• Empresa
  • El cambio climático llega al espacio

El cambio climático llega al espacio

Las aplicaciones de la tecnología satelital en sostenibilidad, cambio climático y agua, protagonistas en la segunda jornada del NewSpace Economy Congress

WhatsApp Image 2024 10 02 at 13.05.32
WhatsApp Image 2024 10 02 at 13.05.32
Barcelona
03 de Octubre de 2024

¿Se pueden resolver algunos de los principales retos medioambientales desde el espacio? La sostenibilidad, las sequías (o inundaciones) y el cambio climático en general son tres de las problemáticas que más preocupan en los gobiernos mundiales. La segunda jornada del NewSpace Economy Congress 2024, celebrada en la Llotja de Mar este miércoles, las ha abordado desde la perspectiva de la industria espacial, que ya ofrece soluciones propias. Sin embargo, siempre con un rol "instrumental" y sabiendo que el sector solo puede ofrecer "observar desde el espacio".

La primera ponente de la cita ha sido Christina Giannopapa. Ella es la jefa de la oficina del director ejecutivo de la Agencia de la Unión Europea para el Programa Espacial (EUSPA) y ha asegurado que la entidad "colabora con emprendedores y pymes" para introducir la innovación en todos los sectores. "Esto quiere decir que las diferentes tecnologías del espacio no solo sirven para la navegación y las telecomunicaciones", ha advertido, antes de cifrar en 15 los segmentos de mercado en que trabaja EUSPA.

Giannopapa ha celebrado el éxito de la constelación de satélites Galileo, lanzada en el 2016. Una red de 30 satélites que ha afirmado que "es el mejor sistema del planeta" al ser el más "preciso y elaborado", y que disfrutan políticos y empresas de todo el globo. Ahora, EUSPA prepara una nueva constelación de Internet por satélite prevista para 2027 llamada Iris², la cual tendrá misiones relacionadas con la explotación, la seguridad y la reutilización. El proyecto cuenta con un presupuesto de 2.400 millones de euros y quiere competir con iniciativas privadas como Starlink, de Elon Musk.

EUSPA tiene como objetivo reducir las emisiones un 60% antes del 2050 y, de este modo, rebajar también el consumo de combustible

Además, Giannopapa ha hablado de objetivos en materia de sostenibilidad. En cuanto al transporte marítimo, la idea es reducir las emisiones un 60% antes del 2050 y, de este modo, rebajar también el consumo de combustible. Una tendencia que espera que se traslade a cualquier medio de transporte. "Las tecnologías y aplicaciones espaciales son esenciales para garantizar una mejor optimización de todas las rutas, pero también para hacerlas más seguras y ecológicas", ha insistido. Y ha aplaudido que las constelaciones EGNOS y Galileo ya estén aplicadas en el 97% de los camiones en Europa, así como que la constelación Copernicus sirva para prevenir y combatir desastres naturales.

El espacio, un "instrumento" contra el cambio climático

Carlos Fernández, Roser Roca, François Spiero i Anna Tardío, durante la intervención sobre el cambio climático, acompañados por Annalisa Donati (izquierda) | Cedida
Carlos Fernández, Roser Roca, François Spiero y Anna Tardà, durante la intervención sobre el cambio climático, acompañados por la moderadora Annalisa Donati (izquierda) | Cedida

Una de las mesas más esperadas ha sido la dirigida a la ejecución de estas redes de satélites a la lucha contra el cambio climático. Los invitados han sido cuatro pesos pesados de compañías que trabajan en estas aplicaciones. Sin embargo, ya en la primera intervención, Carlos Fernández, CEO de Telespazio Ibérica, ha rebajado las expectativas y ha instado a "ser honestos" consigo mismos. "Lo que podemos hacer como industria por el cambio climático es nada, porque desde el espacio no se puede hacer nada, solo observar", ha aseverado. En este sentido, sí ha remarcado más de una vez el rol "instrumental" que pueden adoptar firmas como la suya a la hora de ayudar a los gobiernos mundiales.

Spiero: "Hay unos 50 parámetros que definen el cambio climático y más de la mitad solo pueden obtenerse por datos satelitales"

Por su parte, François Spiero, responsable de asuntos espaciales europeos en la oficina del primer ministro francés, ha indicado que existen "alrededor de 50 parámetros" que definen el cambio climático. "Más de la mitad solo pueden obtenerse por datos satelitales", ha avanzado. Spiero ha añadido que la estrategia nacional francesa pasa por "tomar más riesgos" con tecnologías no tan desarrolladas, mientras que en el ámbito europeo son más conservadores. "Tenemos que poner a los usuarios en el asiento delantero. No seamos tímidos a la hora de innovar y de lanzar ideas", ha reivindicado.

Roser Roca, directora general y CEO de Airbus GeoTech, ha recogido el guante de Spiero. "Cuando vamos superrápidos, a veces las autoridades nos frenan y nos piden 3 años", ha lamentado. Una situación que ha calificado de "elefante en la habitación" en el sector y que hay que "afrontar". "Si hacemos historia y disrupción, tendremos que definir las regulaciones desde el día 1", ha rematado.

Por su parte, Anna Tardà, responsable operativa de sensores hiperespectrales en el Instituto Cartográfico y Geológico de Catalunya (ICGC), ha explicado un caso de éxito en Catalunya gracias a la tecnología espacial. A través de Sentinel-2, un programa que ayuda a seguir la evolución de bosques y cambios a la corteza terrestre, la ICGC pudo trabajar con los cuerpos locales en lugares como los bosques del Maresme. "En la montaña no hay rutas y la accesibilidad es difícil, de forma que las autoridades tienen que saber dónde está el problema", ha apuntado. Por eso, ha considerado la constelación Copernicus (donde se enmarca el programa Sentinel-2) "una buena herramienta".

La tecnología espacial, una laguna en el reto hídrico

El aprovechamiento del agua del río Besòs permitirá disponer de más recursos hídricos para hacer frente a la sequía | Cedida
El aprovechamiento del agua del río Besòs permitirá disponer de más recursos hídricos para hacer frente a la sequía | Cedida

En un año en el que la sequía ha vuelto a ser una pesadilla para Catalunya, la mesa dedicada a la gestión del agua también se ha presentado como un debate crucial. Antoni Ventura, director ejecutivo de Aigües de Manresa, ha revelado que su compañía todavía "no usa tecnologías por satélite para prevenir o identificar escapes de agua", aunque sí que ha admitido que "es una cuestión que nos planteamos".

A la vez, ha reconocido que los días de niebla o nubes tampoco pueden disponer de los aparatos del espacio para medir la calidad del agua a través de fotografías. "Las tenemos que recrear con una maqueta para poder predecir las situaciones como los episodios de contaminación, a pesar de no tener las imágenes", ha explicado.

Bellvert: "Todavía hay una gran brecha entre los datos que proporcionan las tecnologías de satélite y las decisiones de los agricultores"

El caso de Aigües de Manresa no es aislado. Esta divergencia entre usuario y tecnología lo ha confirmado Joaquim Bellvert, investigador del programa Ús Eficient de l'Aigua en Agricultura del Institut de Recerca i Tecnologia Agroalimentaris (IRTA). El experto ha informado que "todavía existe una gran brecha entre los datos que proporcionan las tecnologías de satélite y las decisiones de los agricultores". Una circunstancia que no es baladí, dado que "el sector agrícola utiliza alrededor del 70% del agua en todo el mundo".

Esta problemática se agrava en las épocas de sequía, cuando la gestión del agua tiene que ser más cuidadosa que nunca. Por eso, Ji Won Bang, ejecutiva de ventas de Planet Dataset, ha recomendado crear "gemelos digitales" que permitan "no solo simular, sino predecir cualquier cambio significativo". Su empresa se dedica al negocio de los datos, y ha asegurado que la aplicación más utilizada, desde hace muchos años, es "la vigilancia de la política del agua".

Finalmente, Laura Moreno, CEO d'EarthPulse, ha exigido "más actores, más conciencia y más regulaciones" para poder superar el reto hídrico. "Nosotros somos proveedores de soluciones y tenemos que integrar las soluciones y ofrecer la información que nuestros clientes necesitan", ha concedido. Por eso, un marco regulatorio puede "implicar" a los usuarios y las empresas a seguir unas normas. "Tenemos que educar qué hacer con el agua y cuáles tienen que ser los límites", ha criticado.

El futuro del agua, en las estrellas

Eso sí, a continuación ninguno de ellos se ha atrevido a predecir qué sucederá durante la próxima década. Tal y como ha destacado Won Bang, últimamente se ha habilitado una tecnología que permitirá identificar la basura marina desde los satélites de la órbita baja. Un hecho que el sector consideraba imposible hace solo 2 años. Ahora, noticias como esta provocan "ilusión" a una industria que no esconde que busca reconciliarse con el espacio.