El cáncer de piel es un crecimiento anormal de las células cutáneas. Hay varios tipos y se suelen clasificar como cáncer de piel no melanoma (principalmente el carcinoma basocel·lular y el carcinoma de células escamoses) y melanoma. El carcinoma basocelular es un tumor epitelial cutáneo maligno que se desarrolla a partir de los queratinocitos basales. Hoy en día, es el cáncer de piel más frecuente en la población blanca, aunque puede observarse en pieles oscuras, y se ocasiona debido a la exposición intermitente y recreativa al sol, que es un factor de riesgo más significativo que la radiación UV acumulativa. Los estudios epidemiológicos informan que la incidencia global está aumentando en todo el mundo, particularmente en grupos de edades más jóvenes, y se está convirtiendo en un problema de salud pública cada vez mayor.
En su mayoría suelen manifestarse en áreas expuestas al sol como cara, principalmente en sus áreas mas convexas, nariz, mejillas, frente y orejas, cuello, escote, pero también pueden presentarse en áreas protegidas por la ropa y en el cuero cabelludo. El carcinoma basocelular casi nunca hace metástasis, pero a veces puede ser localmente destructivo, por lo que debe ser detectado y tratado de forma temprana. Puede manifestarse como un pequeño bulto del color de la piel, rosa o marrón, una mancha rosa o una ulcera que no sana y sangra fácilmente.
El carcinoma escamocelular es un tipo de cáncer que se desarrolla en áreas fotoexpuestas como el cuero cabelludo, cara, labios, orejas y el dorso de las manos
El carcinoma escamocelular es un tipo de cáncer que se desarrolla principalmente en áreas fotoexpuestas como el cuero cabelludo, cara, labios, orejas y el dorso de las manos, aunque también puede presentarse en piel cubierta por la ropa. Son de especial riesgo las personas con exposición crónica al sol, hombres y mujeres desprovistos de cabello, personas inmunocomprometidas (por tratamientos como quimioterapia, inmunosupresores, enfermos de VIH). Puede aparecer en cicatrices, úlceras crónicas, quemaduras y sobretodo a partir de lesiones precursoras, llamadas queratosis actínicas, las cuales pueden presentase como placas de color rosa con descamaciones sutiles que pueden irse tornando mas gruesas. En ocasiones pueden aparecer como nódulos de color rosa que crecen progresivamente.
Aparecer como peca o lesión nueva
El melanoma es el cáncer de piel que deriva de los melanocitos, la célula encargada de otorgarle el color a la piel. Puede aparecer en un lunar o peca previamente existente o como una lesión nueva. Puede aparecer en cualquier parte del cuerpo cubierta por piel, incluido en las uñas y las mucosas. Puede manifestarse como una mancha nueva o antigua con un crecimiento súbito o cambio en su aspecto, tamaño o color presentando varios tonos de marrón, azul, gris, negro, rojo, rosa con bordes irregulares, asimétricos, en ocasiones mal definidos, en ocasiones pica o sangra. El melanoma puede generar metástasis a distancia por lo que es vital su detección temprana.
El cáncer de piel puede ser detectado de forma temprana por el dermatólogo mediante un examen clínico y mediante epiluminiscencia
El cáncer de piel puede ser detectado de forma temprana por el dermatólogo mediante un examen clínico y mediante epiluminiscencia por lo que es muy importante realizar una revisión anual e incluso acudir al dermatólogo en caso de detectar una lesión nueva de aspecto sospechoso o que cause picor, escozor, que sangre o que recidive tras curar.
Es importante familiarizarte con tu piel y tus lunares con la finalidad de ser capaz de detectar algún cambio y acudir regularmente al dermatólogo para una evaluación completa.