federación me dieron la licencia por pelmazo y el cojo acabó ganando el campeonato", ha bromeado. Incluso, ha explicado una conversación con los pilotos Carlos Sainz y Petter Solberg que le han dado siempre apoyo: "Me dijeron: 'Sabes cuál era nuestro gran miedo? Quedarnos en silla de ruedas pero des qué te conocemos, hemos perdido este miedo'". Del miedo a la superación sin límites en el Dakar.
En este sentido, la directora del área de personas de Suara Cooperativa, Mònica Vázquez, ha defendido que "acompañar es técnica pero también es actitud". Suara es una empresa de carácter social con 4.000 profesionales dedicados a la atención de personas y ha recibido el premi Impacta por haber creado una guía consultable online para el acompañamiento de profesionales de su organización que pasan por un proceso de cáncer.
"Se ha hecho con la cabeza pero nace desde el corazón y tiene como objetivo dar herramientas y unificar criterios para los profesionales que compartimos un hecho, desgraciadamente, frecuente en el entorno laboral", ha añadido.
El director general de Buff, David Camps, ha recogido el premio Factor Humà Mercè Sala en manos de Esther Massats, responsable de Comunicación del Celler de Can Roca que era la anterior ganadora por su revolución humanista. "Fue una sorpresa cuando nos llamó Anna Fornés. Lo primero que le dije es que se trataba de un error ya que no nos habíamos presentado", ha empezado.
Camps ha reivindicado que su proyecto empieza y acaba con un propósito: "Alentar las personas a disfrutar de la vida al aire libre". A la vez, ha destacado valores como la comunicación interna, la protección del medio ambiente o la conciliación de la vida laboral y personal con jornadas flexibles, teletrabajo o hábitos saludables, entre otros.
"Si estos premios no existieran nos los tendríamos que inventar", ha bromeado el conseller de Polítiques Digitals i Administració Pública, Jordi Puigneró, durante su intervención donde ha puesto de manifiesto el reto migratorio, el cambio climático y la transformación digital. "Sin tecnología es muy difícil gobernar nada y el talento en el siglo XXI es no dejar de aprender nunca", ha concluido. De la revolución humanista a la cocina de Roca a la revolución humanista al aire libre de Buff.