Le escribo esta carta para hacerle saber que he leído su artículo publicado en VIA Empresa titulado Dos reservas de la biosfera franquista, y para trasladarle mi profundo malestar ante las aseveraciones tan contundentes y -a mi parecer- tan injustas hacia Renfe.
Lamento profundamente que tenga esta imagen de nuestra empresa y que base sus afirmaciones en un tiempo y un lugar pretérito, y que reduzca el trabajo que llevamos a cabo a "mantras" o tópicos que desgraciadamente, en algunos entornos, calaron y se han usado para ridiculizarnos.
Detrás de Renfe, hay cerca de 15.000 profesionales comprometidos con su trabajo y con el objetivo de la empresa, que no es otro que dar el mejor servicio a los más de 500 millones de viajeros que cada año se desplazan en nuestros trenes. Como en todas partes, nos podemos encontrar con situaciones en las que tenemos que mejorar, pero lo que no se puede consentir es elevar la anécdota a categoría.
La fecha de fundación de una empresa, en este caso en 1941, no es motivo para vincularla a un momento histórico o político
Por otro lado, la fecha de fundación de una empresa, en este caso en 1941, no es motivo para vincularla a un momento histórico o político. Renfe, en estos más de 80 años de existencia, si ha sido leal a alguien es -y lo vuelvo a repetir- a sus clientes. Este es nuestro propósito, ofrecer el mejor servicio a las personas que nos eligen.
Somos una empresa moderna, valorada internacionalmente y con presencia en numerosos proyectos ferroviarios en todo el mundo. Somos una empresa que apuesta por la digitalización y por la sostenibilidad, porque creemos en la aplicación de la tecnología para mejorar la calidad de nuestros servicios y porque estamos comprometidos con el medio ambiente.
A menudo, para satisfacer a aquellos que esperan la crítica a aquello con lo que no comulgan, caemos en la tentación del descrédito. Y, a menudo, nos ahorraríamos muchas ofensas si, todos juntos, practicáramos la empatía. Conocer es entender.
Por todo esto, señor Roig, me pongo a su disposición por si alguna vez tiene una queja, un comentario o una inquietud sobre nuestros servicios; estaremos encantados de ayudarle. Y, por supuesto, estoy a su servicio por si, en algún momento, quisiera conocer de primera mano cómo trabajamos en Renfe, facilitándole todo aquello que le sea menester en su tarea periodística.
Atentamente,
Antonio Carmona